Ryan.
Quise darle una sorpresa a Nicole, ser el primero en felicitarla por su cumpleaños. Decidí subir por su ventana pero cuando entré a su habitación ella no estaba, escuché risas y supuse que su familia la estaba felicitando, me quedé en su habitación hasta que ella entró, antes de que se voltee, tapé su boca con una de mis manos.
Ella se queda quieta, su respiración no es estable, quito mi mano lentamente.—No me hagas daño por favor...
Creo que la he asustado.
—Nunca te haría daño.
Nicole voltea y suelta todo el aire contenido cuando me ve.
—Eres tú.—dice y me rodea con sus brazos.
—Feliz cumpleaños amargada Carrington.—digo y ella sonríe.
Tomo sus dos manos sintiendo lo frías que están.
—Gracias sexy Anderson.—la acerco a mi para poder besarla.
Sus labios se sienten calidos, nuestras lenguas danzan y nuestros labios se masajean sintiendose tan bien, como me gusta.
Nos separamos y cuando doy un paso atrás veo a Batón, nuestro bebé. Le hago cariño por unos minutos hasta que queda completamente dormido sobre mis piernas.
—Es tan adorable.—dice Nicole, con mucho cuidado lo pone en su camita.
—Es una bola de pelos.—digo mirando como duerme.
Sacudo mi pantalón, Nicole se sienta en mis piernas, la observo sin perderme ni un rasgo de su hermoso rostro. Me acerco a su rostro para dejar un beso en la comisura de sus labios.
—Quiero que vivamos juntos cuando nos vayamos a la universidad.—digo y Nicole se me queda viendo por unos segundos.
—Pero...tendriamos que—
La interrumpo porque se lo que va decir.—Yo voy a trabajar y estudiar a la vez, podemos alquilar un departamento cerca de la universidad y pagarlo a medias.
Nicole nunca permitiría que yo pagara solo el departamento, mucho menos que mis padres lo paguen y ella viva conmigo, por eso le propuse pagar a medias el departamento.
—Vivir juntos...—ella se levanta de mis piernas y me da la espalda.
Me levanto y me paro detras de ella. Nicole se voltea y me mira fijamente sin ni una expresión en su rostro.
—Pero yo no se cocinar, no se lavar, no se planchar, yo...
Le doy un beso en los labios para callarla.
—Podemos aprender juntos, no es necesario que sepas hacer todas esas cosas.
Nicole sonríe y pasa sus brazos por mi nuca.—Entonces vivamos juntos.
Tomandola por la cintura, la levanto del suelo y le doy vueltas, ella se rie contagiandome a mi igual de su risa.
—Shh... —me chita poniendo sus manos en mi boca.—vamos a despertar a mis padres.
—Cuando vivamos juntos no nos preocuparemos de eso.—digo y ella esboza una sonrisa.
La bajo acostandola en su cama, Nicole se aferra a mi nuca haciendo que caiga sobre ella.
—Quedate un rato más.—me susurra cerca de los labios.
Sin poder resistirme la besa, mis manos pican por tocar su cuerpo. Nicole suelta mi nuca para poner sus manos en mi pecho.
—Todo el tiempo que quieras.—digo y ella me sonrie.
Nicole me acerca a su rostro para poder besarme, mis manos viajan por su cintura hasta llegar a sus muslos, nuestros cuerpos se calientan haciendo que me quite la polera. Ayudo a Nicole a quitarse su pijama, dejándola solamente en bragas.
ESTÁS LEYENDO
Desde que llegaste
Novela JuvenilNicole es una adolescente de carácter fuerte, decidida a terminar su último año escolar con las mejores calificaciones para tener una beca universitaria en la mejor universidad de California. Ella no quiere distracciones, ni nada que la desenfoque d...