CAPITULO 25

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{Oigo a mi madre hablar con alguien por teléfono.}

Mi madre: Pero, así ¿De repente?

{En la voz se le nota preocupada.}

Mi madre: Ayer estaba genial, esto no puede haber pasado esto.

{Estaba en mi silla sentada y preocupada me senté en las escaleras para poder escuchar mejor.}

Mi madre: Estoy que no me lo puedo creer, en serio...

{Me estaba poniendo nerviosa, ¿Con quien estaría hablando? ¿A quien se refería? Cuantas preguntas sin respuesta. No consigo oír a la voz que esta detrás del teléfono. Solo a mi madre.}

Mi madre: ¿Y tu como estas? Ha tenido que ser un fuerte golpe.

{Consigo escuchar la voz de Patricia al otro lado del teléfono.}

Patricia: Mal, estoy que apenas me puedo tener en pie, esto no me esta pasando, no, no...

{Estaban hablando de Marina. ¿Que le habrá pasado? Ayer estaba genial no creo que...}

Mi madre: Sabes que voy a estar siempre aquí para lo que necesites eh, no dudes en llamarme si necesitas algo, a cualquier hora.

{Patricia dice algo pero no consigo escucharla.}

Mi madre: No, no esta preparada para esto.

{Oigo que se despiden y mi madre viene hacia las escaleras, se esta secando las lágrimas, yo me levanto rápido y me meto a mi habitación, como si no hubiese escuchado nada, llega a mi habitación.}

Mi madre: ¿Que haces _____?

Yo: Nada aquí mama. ¿Porque tienes los ojos rojos? ¿Has llorado? 

{Se rasca los ojos y me dice.}

Mi madre: No cielo, es que he estado picando cebolla y pues...

Yo: Ah vale...

{No me atrevo a decirle nada. Me da un beso en la frente y se va de la habitación.

Le mando un mensaje a Jesús.}

Yo: Cariño, le ha pasado algo a Marina, Patricia ha llamado a mi madre y le ha contado algo.

Jesús: Seguro que sólo es que ha vuelto a vomitar, nada más.

Yo: No Jesús, mi madre ha llorado y se le notaba en la cara que es algo serio, además mi madre no llora por cualquier cosa...

Jesús: No te preocupes cielo, seguro que no es nada.

Yo: De esto no le digas nada a Dani, NADA.

Jesús: Vale cielo, me tengo que ir, luego hablamos.

Yo: Vale feo.

{Después de hablar con Jesús me quedo pensativa, tengo que saber que le ha pasado a Marina, no creo que... bueno... se haya... ido de este mundo...}

Historia de verano. Segunda parte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora