8:30 p.m
Se escucharon los pasos pesados de Pepper en el patio, pisando las secas hierbas y algunas hormigas, ella estaba enojada pero no conocía la verdadera razón, sólo sentía una especie de celos. Ella había ido a espiar a Brissa. Fue algo difícil seguirla, ya que no había llevado su auto, pero el restaurante seguía estando cerca.Abrió la ventana con brusquedad y entró a la habitación, no importaba si hacía mucho ruido o no, de todas formas no se escuchaba nada por fuera. Luego, encendió la luz para buscar otros zapatos que no la delataran, pues los que traía puestos se ensuciaron de lodo; pero en cuanto se quitó el par, el sonido de la puerta de entrada abriéndose de golpe la hizo sobresaltar y apagó la luz, rápidamente.
—¡Angelique! ¡Nygma! ¡Estuve llamando diez veces seguidas!
«Brissa», pensó Pepper.
Entonces, lanzó los zapatos hacia el armario y cerró la puerta, después brincó hacia la cama y fingió que estaba dormida aún. Al escuchar que los pasos se hacían más rápidos hacia su puerta, Pepper comenzó a concentrarse para no perder el control. De pronto, Brissa abrió la puerta y encendió la luz inmediatamente, se escuchó un suspiro de alivio su parte y volvió a apagar la luz; Pepper abrió lentamente uno de sus ojos y al notar que se había ido, ella también suspiró de alivio.
Por otro lado, estaba Brissa de brazos cruzados, observando muy enojada a Edward y Angelique estando abrazados, durmiendo en su cama. Luego, encendió la luz y ellos se despertaron de inmediato.
—Agh, apágala... —se quejó Angelique.
—Par de ninfómanos, se supone que debían...
Brissa iba a responder, pero luego miró alrededor de su habitación y quedó boquiabierta: su ropa estaba en el suelo, había golpes en las paredes hechos por la orilla de la cama, las sábanas estaban arrugadas y... y luego, miró algo blanco en ellas.
—¡¿Están locos o qué les pasa?! —les gritó, y se acercó hacia su cama—. ¡Angelique, dime que esto no es...!
La susodicha talló sus ojos, luego frunció el ceño y miró hacia donde apuntaba Brissa.
—¡Claro que no! No somos unos sucios, es yogur natural —explicó, señalando el bote medio vacío a un costado de la cama.
—Ay, gracias al cielo —suspiró Brissa—. Pero se suponía que debían cuidar a Pepper, ¡no estar revolcándose en mi cama como animales!
—¡Hey! —se quejaron al unísono.
—¡Largo! —gritó Brissa, señalando la puerta.
La pareja se levantó y recogió su ropa, luego se vistieron mientras Brissa estaba de espaldas y salieron de la habitación.
—Envíame la cuenta de las reparaciones —le dijo Angelique a Brissa, con un tono cansado, y ella tensó la mandíbula.
Al encontrarse afuera los tres, se disculparon y le dijeron a Brissa que, de todas formas, mantuvieron vigilada a Pepper. Pero luego, Edward recordó que tenía que hacer algo y regresó adentro.
—¿Pepper? —tocó la puerta, y la susodicha levantó la mirada, tallando sus ojos—. Perdón, no quería despertarte.
—No importa, pasa —dijo Pepper, y Edward dejó entreabierta la puerta—. ¿Sí?
—Necesito preguntarte algo... —se sentó a su lado—... sobre tu dibujo —dijo Ed, tomándolo de abajo del cojín donde estaba escondido. Pepper frunció el ceño—. Sabes quién soy yo, ¿verdad?
—Algo así —respondió—, recuerdo tu nombre y que te gustan los acertijos, pero no la forma en que te conocí. Sigo recordando.
—Okey, ahm... ¿y sabes quién es él? —le preguntó Nygma, mostrándole el dibujo.
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ᴬ ᵁ ┇𝑺𝒎𝒊𝒍𝒆┇Jᴇʀᴏᴍᴇ Vᴀʟᴇsᴋᴀ
Fanfic🅴🅳🅸🆃🅰🅽🅳🅾... ¿𝐐𝐮𝐢𝐞𝐫𝐞𝐬 𝐚𝐥𝐠𝐨 𝐝𝐢𝐟𝐞𝐫𝐞𝐧𝐭𝐞? No dejará de ser lo que estabas buscando. Quieres leer más de Jerome Valeska pero ya te acabaste las historias de tu biblioteca. Tienes muy presente que él es un criminal, que es algui...