¿Amor imposible? No lo creo (Elrubius y tu)

Capítulo 14 :U

¡OH DAMN!

-Mirad, ahí están los tortolos- Aviso Rubén apuntando con su dedo índice a aquella parejita que conversaban animadamente tomándose un café.- Se ve que la están pasando bien.

- No sé porque, pero quiero joderles el momento- Matizo Daniel- Me encanta arruinar estos tipos de situaciones y más si es de Fernanda.

- Joder, me imagino la de planes maliciosos que debes tener en la cabeza en este momento.

- Estoy de acuerdo con la chica está- Habló Rubén.

- Bueno ¿y qué hacemos aquí? Vamos ya, tengo un hambre que no se imaginan- Daniel, mi amigo Daniel, siempre piensa en comida ¿Es que acaso vive de la comida? No pasa ni minutos sin que coma algo, y además es flaco, no engorda para nada este chico ¿Existen personas así? Por supuesto.

- ¿Vamos, no? Que a mi igual me empezó a rugir mi estómago.- Los chicos asintieron y nos fuimos en camino a prácticamente Destruir precisamente esa ¿cita? O lo que fuera, ciento que estos chicos en el futuro serán algo más que solo amigos, cada vez que se miran los dos, les aparece una sonrisa boba y además sus ojos se les iluminan.

¿No son estos síntomas de amor?

No lo sé pero algo me dice que acabaran juntos, lo presiento, a Fernanda siempre le gusto Mangel pero como ídolo y ya, lo mismo diría de yo hacía Rubén, además hacen una linda pareja, son muy monos ¿Será amor a primera vista? Puede ser, aunque no lo puedo confirmar, primero debo saber si es que a Fernanda le gusta Mangel y si él le gusta ella.

Entramos al Starbucks, me da gracia porqué Fernanda usa lentes y tiene su IPhone, eso la hace hipster ¿no? Según Rubius es así.

-¡Qué tal Fernanda! – Dijo Daniel, sentándose al lado de ella, en realidad se tiró como un saco de papas sobre ella. Rubén y yo andábamos a paso lento hacía la mesa, hasta que llegamos junto a ellos, Rubén se acomodó junto a Mangel en los asientos de enfrente de nosotros, mientras yo me quedaba con el retardado de Daniel y mi amiga Feña.

- ¿Quieren que valla a pedir?

- Si, por favor- Dijeron todos a unísono.

- Bueno ¿Qué quieren que les traiga?

- Yo quiero un Frappuccino y un muffin- Se apresuró a responder inmediatamente Daniel.

- A mi tráeme un capuchino de vainilla, ya me comí un Muffin y quede satisfecha- Habló Fernanda.

- Yo también quiero un capuchino de vainilla- Dijo Mangel.

- Yo quiero un Frappuccino y también un muffin.- Dijo por último Rubén.

- Okey, Entonces dos capuchinos de vainilla, tres Frappuccino y tres maffin, bueno… ya los tengo claro, vuelvo en un momento.- Hablé.

- ¿Quieres que te ayude? Son muchas cosas- Propuso Rubén con una amplia sonrisa.

- Vamos entonces.- Le devolví la sonrisa y comenzó a levantarse del asiento de inmediato. Caminábamos a paso lento mirándonos de vez en cuando, hasta que llegamos a la caja donde pediríamos las cosas.

- Buenos días, ¿Qué quieren pedir? – Nos atendió un agradable chico, Rubio, alto y de ojos verdes, muy lindo la verdad.

- Emm… Deme Tres Frappuccino, tres muffin y dos capuchinos de vainilla por favor.

- Para usted lo que sea– Me guiño el ojo aquel chico, yo me sonroje- Vuelvo enseguida.

- Has ligado bien ¿eh? –Habló Rubén con una sonrisa.