Ésto es imposible, no puedo asimilar lo que acabo de escuchar. Joder es su propio hermano ¿Cómo le pudo hacer algo así? ¿En que mente cabe que tu familia te quiera hacer daño?
Lo que se es que no puedo estar aquí, no quiero imaginar lo que es capaz de hacerme a mí si se entera que me he dado cuenta de sus suciedades.
Camino de regreso a la habitación tratando de calmar mis nervios, no quiero que Daniel se entere de ésto, ya bastante tiene con lo que le pasa.
Cerré con fuerza la puerta llamando así la atención de Daniel quien continuaba cenando. Le sonreí con torpeza.
—¿Qué te sucedió? Parece que viste algo malo— Dijo sin quitarme la mirada.
Créeme que sí lo vi.
—Sí... Digo no, no vi nada malo, solo estoy cansada— Mentí. Este no es el lugar ni el momento indicado para decirle la verdad.
No sin antes enfrentar a tu hermano. —Muévete un poco, quiero dormir— Dije haciéndome espacio en la camilla.
—¿Qué haces?— Dice sorprendido —Ve a dormir a casa—
—No te voy a dejar solo y tampoco dormiré en una silla. Así que mueve tu trasero—
Lo vi reír y como pude me hice espacio para dormirme a su lado.
Son las 7:27 Am y recién mis ojos comienzan a despabilarse. Mi cuerpo duele al igual que mi cabeza, se puede decir que esta no fue la mejor noche de todas.
Me levanté despacio para no despertar al caballero que durmió a mi lado y que aun sigue dormido.
Salí haciendo el menor ruido posible y en frente de la puerta se encontraba Sergio.
—Rocío me contó lo que sucedió, no pude venir ayer por problemas en oficina— Dijo en voz baja.
—No te preocupes. Por ahora tengo algo más importante que decirte— Lo tomé del brazo y caminamos alejado de la habitación. —Se trata de lo que pasó con Daniel—
—Sí, Rocío me contó lo de sus piernas, pero yo te ayudaré sabes que no están solos—
—Gracias Sergio, pero es algo aun más delicado... Descubrí que Manuel es el responsable de lo que sucede con Daniel—
Sus ojos se abrieron y sus cejas se levantaron al compás. Es muy predecible lo que estará pensando.
—¿Estás loca?— Exactamente eso —¿Por qué dices eso?—
—Lo escuché hablarle por teléfono y ahí lo descubrí—
Acarició su cabello como siempre suele hacerlo Daniel cuando está nervioso. Caminó varios pasos en círculo, imagino buscando explicación a lo que acabo de decir.
A decir verdad, no tiene explicación nada. —¿Qué razón tuvo para hacerle eso a su hermano?— Preguntó.
—Es lo que tenemos que descubrir tu y yo—
—¿Quién más lo sabe?—
—Solo te lo he dicho a ti—
—¿Por qué a mí?—
—PORQUE ERES SU MEJOR AMIGO, JODER COMO PREGUNTAS— Grité eufórica por tantas interrogantes que he recibido —Porque en estos momentos no confío ni en mí— Susurré.
Sonrió e hizo silencio. Ambos nos miramos mientras pensamos en ¿Cómo, cuando y por qué?
Pasaron varios minutos mientras nosotros seguíamos en lo mismo. Hasta ahora la única explicación que tengo para todo ésto, es que Manuel está consumiendo drogas. Para que alguien haga lo que el se atrevió es la única justificación.
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Mi Cuñado Y Yo [+18 ©]
RomansaMasiel González una mujer de 29 años, con una maravillosa familia y una vida ejemplar, pero cansada de la rutina. Su vida cambia cuando un mal día aparece Daniel Ortiz, SU CUÑADO. Llevando consigo un pasado lleno de peligro. Amor, pasión, ternura, e...