Hice a un lado la colcha para poder levantarme, inmediatamente fui al baño a cepillarme los dientes, me miren al espejo y alborote más mi cabello de lo que ya estaba, me deje puesta la pijama y baje a desayunar.— Buenos días perezoso — me senté mientras Rydel tomaba un tazón y lo llenaba de leche achocolatada.
— Buenos días — observe como ahora le picaba fresas.
— Rydel... ¿qué rayos haces?.
— Cereal — como es de exagerada lo prepara como un pastel.
Desayune la rareza que me dio mi hermana como cereal, al fin de cuentas estaba muy bueno, agradecí y me levante de la mesa para cambiarme de ropa y no tener la pijama todo el día ya que hoy no planeaba salir, Laura acompaño a su hermana al ginecólogo así que no se encontraba.
— Ross, cámbiate que vamos al súper — desde el otro lado de la puerta gritó, como es costumbre yo solo iré a cargar las bolsas.
Desde mi habitación escuche que alguien toco el timbre, acomode mi polera y baje a atender la puerta.
— Hola Ross — Joder ella no.
— Em... Hola Natalia.
— ¿Puedo pasar?
— Claro, pero que descortés pasa — me hice a un lado para permitirle la entrada a la chica de pelo castaño.
— ¿Cómo has estado?.
— Bien — con una hermosa novia.
— Ross ¿ya estas listo? debe... — se callo inmediatamente cuando la visualizo en el sofá — ¿Natalia?
— Hola linda — rápidamente se levantó y corrió a estrujar a Rydel en un abrazo.
— Oh!, que alegría verte — no, definitivamente para mi no.
— Igual, hace mucho que no nos vemos — Jaja 4 años.
— Si paso tiempo, ¿dime cómo has estado Natalia?.
— Ya sabes extrañando a ... y dime Ross ¿tienes novia? — pero que directa.
— Si, soy muy feliz con ella y tú que tal ¿tienes novio?— No — solo me quedaba viendo.
— ¿Quieres acompañarnos a el súper Natalia? — no, ¿qué mierda hiciste Rydel?
— Claro hací aprovechamos a ponernos al día — se la pasara acosandome.
—Vamos Ross, toma las llaves del auto — fui a la pequeña mesita al lado del sofá y las tome, Rydel y Natalia se adelantaron y subieron al coche, me puse en el asiento del piloto y maneje hasta la plaza.
Llegamos al centro comercial, estacione el auto las chicas se bajaron primero y yo caminaba detrás de ellas.
— Tenemos que ir primero al súper, Ross ¿traes la lista que dejo mamá en la mesa? .
— ¿Cuál lista? — pregunté desconcertado.
— Ash, olvídalo tienes el cerebro de una ardilla.
— Mm.. pero una ardilla muy sensual, al menos es mi opinión — visualice a la persona de aquella voz, mi novia estaba detrás de Rydel junto con su hermana menor.
— Bueno al menos el amor de mi vida me defiende y me ama — la atraje hacia mi para abrazarla por los hombros, pero esto no duro mucho ya que Rydel la jalo para abrazarla y saludarla.
— Como no tengo el gusto de conocerte me presento soy Natalia — mi ex.
— Bueno soy Laura, un gusto en conocerte —como siempre tan linda y amable se presentó con una hermosa sonrisa en su rostro.
— ¿Se quieren unir a las compras chicas? — se dirigió mi hermana a Laura y a su acompañante.
— Claro, ¿también necesitamos comprar algunas cosas verdad Christina?
— De echo no recuerdo — Laura le dirigió una mirada — Claro si, ya recordé es que con eso del embarazo — Christina le sonrió a su hermana y las dos nos sonrieron a los tres.
Luego de eso empezamos a caminar hasta donde realizaríamos las compras, Laura y yo nos alejamos de las demás, Christina se separo para ir al área de maternidad y Rydel junto con Natalia fueron por distinto lado.
— Ya hay cereal de chocolate y vainilla! — gritó Laura mientras corría al pasillo donde estaba el dichoso cereal.
— Espera — grité mientras corría detrás de ella.
— Mira, me llevare 3 cajas, espera iré por leche achocolatada y yoghurt — plantó un casto beso en mis labios y corrió hasta el pasillo de lácteos, aquí vamos camine detrás de ella mientras observaba que podría comprar.
— Hacen una bonita pareja Ross.
— Gracias Natalia.
— ¿Sabes Ross?, creo que aún no es buen momento para decirte esto ya que eres feliz con otra persona a tu lado pero al final de cuentas son mis sentimientos y aún te amo, aun siento algo por ti aquí en mi corazón.
— Natalia... fuimos novios hace ya bastante tiempo yo cambie mi forma de sentir respecto a ti, ahora te veo como una amiga una gran amiga, sabes que tengo novia y la amo, me costo trabajo que me aceptara no te daré las razones pero la amo demasiado como para dejarla e intentar algo otra vez contigo, opino que estaría mal ya que no siento nada por ti más que para una amistad, solo seremos y seriamos amigos Natalia.
No dijo nada solo volteo velozmente y salió disparada por la salida, mierda no quería lastimarla pero tampoco ilusionarla no sería justo ni correcto, no para mi, ni para Laura ni para ella misma, quite mi vista de la salida y ahora la tenia en unos ojos chocolates.
— Lo escuche todo.
— Laura...
— Ross...
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El Suicidio de Laura Marano
RastgeleUna vida antes de lo que marco un final y un comienzo para el. Su amor, la mujer que lo volvió loco en un instante La mujer que lo apoyaba en momentos tristes y alegres La mujer por la cuál al estar con ella los demás no existían Él prometió amarla...