Capítulo 36

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Observar, era lo único que hacia desde que después de muchos años le devolvieron su libertad, se escondía a simple vista pero esos tontos realmente eran muy ingenuos y despistados, ella siempre ha estado ahí, desde el comienzo, los conocía a todos y cada uno de ellos, lo sabía todo.

Jamas iban a detenerla, ni siquiera con ese mocoso, despertar lo no valdría de nada si ella conseguía el poder que necesitaba.

Eran demasiado débiles, y Sanhee muy emocional, sus sentimientos lo hacían débil contra el enemigo, se los advirtió pero los viejos nunca la escuchaban, pero no importaba, pronto se desharía de ellos también.

La silueta de la mujer era tenebrosa, oscura y  con una sonrisa que no traía buenos presagios, a su alrededor solo había tierra seca y árida, los arboles marchitos y pudriéndose, algunos animales yacían en el suelo sin vida.

Muerte, devastación y destrucción era lo que quería, para todos y poder ser libre al fin.

Vengarse de lo que le hicieron muchos años atrás.

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Algunos días transcurrieron después de sus mini vacaciones, los chicos habían regresado a la escuela, por su parte Kyungsoo, Tao y Jongdae volvieron a sus actividades normales en la cafetería, realmente habían extrañado el olor del café y galletas recién horneadas.

Kyungsoo hablo con sus padres, les contó todo lo que había sucedido incluso la propuesta de Jongin, ambos gritaron de felicidad al escuchar la noticia, solo era cuestión de tiempo para que tuviera su propia familia, junto a su hijo y su alma gemela, al pensar en eso sus rostro no podía evitar pintarse de rojo y sentía un calor subir hasta sus orejas, sacudió la cabeza rápidamente para sacar esas ideas por el momento, necesitaba concentrarse en otros asuntos.

Continuo preparando el relleno de las tartas de frambuesa, ahora sin la ayuda de los chicos debían ser mas activos, Chanyeol esta vez no estaba por algún papeleo que tenia en la escuela de música, tan solo era medio día, el lugar estaba casi lleno y agradecía que Jongdae pudiera ver nuevamente ahora era el encargado de preparar el café, Minseok los ayudaría solo los fines de semana y días feriados .

Sonrió para si mismo, se sentía feliz después de mucho tiempo, hacia lo que le gustaba con las personas que amaba y tenia a su alma gemela, su familia junta u feliz, si no fuera por esos locos sueltos, todo seria perfecto.

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Sehun pensaba y pensaba, las desventajas de ir a una escuela diferente que sus amigos era que no podía recurrir a sus consejos, solo le quedaba recurrir a su otro único amigo en ese lugar

- Oye Jongup puedes dar me un consejo - le pregunto a su amigo bajito, de cabello negro, sonrisa tímida, con un lunar en la nariz y muchos piercings en su oreja izquierda.

- Seguro - respondió con voz pausada y calmada, si algo caracterizaba a su amigo moon era su increíble habilidad para hacer silencio.

- Tengo un secreto que debo contar a mi novio pero ¿es mejor decir le antes o después de que le proponga matrimonio?

Jongup se quedo en silencio mirándolo fijamente durante cinco minutos, ninguno de ellos parpadeaba  y Sehun comenzaba a impacientarse.

- Antes, definitivamente antes o posiblemente termines siendo conocido como el chico que se divorcio antes de casarse - respondió al fin muy convencido con lo que dijo.

- Tienes razón, eso haré - tomo un sorbo a su bebida que yacía olvidada desde hace un rato - Ahora ¿Como debería proponer se lo?

Moon solo se dejo caer contra la mesa haciendo plegarias porque alguien terminara con su tortura, jamas había tenido pareja antes por lo tanto no sabría como proponer semejante cosa.

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