Capítulo 9.

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Estaba muy feliz, el tal "Aames" era Phoenix el del Papel de Petter, bailaba ridículamente por todo el salón de la fiesta, salí a tomar un poco de aire.
Al volver a entrar me encontré con un pálido Alex sentado viendo a la nada, ¿porqué estaría así?.

- Heeey, ¡querido Alex! - Me senté dándole un Pequeño golpe con mis caderas - ¿qué tienes? - Pregunté al ver que no respondía.

- ... - murmuró.

- ¿Yo?... - pregunté, Sólo señaló sus labios.

OH NO, REWIND, REWIND :0 Ahora que he rebobinado, recordé que lo besé, fue un muy sencillo y simple beso, un toqueteo, no sabría describirlo, PERO LO HABÍA BESADO, eso hizo que actuara igual que él, ay pero que hice.

- Te besé... - Murmuré.

- , eso hiciste.- Respondió sorprendido.

- Creo que es buen momento para ir a casa.

- Lo mismo digo... respondió él.

Me despedí de las chicas y fuimos a un alquiler de bicicletas.

- No hay bicis. - Comenté al observar que estaba vacío el Parking de bicicletas.

- No, no hay... y parece que lloverá. - dijo alzando la vista.

- Bien, vamos a una cabina, llamaremos a mamá. - Empezó a llover fuertemente.

Llamamos a mi mamá dijo que camino a casa la llanta del auto se había espichado, desinflado que buscáramos hotel que ella se encargaría del pago.
Entramos a un Motel, era lo único cerca, pedimos una habitación y llamamos a mamá el recepcionista quedó asombrado con nuestra presencia. Pues es de suponerse, dos adolescentes en un motel, que irán a hacer, ¿jugar barbies? No, al menos eso pensaría, Hasta que le pasamos para que hablara con mi mamá. Nos dio las llaves de la habitación, era pequeña había dos camas una para cada uno, un par de batas de baño, pantuflas entre otras cosas.

Los dos estábamos empapados, tomé una ducha caliente, me puse la bata mientras mi ropa se secaba, al igual que la de Alex. Mientras veíamos tv, sentados en un pequeño sofá que acompañaba la habitación.

Me entró sueño y me fui a dormir, que importa esa ropa, mañana estará seca. Además ni que Alex me fuera a Violar, o algo así, entre nosotros hay respeto mutuo.

Bueno, algo así.

Al despertar me vestí y bajamos a desayunar en el café del motel, mi madre pasaría por nosotros a las 9 a.m.
Ya en casa, con cómoda ropa y la pansita llena, bueno más llena, terminaba de hacer unas cosas para poder ir a casa de Alex, decidimos cambiar la técnica esta vez.

Estaba sentada en una silla que está en la habitación de Alex  dando vueltas en ella, Alex estaba leyendo un libro de homicidios y demás, se prepara con anticipación para la universidad sólo nos falta un par de meses y estaremos entrando a la universidad.

Realmente a veces me pregunto como es que podemos actuar tan radicales luego de todo lo que pasó, nuestra mitología, supongo. Tomé su laptop y entré al internet, busqué el nombre del tal Phoenix Chumbs en Guuple un navegador web.

Tenía la mirada fija al computador  leyendo artículos sobre Phoenix, sentí una mirada clavada en mi, Alcé la vista y Vi la penetrante mirada de Alex en mí, rápidamente volví a mirar la laptop, me sentía incómoda.

Me levanté para bajar a la cocina por unas galletas. Buscaba en la alacena las galletas "Cookies Salad Cheesy Freeze"  vaya nombre, pero son las mejores galletas de queso que he probado. Volteé para tomar un par de refrescos enlatados cuando me caí al ver unos binoculares asomados a la ventana de la cocina.

Este tipo tenía el rostro cubierto con un pasamontañas, puso su dedo sobre su boca indicando que no gritara, caminó lentamente hasta la puerta junto a la ventana la cual estaba sin seguro, la abrió y entró. Caminó lentamente hacia mí con un cuchillo en la mano, estaba contra la isla de mármol que hay en medio de la cocina, frente a frente con este hombre, mi respiración se hiper ventiló, sudaba frío y no podía despejar la mirada de sus ojos.

- hola... - Susurró éste hombre pasando el cuchillo a milímetros de mi garganta - niña... sólo te diré una cosa, no te metas donde no te conviene... - trague fuerte ante esas palabras. - Seria una tremenda lástima tener que...

- Se calló sin terminar la oración, posó su vista sobre mi camisa, la cual tenía botones, dejando ver un poco de busto - Sería una pena tener que... - retomó la oración - tener que ver a tu amiguito llorar por su princesa, ya que puede que la encuentren muerta... claro, si no deja de meterse en lo que no le incumbe. - Rompió con un tirón casi todos los botones de mi camisa excepto el  último, con su cuchillo rompió la unión de mi brasier haciendo que este se dividiera en dos, me lo quitó, lo lanzo al suelo y me dio un asqueroso beso en la mejilla dejandome desnuda en la cocina, se dio vuelta y salió de la casa.

Rápidamente pasé seguro a la puerta de la cocina y la principal, temblaba demasiado sólo me senté en el suelo para calmarme. Alex al notar que había tardado tanto bajó y me encontró pálida, temblando, llorando y desnuda, abrió los ojos como platos, sólo me preguntaba que había pasado, pero no respondía sólo lloraba, soy una dramática, pero les pregunto que ¿harían ustedes si un loco entra los amenaza y deja semi desnudos?, Alex solo me abrazó tratando de calmarme.  En vez de sentir vergüenza de estar desnuda frente a Alex sólo lloraba del miedo y preocupación, sentía vergüenza de todas formas, pero no tenía mente para eso, en ese instante ¿cómo era posible que ese tipo supiera de mí? y no tan sólo de mí también de Alex, si esto era sólo una advertencia ¿cómo sería lo demás?.

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¡Hoooooola!

Subiré dos capítulos por toda esta semana, a recompensa de que tengo vacaciones.

¿Ahora dime, que te pareció éste cap?

Bueno, eso es todo. ¡Bye!

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El Misterio Crumble © [Pausada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora