El origen Sombrío

Capítulo 5

Oscuridad. Oscuridad y nada más, todo lleno de ellas, todo lleno de sombras.
Aquí es dónde alguien normal se asustaría, alguien normal, pero yo, yo creo que deje de ser normal hace tres años. Justo hoy tres años.
Entonces comprendí, comprendí que todo era temporal, toda esa alegría era falsa, falsa y temporal.
Y de la nada aparecieron voces, voces que no hablaban, voces que no existían y de repente una voz de detrás soltó:
-¿Sabes quién eres?-una voz de hombre, un castrati, pensaba que no existía- Responde a mi pregunta.
-No.-dije yo- Sinceramente, antes era Alvin Grecia, pero ahora, ahora no sé quién soy ni qué hago aquí.
-Pero, ,¿Te han dicho cuál es tú nombre real?
Estuve a punto de decir Alvin, pero no, sabía que ese no era mi nombre, era muy común, y me acordé, mi nombre era Shade.
-Shade, me llamo Shade.
-Correcto- respondió una mujer- las pruebas de ADN han dado positivo, pero hay algo raro, no tiene tanta corpulencia como para tener tanta fuerza, hay que volver a probarlo, por si acaso.
-Ya sabes que yo no soy de los que mienten- Flaggie, era Flaggie, pero yo lo había visto desaparecer de repente, por el suelo, y de repente, como un chasquido aprendí, algo salió disparado del suelo.
-¿¡Qué es eso!?
-No lo sé, se ha caído al suelo.- dijeron dos hombres- pero eso demuestra que es uno de los nuestros.
-Lo primero, lo tengo en la mano, lo segundo, es un utensilio con un mango frío y duro, es... como el metal.
Aplausos, de repente se escucharon aplausos.
-Eres bienvenido Shade, hijo de Shadow.- dijo la mujer- si quieres unirte, ven a través de las sombras.
Me tiré al suelo, por primera vez en mi vida, me tiré de cabeza al suelo. Me tiré y me moví, me moví por primera vez por las sombras, lo hice, me sentí, como explicarlo, me sentí... bien, fue una sensación satisfactoria y extraña.
Todos estaban allí, y cuando digo todos, digo 5 personas, 4 chicos (Flaggie entre ellos) y 1 mujer.
Todos me miraron, y murmuraron cosas que no entendí, pero seguro que se relacionaban con el volumen de mi cuerpo y mis músculos, que obviamente, no eran cosa del otro mundo.
-Te vas a ir a tu viejo instituto- me dijo él hombre del centro -y recuperarás tu antigua vida, solo que sin tú padre, que en paz descanse.
-¿Y mi madre?-dije yo.
-Tu madre no es apta para tí.
-¡¡¡¡¡¡¡ CÓMO QUE NO !!!!!!!!
-Tú madre, tu madre... tu madre murió en la misma batalla que tu padre por protegerle, pero ella era una luminosa, y nosotros... nosotros somos sombríos.
-Pero ella le protegió...
-NO.
-Sí,- dije yo -mira,- volví a sacar algo del suelo, era un móvil raro, que nunca había visto, pero lo saqué y, extraño pero cierto, había un vídeo pausado -he aquí la prueba.
No sabía lo que decía, pero al mismo tiempo, sí que lo sabía. Todos lo vieron, y lo analizaron con algo raro, pero se lo creyeron, dejaron sus principios para creer en la verdad.