Estaba seguro de haber tomado los supresores aquella mañana, podía recordarlo perfectamente y mas sin embargo no le surtieron efectos.
"No podía estar pasando", se repetía en su cabeza, "esto debía ser un error"... intentaba convencerse de eso pero la sensación del lubricante humedeciendo sus piernas le afirmaba lo contrario.
Piers Nivans era un omega, uno de los mas relevantes dentro de la BSAA, alguien bastante responsable y comprometido con su papel; alguien de quien menos se esperaba que algo asi pudiera ocurrirle.
Por suerte para el, nadie parecía notarlo; la BSAA se conformaba en su mayoría de alfas, muchos de ellos jóvenes cadetes inexpertos que podrían caer rendidos fácilmente por sus mas bajos y primitivos instintos. Por ello la población de omegas se limitaba a una minoría en la cual el se encuenta, sin embargo, a pesar de eso, los omegas son bienvenidos. La organización abre las puertas a cualquier hombre o mujer que quisiera combatir contra el bioterrorismo sin importar su raza o sexo. Todo esto porque sus fundadores, habían luchado codo a codo con omegas en el pasado que dieron todo para frenar la amenaza que se desató en Racoon city e inició con la batalla antizombie que se libra en la actualidad...
Un escalofrío irrumpió sus pensamientos, sentía una corriente electrica a travez de su espalda, clara señal de que el celo empezaba a manifestarse; agradecía que nadie podía oler su aroma, después de todo, los supresores no fallaron completamente... pero no debía confiarse.
Debía retirarse enseguida antes que el resto de los síntomas empezaran y fuera demasiado tarde. Habló con la recepcionista disculpandose de antemano por su ausencia, luego le pidió que avisara al capitán Redfield que no se reportaría con el el día de hoy, se despidió y después cruzó la puerta dispuesto a irse.
Sintió el viento helado en su rostro al salir y miró el cielo, hacía frío y se avecinaba una tormenta; en su interior agradeció el mal clima al ver su juicio despejado y sin perder mas tiempo, se dirigió a encerrarse en su hogar.***
"Esto ya no era normal"
Tenía poca cordura en ese momento, su piel ardía en fiebre y sus ojos llorosos nublaban su vista.
Habían pasado ya unas 48 horas desde que su celo empezó y parecía no desaparecer.-ah.. huff... ¿por... que..?- gemía en el suelo, buscaba refrescarse de algun modo.
No quería ceder a su instinto, había pasado mucho tiempo sin sentir el efecto del celo gracias a los supresores, no entendía por que simplemente empezaron a fallar asi como asi.
-ah... al... fa...- murmuraba jadeante, buscando consuelo con sus propios dedos, esperando calmar su instinto.
***
Las horas pasaban, fuera de su apartamento, el mundo seguía pero él estaba ahí, atrapado y rendido ante su naturaleza.
-hmmm... ahhh...- gemía con cada roce -capitán, por favor...-
-dime que es lo que quieres...- pudo escuchar su voz ronca tan cerca de su oído, le estremecía
-por favor... alfa... no aguanto... mmm- mordisqueaba su labio, sus caderas se agitaban desesperadas en busca de contacto.
-pidelo- le ordenó y no pudo evitar lloriquear de placer.
-ahh... ahh... lo quiero... dentro de... mi- jadeaba suplicante, estaba ansioso porque le hiciera todo aquello que siempre deseó.
Quería que su capitán le viera y lo tomara ahi mismo, que se enterrara entre sus piernas y le llenara por completo... deseaba que le anudara y marcara como suyo, ansiaba tener a sus cachorros y ser su pareja destinada.
Pero para su mala suerte, Chris Redfield no estaba ahí; Piers había estado delirando a causa de su estado actual.
.
.
.
ESTÁS LEYENDO
Bearfield and Puppiers antology (CANCELADO)
AcakEsta es una colección de one shots omegaverse de mi preciosa otp, cada uno de un tema distinto para elegir.