Capítulo 4 :3

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- ¿Chica vans?/¿Chico creeper?.- Dijimos nuestros apodos al mismo tiempo y sonreímos.

- ¿Q-que haces aquí? - Tartamudee.

- Lo mismo me preguntaba.-dijo- Pero respondiéndote he venido a acompañar a mi hermana a que salga un rato a jugar– ¿Su hermana? ¡SU HERMANA ESTA AQUÍ! Siempre he querido conocer a si hermana, joder, joder, joder-  ahora respóndeme tú, ¿Qué haces aquí?

- Pues… solo quería un lugar cómodo para poder dibujar y encontré esta pequeña plaza y me gusto esta banca, no me preguntes porque, solo losé. Tiene algo que me llamo la atención y me quede aquí, hasta pensé dejármelo como un lugar de descanso o algo así.

- Pues dibujas muy bien eh? Y alto un momento que yo eh pilladoh esto primeroh chica vans – Le hice un puchero – Vale, creo que puedo compartirlo – No sé porque pero le abrace.

- ¿Y eso? – Mis mejillas empezaron a arder al darme cuenta de mi acto y me separé, ¿pero qué coño acabo de hacer? ¿Y ahora como me explico? Ni yo sé porque ice eso.

- No lo sé - Dije aun con mis mejillas ardiendo, él me sonrió – ¿Y dónde está tú hermana?

- ¡MIERDA! – Se levantó de golpe y miro para todos lados- ¡Francisca! (No sé cómo se llama su hermanita:c asique dejémosla como Francisca ¿okey?) - ¡¿Dónde estás?! – Espero una contesta pero nada- Joder, mis padres me mataran.- Se llevó las manos al pelo, yo me pare junto a él

- Tranquilo, ella debe de estar bien- Trate de calmarlo – Dime como es y te ayudo a buscarla ¿Vale?- El asintió.

- Tiene el pelo Castaño claro y muy liso, los ojos son claritos, anda con un chaleco rosa y jeans – Estaba realmente nervioso, pero quien no lo estaría, acaba de perder a su hermana, yo estaría en la misma situación si se me llegará a perder a mi hermana pequeña.

- Te prometo que la encontraré, el parque no es tan grande puede estar en cualquier parte, pero tranquilízate ¿vale? – Le toque el hombro- Ella estará bien yo lo sé.

- Gracias – Me abrazo, pero duró menos de 10 segundos, como me gustaría que hubiera durado un poco más ¡__ POR FAVOR! Deja de pensar idioteces ¿okey? Él es tú ídolo nada más, además que nunca se fijaría en una suscriptora- Pensé - ahora busquémosla, tú te vas por el lado derecho y yo el izquierdo ¿bueno?- Asentí y fui en su búsqueda.

Estaba un poco preocupada ¿Qué pasa si no la encontramos? Rubius debe de estar pésimo, además es mi culpa, si no le hubiera quitado tiempo conversado, ella ya estaría con él jugando. Busque en diferentes partes pero no encontraba nada, de pronto sentí sollozos, fije mi mirada y encontré a una niña que estaba junto a un árbol llorando, tenía las mismas descripciones que dijo Rubén, entonces imaginándome que fuera ella me acerque.

- Hola ¿Por qué llorar pequeña? – Me limite a preguntar, ella se corrió un poco más atrás, quizás tiene miedo ¿Quién no? Está hablando con una desconocida- Tranquila, no te haré daño solo quiero ayudarte- Dejo ver esos hermosos ojitos claros y me miro valientemente.

-E-esque m-me he perd-dido – Dijo entrecortado.

- ¿Bienes con alguien?

- S-si, con mi h-hermano

- Espera… ¿Tú te llamas Francisca? – Me miro extrañada.

- ¿Cómo sabes mi n-nombre? – ¡Es ella! La he encontrado, ¡OHH SII! Si no estuviera enfrente de una niña con miedo y además perdida haría un fabuloso baile de victoria, pero si lo hacía se podría asustar, solo me limite en abrazarla.

- ¡Por fin! Tu hermano está muy preocupado por ti, te hemos buscado por toda la plaza, pequeña – La solté y le dedique una sonrisa.

- ¿Conoces a Rubén?- Dijo más calmada- no eres una violadora ni nada ¿verdad?- El mismo humor que el hermano, siempre tan cuidadosos.

¿Amor imposible? No lo creo (Elrubius y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora