Money Generator [TodoMomo / BNHA]

Capítulo 9

-¡¿Que hiciste qué?!

Un par de azabaches amigas se encontraban en la habitación de Kyouka. Ambas estaban conversando respecto a lo ocurrido hace... ¿cuánto? ¿Diez minutos?

-Yaomomo, no creí que fueses tan atrevida. -confesó la de Earphone Jack a la nombrada, quien bajó la cabeza muy avergonzada.

-¿Qué crees que piensa de mí ahora? -preguntó dudosa y temerosa Yaoyorozu.

-Ni idea, él es como un libro cerrado con candado y todo. -alzó sus hombros-. Pero... supongamos que, como Inveriano que es, no está molesto.

-¿Inveriano? -Jirou movió su mano hacia abajo, indicando que ése no era el tema a conversar-. Eh... ¿entonces qué hago? ¿Y si me odia?

-¿Odiarte? Nah, exageras, Yaomomo. -negó la azabache-. Mira, tan sólo tienes que preguntarle si le fue incómoda tu petición de que te besara.

-Lo dices cómo si fuese de lo más fácil...

-Vamos, anímate, es Todoroki, si no ha dicho nada es porque no le importó en lo absoluto. -dijo Kyouka intentando animar a su amiga.

A pesar de lo dicho, a Momo no le agradaba la idea de que a Shoūto no le importasen esos besos, porque sí, fueron dos. Ella quería que aquello fuese importante para el bicolor, pero obviamente al ser alguien un tanto inexpresivo, le era bastante complicado saber si realmente disfrutó de tal contacto.

Yaoyorozu suspiró, se preocupaba mucho por algo que ni siquiera sabía su respuesta. La joven se levantó y se despidió de su amiga, agradeciéndole por el "apoyo" que le había dado la misma; Jirou preguntó si ella deseaba quedarse en su habitación pero la azabache se negó, puesto que estaba dispuesta a hablar con el heterocromático...

...O eso era lo que tenía planeado.

Se encontraba frente a la puerta de su habitación, sí, no se dignaba a abrirla por los nervios de encontrarse con Shoūto, despúes de todo había salido conrriendo repentinamente luego del contacto entre ambos. Su mano estaba en el pomo, dudando si abrir o no, hasta que, inhaló profundamente, y abrió la puerta de golpe.

Lo que vió... no pudo ser menos, un dormido Todoroki estaba frente a su mirada, respirando de manera tranquila y relajada. Momo se conmovió al ver a su compañero; entró en silencio, intentando llegar a su cama, mas sintió como una mano agarraba su pierna y provocó que la azabache se cayera, nada más y nada menos que encima del heterocromático.

-¡¿Todoroki-san?! -la de ojos oscuros se encontraba sobre el nombrado en sus pensamientos-. ¿Todoroki...-san?

-Escapaste de la nada y ahora apareces repentinamente, ¿qué te crees? -regañó el bicolor-. ¿Acaso no cumplí correctamente tu petición?

-¡N-No es eso! -exclamó Yaoyorozu-. Es sólo que... creo que fuí muy lejos, lo lamento mucho, Todoroki-san.

-¿Por qué te disculpas? -preguntó serio a la azabache-. No hiciste nada malo.

-¿Nada malo? ¡Te obligué a besarme! -exclamó apenada-. Como compañera, no debí haberte pedido aquello.

-Yaoyorozu. -le llamó-. El propósito del proyecto es acercarnos más, y supongo que algo de contacto físico no hace mal a nadie; no le des más vueltas, no me molestó.

Momo asintió, sabía que Shoūto era alguien temperamental y probablemente no diría nada sobre lo sucedido, sin embargo... la indiferencia del mismo le lastimaba, su corazón sufría y ella temía saber la razón por la que se encontraba de tal manera.

Lo admitía, le agradaba estar con Todoroki y ese par de besos llenaron su corazón de felicidad plena y pura; por lo mismo a ella no le daba igual lo que pensase el bicolor sobre ello, como si fuese un mero contacto de compañeros.