CAPITULO 27

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{Ya hemos comido y estoy en mi habitación tumbada en la cama boca abajo, alguien toca mi puerta, antes de girarme y antes de que hablase se que es Jesús, huele a su colonia.}

Yo: Hola cielo, pasa.

Jesús: ¿Como has sabido que era yo?

Yo: Tu colonia.

Jesús: ¿Puedo pasar?

Yo: Claro, eso ni se pregunta.

{Me pongo boca arriba y él se sienta a mi lado.}

Jesús: Me ha dicho tu madre que estabas un poco baja de ánimos ¿Que pasa?

Yo: ¿Y has venido por eso?

Jesús: Claro, he venido a animarte un poquito.

Yo: Jo, eres el mejor.

{Me da un pico.}

Jesús: ¿Qué te pasa mi vida?

Yo: Hoy he tenido una pesadilla y ahora tengo miedo me volver a dormirme, por si vuelve a pasar...

Jesús: ¿Que has soñado?

Yo: Buf... que Marina... se suicidaba..

Jesús: No cielo, eso solo es un mal sueño, te ha pasado por que le das muchas vueltas a eso y... Marina está muy bien, me ha dicho tu madre que ahora come mucho mejor, que ha ganado bastante peso reina.

Yo: Es verdad... Tengo ganas de verla ya...

Jesús: Intenta dormirte ahora un poco y a la tarde iremos a verla.

Yo: ¿Te puedes quedar aquí para que me duerma?

{Le pongo carita triste.}

Jesús: No me pongas esa cara que me puede.

{Aun pongo carita mas triste.}

Jesús: Que mala eres, anda hazme un hueco ahí que me tumbo.

{Alegro la cara y le dejo un sitio para que se tumbe, me acaricia la tripa para que me duerma, después de un rato consigo dormirme.}

Historia de verano. Segunda parte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora