¿De qué montañas habrás venido
fugitiva de los crepúsculos?
Decir que te quedes es un insulto,
pero dejar que te vayas sería un martirio.Oh pero qué martirio ya cuando te extrañe.
Soñar volar juntos, y morir en pleno aire;
caer, sin sentir que el asfalto nos da un sentido.Para alejarme ya de las espinas de octubre,
(aquellas que en silencio contuve)
pretendo caminar y dejarte en un suspiro.Haber vivido un mundo de fuegos y nubes...
Oh pero cómo quisiera ser libre.
Espero que algún enjuto bosque te anide...
¡y que en una cerca te anudes!