PLAYBOY +18 HAISETOPHER ||THE PLAYBOY SAGA #1||

«treinta y ocho: londres»

Londres.

Nublado y lluvioso Londres, cada persona que visita Londres tiene la misma opinión. Pero hoy que ella ha llegado a esta hermosa ciudad el sol esta brillante, los pájaros están cantando y eso la hace sentir bien. Mira a su alrededor y no ve a nadie familiar, toma un suspiro profundo tratando de acostumbrarse que esta es su nueva vida. Pone su mano en su vientre, a pesar que todavía no se le nota el embarazo ella tiene la maña de acariciarlo.

—Hola mi amor. —sonríe como boba, hablándole a su bebé.

—¿Estás lista? —le pregunta Richard, sacándola de sus pensamientos.

—Hey Rich. —le da una sonrisa. —¿Nos vamos? —toma una de sus maletas.

—Si. —él toma las otras dos maletas.

Se suben a un taxi, el cual los lleva a un hotel al este de Londres, cerca de la escuela donde comenzara a ir el próximo semestre. Les toma media hora llegar a este y cuando están allí se quedan deslumbrados con todo lo que ven.

—Londres es hermoso. —Richard comenta bajándose de el taxi.

—Este será mi hogar hasta el fin de los tiempos. —

—¿Eso quiere decir que nunca regresaras a Estados Unidos? —pregunta en un tono triste.

—No lo creo. —suspira decepcionada. —Tratare de rehacer mi vida aquí y tal vez me convierta en la diseñadora de modas más exitosa de Londres. —

—Amo que seas ambiciosa. —le da un beso en la mejilla.

—Move it along mate. —un chico malhumorado les dice en un acento británico bien marcado, haciendo que caminen para la entrada del hotel.

Llegan a la registración y una chica los atiende con una gran sonrisa en sus labios. Les da una habitación con dos camas que hasta el momento la tienen apartada por dos semanas. En esas 2 semanas tienen planeado en buscar un apartamento que no sea tan caro, un trabajo con el cual se pueda mantener mientras va a la escuela. Llegan a la habitación y Richard ordena las cosas en el closet y tocador. Haise se recuesta en la cama esta cansadísima por el viaje y solo quiere dormir.

—No han comido nada en más de 8 horas. —se acuesta al lado de ella. —Sé que tienes sueño, pero tienes que comer también. —

—Lo sé. —suspira cansada. —pero no tengo apetito. —

—Tu mamá es una terca. —Richard le habla a su vientre en un tono burlón, ganándose un zape de parte de ella. —¿Lo ves? ¡Es impulsiva y terca! —

—¡Eres un idiota! —

—Ya necesitas un nuevo insulto. —Richard rueda los ojos, encogiendo los hombros. —me has insultado con ese desde que te conocí. —

—Te queda tan bien. —le acaricia el cabello.

—He estado pensando y caí en cuenta que no has ido al doctor. —él la vuelve a ver. —tenemos que saber que está bien. —

—Estos dos meses han sido demasiados ocupados y no me he sentido mal así que no vi la necesidad de ir al doctor. —se encoge de hombros.

—Pero no vas al doctor porque te sientes mal o algo así ... vas para saber que el bebé este bien. —

—Lo haremos en estas dos semanas entonces. —sigue jugando con el cabello de Richard. —y ya me dio hambre. —

—Lo sé. —se burla de ella. —Esta tu panza acaba de hacer un ruido que pareciera que tienes a un dinosaurio allí adentro. —

—Lo sé. —se ríe a carcajadas. —se me antoja una hamburguesa de queso, con pizza y mucha malteada de fresa. —hace puchero.

—Eso no es saludable ni para ti, ni para el bebé. —