Yo: ¡Hombre Sandra!
Sandra: He ido a tu casa para ver que tal tu verano y me ha dicho mi madre que estarías por aquí
{Marina y yo nos apartamos un poco para hablar.}
Yo: Pues mi verano hasta hace cinco días había sido genial...
Sandra: ¿Y ahora que pasa?
Yo: ¿Sabes de esos gemelos te hable que veraneaba con ellos y así?
Sandra: Sí.
Yo: Pues estuvieron desde casi el principio de verano hasta hace cinco días aquí, y empecé a salir con uno, con Jesús. Y ahora le echo un montón de menos...
Sandra:Oye una cosa, no se si serán los gemelos los que estaban metiendo cosas en la casa de enfrente de tu casa.
Yo: ¿Como?
Sandra: Si, es que cuando he ido a tu casa he visto a dos gemelos metiendo cajas y cosas a esa casa.
Yo: ¡Tengo que ir a ver si son ellos!
{Voy a decirle a Marina.}
Yo: ¡Marina Marina!
Marina: Si, anda vete que son ellos, es una sorpresa que te queríamos dar. Luego ven aquí con ellos.
{Voy corriendo a casa.}
Yo: Mama, ¿Son loa gemelos y Eva Y Carlos los que se han mudado enfrente nuestra?
{Mi madre sonriente dice.}
Mi madre: Compruébalo tú misma.
{Salgo de mi casa corriendo a la casa de enfrente, podría oler la colonia de mi Jesús, tocó el timbre y alguien habla.}
Jesús: ¿Quien es?
Yo: ¡Jesús ábreme!
{Abre la puerta y ve que soy yo.}
Jesús: ¡Mi niña!
{Salto a sus brazos llorando.}
Yo: ¿Como es que te has mudado aquí? ¿Pero te das cuenta de lo cerca que estamos? ¿Por que no me dijiste nada? ¿A esto venia lo de que pronto nos veríamos?
Jesús: Deja de llorar cielo, y relajate que en un segundo me has echo un montón de preguntas.
{Nos sentamos en su jardín.}
Jesús: A mi madre le han tenido que trasladar aquí por su trabajo, no trabaja exactamente aquí, pero esta a media hora en coche y como esta casa se vendía la compramos.
Yo: ¿Entonces no te fuiste a Sevilla?
Jesús: No, hemos estado aquí en casa desde el 20.
Yo: Por eso era lo de que pronto nos veríamos ¿no? Y la llamada de la noche sabías que estaba despierta por que viste luz en mi habitación.
{Jesús me da un beso para que me relaje.}
Jesús: Ya estoy aquí pequeña.
{Después Dani Jesús y yo vamos donde está Marina con Edu, Mario y Carlitos.
Por el camino voy agarrando de la mano a Jesús, muy fuerte.}
Jesús: ¡Ais! Me haces daño.
Yo: Lo siento, es que no quiero que te vuelvas a ir de mi lado, te he echado tanto de menos...
Jesús: Ya te vi que ni saliste de casa...
Yo: No... No me apetecía...
{Me da un beso en la mejilla y seguimos andando.}