Surnud Armastus VHope

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Hace un par de meses me habían retirado del hospital psiquiátrico y me habían llevado a casa, padecía de Esquizofrenia, me inyectaban antipsicóticos y anti-temblor, gracias a eso pude salir de allí.

Dato:
Antipsicótico

Reduce o mejora los síntomas de ciertas afecciones psiquiátricas.

Anti-temblor

Ayuda a controlar los temblores, la agitación y la inestabilidad

Me lo suministraban frecuentemente mientras que estaba en el hospital, todo iba bien con eso, pero ahora en casa, era difícil, no tenía una enfermera quién me lo inyectara, solo tenía a TaeHyung para eso, su miedo a las agujas le impedía inyectarme además de que no tenía experiencia, así que comencé a hacerlo yo mismo.

Funcionó por un tiempo, estuvimos de maravilla hasta que comenzaron las alucinaciones, veía o al menos yo creía ver demonios, en todos lados estaban me perseguían, no quería comentarle nada a TaeHyung o me mandaría de vuelta al hospital y no quiero que me alejen de su lado, no de nuevo.

Una noche desperté agitado, los demonios se habían colado en mis sueños y ahora al despertar los veía a mi alrededor, mirándome, riéndose de mi, a mi costado donde debería estar TaeHyung durmiendo había un demonio, asustado estire mi mano al cajón sacando mis inyecciones, me suministre la primera dosis de Antipsicótico, mire a mi alrededor y comenzaron a desaparecer aquellas lúgubres figuras dejándome solo, TaeHyung yacia a mi lado tranquilo durmiendo.

Me levanté y fui al baño, lave mi cara y mire mi reflejo, podía ver mi rostro normal, aspire profundo y me tome del borde del lavamanos tranquilizado mi corazón y mi respiración por lo sucedido anteriormente, sali del baño y volví a la cama, abrace el cuerpo de TaeHyung quedándome finalmente dormido.

Ese fue el primer episodio que tuve, no se detuvieron, aún me perseguían los demonios, aún los veía.

Unos meses después le conté a TaeHyung todo lo que pasaba, indiferencia recibí de su parte, me abandonó, me dejo solo, se fue de mi vida sin más.

Ahí comenzó mi cambio, fue eso lo que gatilló mi ahora segunda fase, la llamada fase aguda.

Dato:
Fase aguda:
 Durante esta fase se manifiestan los síntomas más llamativos. Se hacen evidentes los delirios y las alucinaciones, así como la desorganización del pensamiento. La conducta suele ser inapropiada y la persona a menudo no es capaz de cuidar de sí misma. 

Deje las inyecciones sumiendome completamente en la locura y las alucionaciones, ya no tenía lo único que me importaba, estaba solo y mientras así fuera no le hacia daño a nadie.

Sus voces, sus voces llenaban mi cabeza, pero, después de todos esas voces eran lo que soy, esas voces provenían de mi, ¿no? Yo debo seguir lo que yo pienso, y lo único que pensaba lo haría.

"Matalos a todos" susurraba mi cabeza, llevado por la locura hice caso, mate a muchas personas, torturandolos de las formas más insanas que podrías imaginar.

Kim TaeHyung sería mi última y adorada víctima, de eso me encargaría, le busque sin descanso, hasta que lo encontré ahora con otra persona, sana.

"Oh mira, están juntos, hace un año, hace un año aún estabas en el hospital" susurraron en mi cabeza, el frenesí fue activado, mi cordura abandonó mi cuerpo y me acerque a ambos, con ayuda de mis propios demonios y aquellos que me ayudaban a arrastrarlo lejos de a su pareja, me lo lleve a la que seguía siendo mi casa, y que ahora correspondía a mi sala de torturas.

Deje a TaeHyung en la mesa, la cual pertenecía a la morgue, ate sus manos y pies dejándolo a mi disposición, me subi encima de la mesa quedando sobre su cuerpo.

ㅡOh querido, no debiste dejarme, mira en lo que me has convertido.ㅡ murmuré comenzando un suave vaivén.

Me apoyé en sus hombros y me acerqué a su boca, comiéndolo lentamente, pero no me correspondió, mordió mi labio con fuerza haciéndome sangrar escupí la sangre llevando un paño a mi boca deteniendo el sangrado, un golpe en su mejilla izquierda resonó por toda la habitación.

ㅡEstúpido.ㅡMascullé tomando el bisturí.

Rasgue su ropa dejándome ver su fornido cuerpo, estaba bien trabajado, relami mis labios e hice el primer corte, un corte perfecto, su sangre comenzó a salir deleitandome por completo, pero sus quejidos y lloriqueos eran inquietantes.

ㅡHoSeok, no lo hagas, por favor.ㅡLloriqueó.ㅡYo te amo.

Pronunció sabía que era mentira, pero ese era mi punto débil, el amor, mordi mi mejilla interna tensando mi mandíbula, camine a la meda mas cercana y tome gasas y alcohol para curarlo.

Verti el alcohol en el corte y gritó, produciéndome el mayor de los placeres, su dolor era mi droga, apreté con la gasa su herida sacándole más gritos, pero aún así lo cure.

Lo solté de los pies y las manos y se incorporó abrazandome, me sentí protegido, de apoco las voces se alejaron de mi dejándome en paz junto a mi amado, aspire su aroma inundando mis fosas nasales, oh dulce aroma que me cedaba.

Estire mi mano a la mesa y tome las inyecciones que me correspondían despues de tanto tiempo, volviendo a la normalidad, o eso quer2ia creer al menos.

Volvimos a estar juntos como antes, dejando atras mi condición, una noche siendo la luz de la mesa de noche la cual nos alumbraba mientras nuestros cuerpos se acoplaban una y otra vez, sus roncos sonidos y la madera del suelo rechinando por el calor en la habitación lo era todo, estaba con él y eso importaba, nuestras manos entrelazadas y mis uñas encarjándose en sus nudillos lo eran todo, el cosquilleo que se producía en mi abdomen hizo que abriera mis ojos dejándome verlo al fin.

Pero no, no era TaeHyung, era un demonio quién me estaba tomando, invadido por el pánico y el miedo tome el arma que había en mi mesa de noche y disparé en su frente.

Un líquido caliente saltó a mi cara manchando las sábanas blancas de rojo al igual que la pared, cerré los ojos y lleve mis manos a ellos para quitar aquel líquido, al abrirlo mi mundo se derrumbó.

Había disparado a TaeHyung, había matado al amor de mi vida, llevado por la rabia comencé a llorar, lleve la pistola a mi boca y jale del gatillo.

¿El final? Oh no cariño, inclusive en la muerte atormentare tu cuerpo, porque nunca, vida mía, nunca te librarás de tus demonios.

Bangtan One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora