El Dilema Del Corazón [Wondercorp/Supercorp]

Capítulo X

Pov Kara

No lo podía creer, lo que mis ojos veían él estaba frente a mí. Pensaba que estaba soñando, que todo era un juego producto de mi imaginación y de mis recuerdos. Recuerdo todas esas noches frías, oscuros que llore en silencio por él, hasta quedarme sin lágrimas. Todos los sueños que surgían en mi mente, las pesadillas que se aprecian noche tras noche, pero también las una y mil posibilidades de como seria nuestro reencuentro. Sin embargo ninguna fue como esta, se sentía tan natural, tan real.

-Kara...Volví- Su voz resonó en mis oídos, esa voz única que tenía. Se acercó más a mí, tomando mi mejilla con su mano para darle una suave caricia con su dedo pulgar. Su tacto se sentía real, no era un sueño, él estaba frente a mí.

Tal vez había cambiado un poco en este tiempo como su barba, que está más poblada y tenía un mejor diseño, pero seguía siendo el mismo hombre del que me enamore perdidamente hace unos meses.

-Mon-El- Susurre con sencillez. Mis brazos se alargaron para capturar su torso con mis manos y entrujarlo contra mí. Se sentía tan bien estar cerca de él, otra vez. En medio del abrazo hundo mi cabeza en su pecho, solo para mera comprobación. Escuchar el latido de su corazón fue la última prueba que necesitaba para confirmar todo este torbellino de sentimientos que había en mi interior.

La euforia se hizo presente en mí, él fue capaz removió todos los sentimientos que estaban enterrados en mi corazón, esos que había guardado celosamente en los más recóndito de mi interior, tal vez por siempre.

Tomo con sus dedos mi barbilla delicadamente, elevándola para que pueda verlo a los ojos. Ver lo pardo de su mirada de devolvió la vida, podía sentir que hasta el oxígeno que respiraba era mejor cuando Mon-Él estaba a mi lado.

-Así es preciosa, al fin regresa. Como te lo prometí- Su mano libre se encamino a mi cintura, acompañado de una sonrisa que se enmarco en su rostro, era esa sonrisa que al principio odiaba pero después la termine por amar.

-Te he extrañado tanto- Mi vista baje hacia sus labios. Recuerdo la última vez que los bese, ese momento donde tuve que sacrificar mi felicidad por el bien de la humanidad. He pasado mucho tiempo anhelando probar sus labios otra vez, y ahora que estoy tan cerca de ellos los quiero volver a probar otra vez.

-Puedes hacerlo Kara...- Él se acercó peligrosamente a mis labios, podía sentir como su cálida respiración se chocaba con la mía. Los sentía a milímetros de mí, tan cerca de mi boca, entreabiertos, dándome el espacio necesario para atrapar sus labios.

Mi ganas de besarlo inundaron mis pensamientos, todo mi cuerpo era un caos, todo actuaban positivamente cuando Mon-El estaba así de cerca. Acerque mis labios solo un poco más y el ansiado beso llego.

Cerré los ojos, así se sentía mejor. Nuestros labios succionaban el labio contrario con rapidez, degustando el sabor del otro. El hecho que tenga una barba más voluminosa, hizo aún mejor el beso.

Sentía la gloria ante sus besos, no sabía en donde estaba paraba, podría estar en medio de la lluvia, de la nieve o incluso en la boca de un poderoso huracán pero con el perdía la razón. El tiempo se detenida, me sentía inmoral con él. El mundo puedo ser destruido, pero mientras este en sus brazos sabía que estaría a salvo de cualquier peligro, pero más que todo sabía que con el sería feliz. Pero sentía que algo estaba diferente no era el mismo sabor en sus labios, algo estaba mal y no sabía que era mas no le di importancia y seguí con el beso.

El ambiente también ayudaba al beso, solo se escuchaba como nuestros labios se chocaban entre si y lo volvían a hacer una y otra vez. Subí los brazos hacia su cuello, jugando con el cabello que había entre su nuca, sin dejar en ningún momento de dejar de besarlo con pasión. Hasta que varios aplausos sonaron en el vacío pasillo. Me separe de Mon-El para ver quién era.