PLAYBOY +18 HAISETOPHER ||THE PLAYBOY SAGA #1||

«treinta y nueve: emiliano»

La primera cita con la ginecóloga es hoy y Haise no puede estar más contenta porque no se puede. Aunque Richard le da competencia en eso, él se despertó temprano y ordena el desayuno al cuarto. Cuando ella despierta ya tiene el desayuno servido en la mesita.

—Buenos días dormilona. —la saluda, sentándose en frente de la mesa.

—Buenos días Richard. —le da una sonrisa adormitada.

—¡Hoy es el gran día! —toma un sorbo de su café.

—Sabes que el bebé no nacerá hoy, ¿verdad? —le pregunta en un tono burlón mientras camina para la mesita.

—¡Claro que lo sé! —le rueda los ojos. —pero hoy lo veremos en el ultrasonido. —

—¿Crees que me hagan ultrasonido? —toma un trozo de su mango.

—Ojalá que sí, así lo voy a poder ver antes de irme. —le recuerda en unos días tiene que regresar a Miami.

Terminan de comer y ella se arregla para ir a la cita. Llegan al lugar 15 minutos antes para poder llenar el papeleo necesario para sus records. Se tardan otra media hora para llevarla al cuarto en donde la doctora la atenderá.

—¿Por qué coños se tardan tanto? —Richard dice desesperado. —Ya hemos estado aquí por 45 minutos. —

—Ya deja de quejarte mi vida. —se acaricia el cabello. —Ya pronto vendrá. —

Y como si fuera bruja la doctora toca la puerta antes de entrar. Los saluda con una sonrisa en sus labios, pero Richard no quita su cara de pocos amigos. Le hace una que otra pregunta de cómo se está alimentando, si ha habido problemas con embarazos en su familia, si este es su primer bebé, si ha tenido un aborto entre otras cosas.

—Ya casi te pregunta qué tipo de sangre tienes. —

—¡Richard! —Haise lo regaña.

La doctora saca un aparatito gris con el cual escuchara el latido de su corazón. Levanta su camisa y pone gel en su vientre.

—¿Estás lista? —le pregunta con una sonrisa en sus labios.

—Si. —los dos dicen al mismo tiempo.

La doctora pone el aparatito en su vientre e inmediatamente el latido de su corazón se escucha, llenando sus ojos de lágrimas.

—¡Oh por dios! —Haise vuelve a ver a Richard quien está igual que ella.

—Mi niña. —Richard acaricia su cabello, dejando que las lágrimas rueden por sus mejillas.

—¿Cuando me puedo hacer un ultrasonido? —Haise le pregunta, queriendo ver a su bebé lo más pronto posible.

—Lo podemos hacer ahora, tendrán que esperar alrededor de una hora. —la doctora frunce el ceño.

—Podemos esperar...—Richard dice inmediatamente, sin importarle que tienen que esperar otra hora más para poder hacer el ultrasonido. —Eso no es problema. —

—Okay, regresen a la sala de espera y la enfermera los llamara cuando el cuarto de ultrasonido este listo.  —ella dice y se va de la habitación.

—Lo veremos hoy. —Richard le ayuda a limpiar el gel de su vientre.

—Solo tenemos que esperar una hora más. —

—Eso está bien. —la ayuda a bajar de la camilla.

Caminan de nuevo para la sala de espera en donde se encuentran con más mujeres embarazadas de las que estaban anteriormente. Richard revisa sus redes sociales tratando de pasar el tiempo mientras que Haise busca en línea cunas y ropa para bebé. Todavía no sabe qué va a tener, pero no le matara buscar una que otras cositas. Cuando la hora pasa su nombre es llamado otra vez y para ese entonces ya tiene £500 en cosas de bebé en su carrito.