Primer amor 🌻 LuffyIchiji ; One Piece

XI. ¡Fiesta! (Parte 1)

Ganar fue lo mejor que pudo haber pasado esa noche. Bueno, tal vez no lo mejor, más muchos se emocionaron a sobremanera.

"Lo mejor" para Ichiji, fue ese beso apasionado que había compartido con Luffy. No le importó estar rodeado por los jugadores del equipo, no le importó que Sanji gritara y celebrará ese beso y menos le importó estar de rodillas en el césped, ensuciando su pantalón blanco. Con un beso como ese, ¿Acaso ese tipo de cosas importaban?

Lo único que le importaba, eran ese par de suaves y cálidos labios que parecían estar hechos para ser besados.

Por él. Solamente por él.

Pasaron unos cuanto minutos sin ser interrumpidos en sus seción de besos, hasta que alguien se acercó, pidiéndole a Ichiji que se apartara.

Decía ser el médico de la escuela, tenía que ver si Luffy se encontraba en sus cinco sentidos, si no le había causado nada malo aquel golpe que recibió.

Luffy tan solo se reía, con las manos sobre el césped y tratando de hacer entender al médico que se encontraba en perfecto estado, sin necesidad de atenciones especiales.

—En serio estoy bien, solo fue un golpe —tras decir esos, el médico se alejó, por lo que Luffy pudo ponerse de pie, con ayuda de Ichiji, que se apresuró a tomarlo del brazo—. Estoy bien, en serio Ichiji.

—Luffy, ví como tu cabeza rebotó contra el suelo. No te voy a soltar hasta que me vaya a mi casa.

El moreno comenzó a reír, se soltó del agarre del pelirrojo, para poder pasar el brazo por su espalda y abrazarlo. Lo atrajo a su cuerpo, y empezó a caminar por el campo, rumbo a los vestidores lo antes posible.

Podía oír a los demás comentar de la fiesta. ¡Fiesta! Tocaba en casa de Luffy gracias a que él anoto el punto ganador. No había nada bueno en aquello, ya que el capitán sabía perfectamente del gran desastre que arrastraría con su casa en menos de unas horas, más no podía negarles la celebración, ya que no habían ganado cualquier partido, y eso definitivamente era un gran motivo por el cual hacer fiesta.

Fueron a los vestidores, recogiendo las cosas de Luffy.

—¿No vas a cambiarte?

—Lo haré en casa, estoy muy cansado.

Ichiji asintió, esperando al menor a una distancia prudente. Al menos fue así hasta que Luffy se acercó, con la mochila sobre su hombro, acercó una mano al pelirrojo, tomándolo del hombro y acercándolo.

—Te ves muy bien con la camisa del equipo —comentó, dándole un leve beso en la mejilla, de manera juguetona—. Aunque... te ves mejor sin ella.

Ichiji elevó ambas manos para tomar el rostro, jugando con las mejillas del peli negro, para luego acercar su rostro, depositando un leve beso en la punta de la nariz de Luffy. Bajo lentamente hasta los labios, sonriendo contra él.

Mordisqueó suavemente el labio inferior de Luffy.

—Si tratas de seducirme en medio de un sucio vestidor deportivo, estás muy mal.

—Tú eres el que me está provocando —bajo su mano hasta tomar por la cadera al pelirrojo, lo acercó con algo de brusquedad—; besándome, jugando con mis emociones de esta forma. Me estás volviendo loco, eres malo Ichiji.

Ichiji no puedo evitar reí por aquello. ¿Lo provocaba? Eso no se lo esperaba, quizá sí lo hacía, pero no era a propósito. No todo el tiempo.
Separó a Luffy de su cuerpo, tomándolo de la mano para salir de ahí.

—Vámonos, si quieres hacer tu jugada tendrá que ser en tu casa, porque no pienso seguirte el juego en este lugar. ¿Traes auto?