Capitulo XVI

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Al estar con la hija de Esteban, Val no pudo evitar pensar en su hijita que no pudo conocer, Esteban se acostó junto a ella y la abrazo.

-en que piensas?
-en nada, mintió
-juraría que estabas pensando en algo
-creo que te equivocaste
-bueno, te ves hermosa sabes
-me lo dices todos los días
-mentira, hoy no te lo había dicho
-es verdad.
-los niños ya se durmieron?
-sí, tú y yo podemos hacer otras cosas
-bueno justo ahora estoy cansada, así que tendremos que dejarlo para mañana
-esta bien, respondió con voz de niño, beso su cuello y la abrazo con fuerza
-hasta mañana amor
-hasta mañana pequeña

Ambos se quedaron dormidos.
Al día siguiente,

León despertó primero, fue a la habitación de su hermanita y la saco de la cuna, con dificultad la llevo a la cama de sus papás, primero subió a la pequeña y luego subió él,

-mamá, mamá, mamá
Val abrió los ojos confundida y vio a los dos niños.
-que hacen aquí
-tengo hambre, y osa también.

Val tomo a la bebé en brazos y le dio la mano a León, los llevo a la cocina y los sentó en sus sillas.
-como sacaste a la bebé de su cuna?
-me subí a la silla y la saque
-bien, eso esta mal, es muy pequeña y pudo haberse caído, no lo puedes volver hacer ok
-ok
-bien, que quieres comer?
-mmmm cualquier cosa
-de eso no tengo aquí
-mamá!!
-piensa que quieres mientras yo le hago el desayuno a tú hermana
-esta bien
Val preparo una formula y le dio de tomar su mamadera, mientras preparaba la papilla de manzana.
-mamá ya sé que quiero
-te escucho
-quiero waffles con chocolate y frutas.
-esta bien, pero es muy temprano para que comas tanto dulce no crees?
-no
-espera un segundo y hago tu desayuno.

Val hizo lo suficiente como para los tres, también hizo un poco de huevo revuelto, León fue hasta la habitación de Val y despertó a Esteban, él se despertó y fue a la mesa,

-buenos días mis dos amores
-buenos días cariño, dijo Val mientras le servía un poco de huevo y le daba un beso, él la tomo de la cintura y dijo me debes algo, ella se sonrojo y se soltó, -detente.
-esta bien.

Luego de desayunar, Esteban se ofreció a limpiar todo mientras Val terminaba un informe para el día siguiente.

Después de que termino con la cocina Esteban fue con los niños al cuarto de juegos y estuvo con ellos el resto de la mañana, más tarde ninguno suizo cocinar ni nada, hací que decidieron pedir algo de comer, todos botaron por comida italiana.

Luego de comer jugaron Uno, vaya que error, Val y Esteban terminaron enojados por el juego, asi que ella se fue a la habitación,

-no seas tonta, era solo un juego amor
-deja me en paz
-vamos cariño, dijo mientras le quitaba el vestido.
-detente
-me debes algo
-no ge debo nada, detente
-no quieres que lo haga
-como lo sabes
-lo veo en tus ojos, tú piel me lo dice, la forma en la que tu corazón se acelera, la forma en la que respiras, me deseas y yo te deseo.
-te odio
-y yo te amo.

Ninguno dijo nada más, Esteban la apriciono contra la puerta y la cerro con seguro, la giro haciendo que ella pusiera las manos en la puerta, no tenia brasier lo que facilito el trabajo, bajo sus bragas y acaricio su entrepierna, ella gimió.
-no grites, los niños pensaran que te estoy matando, ella sonrió.

-y los niños?
-León esta viendo la tv y la osa duerme.

Prosiguio con su labor, deslizo su mano por delante y acaricio su intimidad y con su mano libre masajeo una y otra vez sus senos, ella tuvo que morder sus labios para no gritar como quería.

Ninguno aguanto más, él se quito la ropa rápidamente y la tendió sobre la cama, apto seguido la penetró hasta el fondo, ella rasguñó su espalda, ella le dio la vuelta hasta quedar arriba de él, se movía de arriba a bajo, una y otra vez y él la tomaba de la cintura para facilirle el trabajo, la ayudaba a subir y bajar, ambos gemían, aunque lo hacían con cuidado para no ser escuchados por León quien estaba en la sala de estar, él salio de ella y le dio la vuelta, para penetrarla por detrás, ella tomo una almohada y la mordió, ambos lo hicieron y lo disfrutaron.

Al terminar fueron al baño y se dinero una ducha, luego salieron de la habitación y vieron a León dormido en el sillón, Val tomo una cobija y lo cubrió.

El resto de la tarde Val limpio el sepa y recogió las cosas de León, pues se deben ir casa, se despidieron de Esteban y la Osa y se fueron a su casa.

Continuara...

"Deseos" NavarroFerro (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora