Viaje en el Tiempo (NaLu)

27 Cristal de los Recuerdos Perdidos I

Nuevo capítulo...
Disfrútenlo y lloren como lo hice yo mientras lo escribía T-T

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-Mavis... Tu cuerpo físico debe estar presente cuando llegue el momento- Finalizó mientras los ojos café de la pequeña pelirosa recobraban su brillo.

Todos los magos se encontraban sorprendidos por lo que había sucedido hace unas horas, miraban a la pequeña pelirosa que se encontraba sentada en la barra junto a sus jóvenes padres.

-Mamá siento haber causado tu deficiencia de magia- Dijo la pequeña en tono de disculpa mientras observaba a la bebé en los brazos de la rubia.
-No debes de disculparte- Respondió con una sonrisa la maga estelar -Soy muy feliz de tenerte conmigo en mis brazos- Agrego regalándole una cálida mirada.
-Lo que dice Lucy es verdad, somos muy felices- Hablo el mago de fuego mientras con su mano revolvía un poco el cabello de la pequeña, lo que simplemente provocó una sonrisa por parte de ella.
-Layla- Llamo la primera maestra Mavis acercándose a la barra -Creo que se está acercando el momento- Agregó en tono preocupado mientras su vista se encontraba dirigida a la entrada del gremio.
-Lo se, puedo sentir que se acerca- Comentó la pelirosa seria mientras fijaba su vista en la misma dirección que la primera -Zeref se acerca- Sentenció lo que captó la atención de todos los magos en el gremio.
-¿Estás segura de todo hija mía?- Preguntó preocupado el maestro Makarov desde la planta alta del gremio.
-Completamente- Dijo sin una pizca de inseguridad o miedo lo que sorprendió a varios -Primera- Llamo la pelirosa mientras emprendía su caminata a la salida del gremio.
-Entiendo- Respondió la maestra de Fairy Tail dirigiendo su mirada a Makarov que simplemente comprendió la situación, necesitaban su cuerpo físico pronto.

La pequeña maga celestial se encontraba en las afueras del gremio de pie con los ojos cerrados esperando por la llegada del mago oscuro, esperando por Zeref, todos observaban la pequeña silueta en la entrada del gremio sorprendidos por la valentía que esa niña emanaba, la primera en levantarse fue la maga estelar que en sus brazos cargaba a su pequeña hija y con una sonrisa en sus labios camino en dirección donde se encontraba su pequeña valiente seguida por su esposo que al igual que ella tenía la misma sonrisa, acto que fue imitado poco a poco por el resto de los miembros de Fairy Tail, solo unos minutos bastaron para que todos estuvieran afuera esperando junto a la pequeña pelirosa la llegada del mago oscuro.

-Estamos contigo- Fue la voz de la rubia la que hizo que la maga abriera sus ojos y volteara para sorprenderse por lo que veía.
-Mamá... Estoy bien- Dijo la pelirosa mirando a la rubia la cual simplemente le sonreía -No deben preocuparse- Volvió a hablar esta vez dirigiéndose a los demás miembros del gremio.
-Fairy Tail no deja a un compañero pelear solo- Se escuchó la voz de Erza quien se acercaba a ella -Pelees o Rompas una maldición, vamos a estar contigo- Agregó con una sonrisa contagiando a todos los demás con su espíritu.
-Gracias- Dijo con una sonrisa en sus labios la pelirosa.
-Layla- Llamo una voz masculina a lo lejos captando la atención de todos los presentes -No entiendo porque has regresado a este tiempo- Agregó aquella voz mientras salía de las sombras ante la mirada expectante de todos.
-Zeref...- Lo llamo la pequeña pelirosa dando dos pasos al frente -He venido para cumplir mi promesa- Dijo mientras lo miraba determinada.
-Entonces... Llegó mi hora- Comentó mientras una pequeña sonrisa aparecía en sus labios -Después de más de 400 años... Por fin- Agregó dirigiendo su mirada al cielo -Supongo que lo que pase aquí, también pasará en el futuro- Dijo mirando está vez en dirección a la maga del futuro.
-Así es- Afirmó la pequeña -Tu sufrimiento está por terminar- Agregó.
-Comprendo... Espero que así sea- Dijo mirando en dirección al mago de fuego.
-Layla- La voz del espíritu de la primera la llamo mientras corría en dirección a ella deteniéndose una vez estuvo consciente de la presencia del mago oscuro.
-Primera, ¿Esta lista?- Preguntó mirando a la primera a lo que la maestra simplemente asintió dándole a entender que su cuerpo físico ya no se encontraba en el cristal a lo que la pelirosa solo dio unos pasos más hacia adelante y cerró sus ojos para poder concentrar su poder mágico sorprendiendo a todos ya que era aún mayor al que sintieron cuando ella había llegado.