HOPELESS; Uchiha Sasuke. ✓

Capítulo 24: Madara renace.

Entre todos intentábamos quitarle los Biju a Obito, tirábamos de su chakra para que estos pudieran ser libres y que dejarán aquel cuerpo.

—¡No subestimes el poder de todos!

Habíamos logrado separar a los Biju de Obito, cada uno de ellos apareció frente a nosotros y entonces mi Susano junto al Kyuubi de Naruto se deshizo. Ambos nos sentíamos cansados ante todo ese fuerzo que hicimos, pero habíamos logrado que Obito quedara débil y esta era una oportunidad magnífica para mí.

Yo acabaría con esto.

—¡Aún está vivo! —exclamó un ninja de la alianza.

Tomé mi espada comenzando así a correr para así terminar con la vida de Obito, pero antes de que pudiera acercarme y hacerle algo; había aparecido ___, ella estaba protegiendo a su padre.

—No dejaré que terminen con su vida. —decía con seriedad. —No lo permitiré.

—Entonces tendré que matarte también.

Lo que dije la dejó sorprendida, pero no dejó de proteger a su padre. Realicé el Chidori e iba dispuesto a atravesarla, pero mi ataque simplemente la traspasó.

Rápidamente tomé mi espada para pasarla por detrás y así evitar que ella me diera un golpe, comencé a ir a por Obito, pero nuevamente ___ aparecía frente a mí.

Esta vez no utilicé el Chidori, simplemente le di un golpe, golpe que ella no evitó, ella simplemente se protegió con sus brazos.

—No quiero pelear contigo, Sasuke.

—Debiste pensar en ello entes de traicionarme. —digo con irritación. —Tu vida ahora no vale nada.

Ella se sorprendió e iba a aprovechar su distracción para matarla, pero me detuve a unos centímetros al ver que mi antiguo sensei había llegado.

—Lamento aparecer de repente, pero deja que me encargue de ellos.

Kakashi mantenía un Kunai en su mano e iba a clavárselo a Obito en su corazón, ____ iba a detenerlo, pero no iba a alcanzar a salvarlo o eso creí, pero en ese mimo momento apareció el cuarto Hokage deteniendo las intenciones de Kakashi.

—No creo que a Rin le hubiera gustado ver esta situación, ¿verdad?

—Rin...Rin era la única luz de mi vida. —murmuró Obito para luego ver a su hija. —Al perder a Rin...el mundo que veía cambió completamente. Se convirtió en un auténtico infierno, en un mundo sin esperanza.

—¿Padre?

—Caminé por el mundo como Madara y arrastré a nuestra propia hija a todo esto. —comentó con melancolía. —Pensé incluso en utilizarla para mi beneficio...Rin nunca me lo perdonaría.

Lo último que confesó Obito dejó a ___ choqueada.

—¿De qué estás hablando? —preguntó ___ dando unos pasos hacia atrás. —¿Utilizarme?

—Ustedes deberían de ir a detener a Madara. —nos dijo el cuarto. —Naruto, te lo encargo.

—Sí. Andando, Sasuke.

—Tú también ve, ____. —habló Obito. —Detenlo antes de que terminen contigo.

—¡Primero respóndeme! —exclamó ___ con enfado. —¡¿Cómo que utilizarme?!

—Ve y acaba con esto...hazlo por tu madre.

—Tks...una vez vuelva deberás de contármelo todo.

___ se dio media vuelta comenzando a dirigirse hasta donde se encontraba Madara, yo la vi irse y suspiré para seguirla.

Primero acabaré con Madara y luego me encargaría de ____.

❇❇❇

Madara se encontraba atrapado por una técnica del primer Hokage. Sin embargo, en ningún momento Madara se mostró inquieto o desesperado, él nos veía con una sonrisa.

—Les agradezco que le quitaran los Biju a Obito y me hayan traído a la muchacha. —sonrió. —¡Rinne Tensei no Jutsu!

—No puede ser...—murmuró ____. —Él ha revivido.

—¡¿Qué?! —exclamó con sorpresa Naruto. —¡¿Cómo que ha revivido?!

—Silencio, Naruto. —exigí para luego activar mi Mangekyo Sharingan y mandar llamas negras hacia Madara. —Terminemos con esto.

—Esto no me hace nada.

—Es inútil que le lancemos Jutsus. Este tipo puede absorberlos. —me informó Naruto. —Solo le afectan los ataques físicos.

—Así que el Uzumaki ha hecho su tarea. —decía ___. —Debo de apresurarme en terminar con Madara.

___ comenzó a dirigirse directamente hasta donde se encontraba el ya revivido Madara, yo chasquee la lengua para así tomar mi espada y comenzar a seguirla.

Ambos intentábamos darle un golpe, pero este simplemente los esquivaba y entonces de un movimiento pude atravesar su brazo, y ___ iba a clavarle unos fierros en su espalda, pero Madara utilizó un jutsu que nos mandó lejos causando que cayéramos a una gran distancia.

—Supongo que acabaré primero contigo.

Madara había llegado hasta donde me encontraba e iba a clavarme mi propia espada, intenté utilizar mi Sharingan para poder hacer algo, pero me sentía muy débil y entonces esperé a que él me clavara mi propia espada.

Sin embargo, en ese momento todo se distorsionó y terminé en otro lugar.

—¿Te encuentras bien?

Mire a mi alrededor encontrándome así con la mirada preocupante de ____, ella respiraba agitadamente mientras su ojo izquierdo sangraba.

—¿Qué has hecho?

—Te he salvado la vida, Uchiha. —formó una débil sonrisa. —Sin embargo, no podremos salir de aquí hasta que recupere un poco de chakra.

—Hmp.

Nos quedamos en silencio, podría aprovechar el hecho de que ella se encontraba débil para así acabar con su vida, pero el hacer eso solo me dejaría atrapado en esta dimensión y no iba a arriesgarme a que mis planes terminaran en este momento.

Acabaría con ella en otro momento.

—Lo que dijo mi padre es verdad. —fue lo primero que dijo llamando así mi atención. —Yo me acerqué a ti primordialmente para que te unieras a nosotros, pero el tiempo que pasé contigo me había hecho pensar de otra manera y no quería traicionarte.

—¿Piensas que voy a creerte? —pregunté con desprecio. —Lo que digas ahora no hará que cambié mi opinión. Yo acabaré con esta guerra que han planeado y crearé un nuevo mundo.

—Una vez volvamos al campo de batalla terminaremos con esto. —decía acercándose levemente para extender su mano. —Y una vez eso pase...te prometo que no volveré a traicionarte.

—Tus promesas ya no valen nada para mí. —bufé tomando así su muñeca. —Solo llévame al campo de batalla.

Todo a mi alrededor comenzaba a distorsionarse y en un parpadeo habíamos aparecido en el campo de batalla, donde hemos visto a Madara intentando capturar a los Biju, pero estos se resistían y terminaron con cortarle un brazo.

Madara desapareció unos segundos, pero logré oír su voz detrás de nosotros.