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Narra Tn.
Estaba recostada, viendo televisión con Ray, aunque no lo viera lo siento feliz, pero se me vino una idea.

Tn: Ray.
Raymond: dime amor.
Tn: tienes helado.
Raymond: vamos al mercado por helado (me mira) y así aprovecho para comprar la despenza (sonríe).
Tn: dale. Vamos, además te propongo algo.
Raymond: te escucho.
Tn: esta semana es tuya, haremos todo lo que quieras desde ahora. (sonrío). Pero la otra semana serás mio, ¿ok?.
Raymond: me encanta.
Tn: pero, hoy me había prometido Matías hacer cosas divertidas.
(digo triste)
Raymond: te prometo que hoy haremos todo lo que quieras y mañana hacemos lo que yo quiera ¿va?.
Tn: bien (me río) vamos al super.
Raymond: vamos princesa. (le ayudo a poner sus sandalias)
Tn: gracias (me levanto con cuidado) nos vamos.
Raymond: si

(...)

Tn: Ray, tambien llevemos chocolates.
Raymond: bien, (pongo los chocolates en el carrito de super)  y no se te olvide mis dulces. (lo interrumpo)
Tn: tus dulces picosos, ya están en el carro de super. Y..... Ams, pastas. ¿Que quieres de cenar?
Raymond: paella (nos reímos) y puedo llevar. (lo interrumpo)
Tn: cervezas, claro que si, y yo llevare mis jugos en caja (sonrió)
Raymond: bien, (pongo las cervezas)  además llevemos frituras.
Tn: ok.

Narra Raymond.
Hace mucho que nunca me había sentido tan feliz, tanto extrañaba estas salidas al supermercado, miraba como aquella mujer que tanto amo, sonreía y por ratos acariciaba su pequeña pancita, sintiendo como mi hijo pateaba.

Terminamos de comprar, pagamos todo y Tn me ayudó con algunos bolsas ligeras, acomodamos todo y ayude a Tn a subir al auto, un niño venía vendiendo rosas, tome la más hermosa y la pague.

Raymond: (abro la puerta del auto y me subo al asiento) para el amor de mi vida.
Tn: gracias Ray. (me entrega la Rosa) es muy hermosa.
Raymond: no tanto como tu (sonrió)
Tn: eres tan lindo (beso su cara)  eres el mejor (pone en marcha el auto)

Narra Tn.
Raymond puso en marcha el auto, a quien engaño aun lo amo mucho, sus ojos tienen aquel brillo de felicidad y amor, el siempre será el hombre de mi vida, su ternura la amo.

Llegamos a la casa y acomodamos todo en los estantes y algunas cosas en el refrigerador. Tomamos algunas frituras y nos fuimos  a sentar en un sofá cama, Ray puso su cabeza en mis piernas, y acaricie su cara, sus ojos, sus labios y su cabello, lo mire cuidadosamente y estaba dormido, al parecer no había dormido bien en este tiempo.

Puse atención ala televisión, mientras que comía frituras, sentí a Ray tomar mi mano derecha, intente soltarme pero la presionaba más, lo único que susurraba era "Tn porfavor no me dejes" "te amo Tn" acaricie su cabeza suavemente y lo sentí dormirse más profundo, sonreí y le puse atención a la televisión deje un suave beso en los labios de Ray.

𝑼𝒏 𝑨𝒎𝒐𝒓 𝑸𝒖𝒆 𝑫𝒖𝒓𝒆 𝑷𝒂𝒓𝒂 𝑺𝒊𝒆𝒎𝒑𝒓𝒆♡︎ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora