Capitulo 36

156 8 4
                                    

Era domingo, y como todos los domingos, no sabía que hacer.

Bueno, algunos domingos.

Casi todos. 

La cosa era que no sabía que hacer y estaba demasiado aburrida. 

No sabía si llamar a Harry, ya que él -por primera vez- me había dicho que tal vez no podría pasar el día conmigo. Era raro, porque casi siempre él me lo pedía. Pero, igualmente, yo no iba a hacerlo.

Estaba tirada en el sillón mirando al techo. Pensaba en muchas cosas, tantas que ninguna de ellas eran un pensamiento claro.

Lo mejor de que Harry no pase la tarde conmigo, era que no tendría que despedirme de él, ya que al siguiente día debía irme. 

Ayer en la noche habían llamado diciendo que mamá me había inscrito, y mi nombre era uno de los quince que estaban en el panel de "Time to Shine School", el lugar en el que viviría -ya que era como uno de esos internados, por ser una escuela de modelaje- por un año completo, y tal vez más. 

Mamá se había encargado de mi vuelo, que salía a las nueve en punto de la mañana, por lo cual, debía despertarme por lo menos a las seis de la mañana, para poder estar en el aeropuerto a las siete y media, para poder pasar toda la fila y el chequeo de maletas antes de las ocho y cincuenta, a la hora que debía subir al avión. Eso significaba: yo sufriendo.

Mamá también se había encargado de arreglar todo en la escuela, y, ¿adivinen quién tendría que dar cuatro exámenes en un mismo día, con solo quince horas de anticipación? Claro que sí, yo. Al tener que faltar a todo lo que resta de mi último año escolar, debía hacer algo. Si quería, alguna vez, tener un buen trabajo -sí, el modelaje contaba- debía "terminar" la escuela. Si quería faltar a por lo menos seis meses a la escuela apodo infierno debía pasar matemáticas, historia, geografía y ciencias. Fea vida.

Me había desvelado toda la noche estudiando para mis exámenes, ya que, aunque ya sea una, no quería ser solo una vaga de grande. El caso era que solo había alcanzado a dormir dos horas, ya que había terminado de aprender y entender y memorizar todo, para volver a comenzar de nuevo.

 Por primera vez en mi vida, había dejado de ser una floja, y eso me sorprendía.

Así que, por mi esfuerzo, me premié con una hora de descanso en Internet. 

No, solo bromeaba, me pasé toda la hora completa viendo las fotos e información de la escuela de modelaje de la que pronto -mañana- sería parte. Todas sus instalaciones eran extrañamente -era una escuela de M O D E L A J E- muy demasiado avanzadas económicamente. Se notaba a kilómetros que eran ricos. Literal, en cada uno de los cuartos tenía dos laptops y un televisor de esos que son gigantes. Cada cuarto, como siempre, era de dos personas. Habían tres comedores, uno para principiantes -yo-, otra para avanzados -al que iban los que pasaban el año de prueba-, y los profesionales, que eran los que modelaban para la televisión o esas cosas. 

Ese lugar, definitivamente, iba a ser el cielo. 

Y el infierno también.

(...) 

Entré a la cocina y abrí el estante que estaba arriba del horno. Saqué de allí unos cereales y los puse en un plato hondo. Luego, abrí en refrigerador y saqué leche. La eché en mi cereal y comí todo gustosa. 

Sí, ya había dado mis exámenes. Los dí todos en tan solo media hora cada uno. Todo me había resultado fácil por primera vez en mi vida, eso significaba mi esfuerzo, que parecía no haber existido antes. Okey eso suena raro en mí. Solo esperaba sacar un dieciocho o diecisiete en cada uno, porque no creía sacar un veinte. Nunca en mi vida.

Eran las séis de la tarde, aún no se hacía de noche, y parecía que no iba a oscurecer hasta dos horas más. Ventajas de verano.

Mi celular vibró en la mesa y lo cogí. Un mensaje. De Harry. Sin más que hacer, desbloqueé la pantalla y abrí el mensaje.

"¿Podemos vernos en el parque en diez minutos? Te quieroxx"

Ahogué un sollozo sin lágrimas. Mierda, ¿porqué ahora?

Allí estaba yo. Parada en el medio del parque esperando a Harry. Sabiendo que sería la última vez que lo vería por bastante tiempo, y que nuestra despedida ahora sería para él una normal, mientras para mí, sería la despedida. La despedida.

Miraba mi celular todo el rato para ver la hora, ya que los minutos parecían horas para mí. Estaba muy nerviosa y solo deseaba que Harry sea breve, aunque no lo creía. Y también deseaba poder disimular mi nerviosismo cuando él llegara, aunque de eso estaba segura porque era la mejor del mundo fingiendo. Porque había mentido tantas veces.

Minutos -o eternidades- después, visualizé la silueta de Harry acercándose desde la otra calle y mis piernas temblaron. Tragué saliva fuertemente cuando se encontraba ya en la esquina del parque. Volteé simulando buscarlo detrás de mí y cerré los ojos fuertemente. 

Como en estos últimos días, me sentí una mierda de persona.

Una mano tocó mi hombro. Boté el aire que no sabía que estaba reteniendo y volteé. Estuve más que sorprendida cuando un notablemente nervioso -y algo sonrojado- Harry me sonrió, o trató de hacerlo. Pero, finalmente, yo estaba igual que él por dentro.

Tartamudeó algo que no pude oír y como saludo lo abrazé. Pero lo hice más fuerte y con más sentimiento de lo normal, y esto último no solo porque sería el último momento que pasaría con él.

Correspondió y pude sentir que sus manos temblaban. Estaba confundida, ¿a él qué le pasaba?

Nos separamos y él se rascó la nuca mirando al suelo. No sabía que hacer, y esto se estaba poniendo algo incómodo de un momento a otro.

-¿Harry? -él levantó la mirada, miró mis ojos diciéndo algo sin decir nada. Algo que no comprendí. -¿Qué ibas a decirme? 

Él tragó saliva, tan nervioso como yo lo había estado, y estaba. 

-Yo...-paró. Me perdí de un momento a otro en sus ojos por última vez, pero él nunca habló. -Te diré mañana, ¿sí? -dijo tartamudeando y me dió un beso en la mejilla. Yo no lo dejé ir y lo abrazé fuertemente.

-Te quiero. -Harry correspondió con aires de felicidad mi abrazo. 

-También te quiero. -dijo él.

Ví como se alejaba caminando mientras lágrimas caían de mis ojos.

Solo rogaba que Harry fuera capaz de perdonarme algún día.

••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••

Holaaaaaa:)

Literalmente, faltan dos capitulos y el epilogo para terminar la primera temporada de la novela.

Ahora no puedo escribir mucho porque mi mama me obligo a dormir a las nueve y media de la ncohe porque segun ella no me voy a despertar nunca si no duermo mas temprano, y con nueve y media estaba bien, creo.

Voy a subir cuando pueda, lo mas rapido posible, pero como siempre les digo, demora un poco. Pero como ya esta terminando la novela y ya tengo las ideas de como masomenos van a ser los otros capitulos que quedan supongo que va a ser más rapido, no tengo idea.

Espero que les haya gustado el capitulo, voten y comenten:)

Gracias por leer

Byeee

-Ana:)

neighbor »hs (editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora