True love is the most powerfull Force ( Robbie kay)

Capitulo 2

¡Esto era una equivocación! ¡Como era esto posible¡ me gire observando todo con desesperación, estaba en lo cierto y me encontraba en... ¿Neverland?

Sabía que este lugar no era para adultos, ¿Será que ellos de verdad podrían estar aquí?, mis pensamientos habían sido interrumpidos por el crujido de una rama, provenía de los arbustos, inmediatamente agarre mi arco y coloque una de mis flechas, escuchaba los sonidos de la isla, era posible que fuera un animal.

-Sal ahora de tu escondite si no quieres que dispare-decía a quien fuese esa persona, esperaba que no fuera mas que un animal pero no fue así.

Un chico salió de su escondite, él era alto, rubio y tenía una cicatriz en el rostro, él estaba encapuchado, apenas veía su cara, baje mi guardia "gran error" El se acercaba poco a poco a mi, baje mi mirada hacia una de sus manos, la cual guardaba algo.

-Soy Félix- El soplo el polvo que tenía en su mano y desde ese momento todo se volvió negro una vez más.

...
No sabía cuánto tiempo había pasado, abrí mis ojos, observé el lugar, era una habitación de madera, era espaciosa, tenía unas pequeñas mesitas de noche en cada extremo de la cama y un gran ropero que tenía tallado un árbol en las puertas dobles.

Repentinamente se había abierto la puerta dejando mostrar a un chico alto, güero, sus ojos color verde esmeralda, de unos 18 años probablemente, alto y delgado, el entraba dejando la puerta cerrada detrás suyo, sentí su mirada intensa sobre mi.

Él se me acerco lento y abrió su boca antes de decir

-Soy Peter... Peter Pan-El extendió su mano en forma de saludo, yo dude pero finalmente la tome

-Soy Lilian-dije con desconfianza y poco a poco fui alejando mi mano de la suya.

-Bueno has de tener hambre, porque no vienes conmigo-dijo en tono gentil dándome una sonrisa amable.

-Lo siento, pero yo ya me iba- de un salto me levante y caminaba hacia la salida, pero entonces el me tomó del brazo e inmediatamente lo mire frunciendo el ceño, él se veía molesto.

-Tu no vas a ningún lado niña- decía con seriedad, lo observé un par de segundos, que le había pasado aquel chico gentil, sentí que todo era una especia de broma, algo parecido a una bienvenida al estilo de Nerverland, reí levemente ante su acto.

- ¿Perdona? ¿Quien eres tú para decirme que hacer o no hacer? Mira si esto es una especia de bienvenido o juego déjame ahorrarte las disculpas y déjame salir de aquí que te parece- dije burlándome pero a la vez con molestia, traté de zafarme de su agarre, pero eso solo lo empeoró, apretó el agarre e inmediatamente me retorcí como gusano junto con una mueca de dolor .

-Mira niña yo mando aquí y tu tienes que obedecer como el resto-mire sus ojos los cuales no brillaban como antes, ahora eran obscuros.

- Jajaja, eres muy gracioso, ahora suéltame- lo dije firme sin un ápice de temor, mientras colocaba una daga en su cuello, él me soltó, le indiqué que me siguera, íbamos caminando lentamente hacia la puerta, no despegaba la daga, abrí la puerta con mi mano libre mientras me mantenía alerta a cualquier movimiento, cerré le puerta corrí escaleras abajo tratando de no tropezarme.

Al salir observé que había muchos chicos, ellos estaban jugando, algunos comían, otros corrían por todo el lugar, pero ellos dejaron lo que estaban haciendo y todos giraron a verme, era incomodo ya que no pude observar a ninguna chica. Sentí una respiración en mi cuello e inmediatamente me tensé

-Sabes, que lo que acabas de a hacer amerita un castigo-dijo enojado casi escupiendo las palabras, me giré y observé que estaba rojo de ira, tomo fuertemente mis brazos, esta vez me quitó el cuchillo que tenía, mientras que me arrastraba lejos del campamento, las miradas probablemente estaban sobre nosotros.

-¡Duele! ¡Déjame ir!- vocifere, me tire al suelo, no pensaba ser arrastraba por aquel chico.

- Vamos Lilian, levántate o te cargaré al igual que un costal de papas- advirtió yo solo lo ignore mirando hacia otro lado, escuché un fuerte suspiro e inmediatamente sentí unos brazos rodear mi cintura, me levanto y me cargo en su hombro, le golpeaba la espalda con suerte podría tirarme al suelo y tal vez tener una mínima oportunidad de escapar.

Intente apoyarme en su espaldas e impulsarme hacia adelante, era inútil tenía la fuerza necesaria para poder sujetarme, lo único que me quedaba era esperar mi fin.

Al cabo de unos minutos, me bajo observé una jaula frente a mi, traté de luchar contra el conseguir mi cuchillo y huir lejos de él, le daba golpes y el los esquivaba, era un combate cuerpo a cuerpo, él me miraba con superioridad, traté de tirarlo al suelo y desarmarlo, cuando lo hice el dio un giro inesperado colocándome boca abajo con las manos sujetas por mi espalda.

-Vaya una chica que lucha, me agrada, no imagine que fueras tan buena, aunque lo admito aún te falta- era demasiado fuerte, hizo que me levantara y me metió a la jaula, traté de resistirme pero estaba lo suficientemente cansada y para mi la pesadilla apenas comenzaba.

-Qué quede claro pan, esto no se va a quedar así- lo amenace, sonrió cínico mientras que elevaba la jaula quede en el aire, qué bueno que no le temía a las alturas "pensaba"

-Ya veremos- el solo se rio, observé cómo se alejaba desapareciendo de mi campo visual, saqué el cuchillo de mi bota, había generado una distracción para conseguirlo y el pobre diablito no sa había dado cuanta de que se lo había quitado.

Definitivamente esto no era lo que tenía en mente, se suponía que tenía que encontrar a mis padres y no a un niño con delirios de grandeza.

Con mis manos intente abrir la jaula pero no dio resultado, estaba bien hecha, era casi imposible, saqué el cuchillo de mi bota derecha, comencé a cortar las lianas, las cuales eran gruesas y muy fuertes, será una larga noche...

Al cabo de unas horas estaba cansada, mire hacia al cielo y observé el hermoso cielo azul acompañado de estrellas que tenían un brillo hermoso, los sonidos de los grillos eran relajantes, él suave sonido que producían las hojas al contacto de una suave corriente de aire.

Ojalá pronto los pueda encontrar "susurre" el cansancio se había apoderado de mi, mis ojos pesaban, no aguante mucho cerré poco a poco mis ojos, finalmente quedando dormida...

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