Capítulo V

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Pov Lena

Todo esto me tiene tan confundida, primero fue con Kara y ahora con Diana. Yo no soy de esas chicas que les gusta pasar una noche sin compromiso. No me gusta jugar con los sentimientos de los demás, pero no puede decir los mismo de ella. En fin hoy no quiero pensar en eso, ya bastante tengo con L-Corp, como para pensar en esas tonterías que no soy nada productivas. Además los actos ya están hechos, ya lo realice y tengo que afrontar las consecuencias de mis actos, como un adulto responsable.

El capital del avión ya da su aprobación para salir. Eso es bueno porque nunca me han gustado los aviones, ni los helicópteros. Siento que en cualquier momento algún cable este en mal estado o alguno de los enemigos de mi familia quiere matarme. Sé que parezco una paranoica, pero después de tantos atentados contra mi creo que ya estoy acostumbrada.

Salí de aeropuerto y espere en la parte donde se estacionan los autos y algunos autobuses. Mi chofer llegaría en cualquier momento y solo tenía que esperarlo por unos cuantos minutos. Mientras tanto mis ojos observan el paisaje urbano, decorado con algunos árboles. Era simplemente hermoso estar nuevamente en Nacional City.

A lo lejos vi un gran auto negro todo polarizado, que se parqueo muy cerca de mí. La puerta se abrió, dejando ver a un señor de traje negro. El camino tranquilamente, mirando unos papeles que tenía en las manos, hasta que llego hacia mí.

-Señorita Luthor acompáñeme por favor. No grite y no dijo absolutamente nada- El toma mi brazo con la intensión de llevarme al auto, pero yo no se lo permito.

-Señorita, no me haga utilizar esto- De su cintura saca un pistola calibre cuarenta y la posicione mi cadera, haciéndome tensar al instante- Camine-

Esto era el colmo, no estoy ni cinco minutos tranquila y ya tengo otro problema. Lo peor de todo es que no sabía quien podría ser.

Eres un imán de problema

Una vez en el auto, veo que hay más personas en traje, todo están con un comunicador en su oreja y unos lentes de sol negros. Todo estaban tan serios, ni parpadeaban, no parecían seres humanos, todo lo contrario parecían robots.

-¿Quién es su jefe?- Pregunto algo exasperaba no me gusta estar rodeado de hombres y menos que estén armados.

-Eso es información confidencial señorita- Respondió otro hombre, uno que se encontraba adelante mío.

-Ohh...vamos, saben muy bien que les puedo dar el doble, incluso el triple si me dejan ir- No me gusta sonar arrogante, pero tenía miedo a que me hagan algo- ¿Entonces tenemos un trato señores?-

-Mire señorita no la atamos, ni le pusimos una mordaza porque así lo dijo el Jefe- Nuevamente hablo el hombre que me había traído hasta este vehículo- El jefe dijo que había que tratarla con amabilidad, pero si se resistía tendríamos que utilizar la fuerza-

Rodé los ojos y mejor ya no dije nada. Mientras el auto seguía circulando por las calles, mi mente se ponía a pensar quien podría ser. Mi primera opción es Edge, desde que compre Catco siempre ha estado tratando de vengarse de mí. Y por el otro lado esta mi madre, aunque es raro que no esté Cyborg Superman por aquí.

-Sígame señorita- Todos los hombres se bajaron el auto, abriendo las puertas. No podía ver en donde estábamos, había muy toca luz, la necesaria para caminar.

Los uniformados me llevaron a una oficina. Abrieron la puerta, donde puede mirar un escritorio y un hombre que estaba de espalda.

-¿Quién eres?- Pregunte bastante molesta de ser siempre victima de esos secuestros. Me senté en una silla, mientras escuchaba como cerraban la puerta.

El Dilema Del Corazón [Wondercorp/Supercorp]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora