Moan in lavender

Especial Yoshiatsu

¿Cómo nace un «rey del sexo»? ¿Cómo se pasa de ser un niñato virgen promedio a trabajar en la industria del porno y que tu vida sexual sea más escandalosa que la de los propios actores? Bueno, todos empezamos por algún lado.

En mi caso yo era un adolescente de Aomori cualquiera: tenía a mis amigos del club de fotografía, salía con ellos los fines de semana y mis calificaciones no eran nada de lo que enorgullecerse. La verdad siento que fui un idiota con eso, yo realmente tenía potencial para estudiar, simplemente me aburría en clase. Me pasaba las horas garabateando o pensando en lo que quería hacer aquella tarde, y por supuesto los exámenes no iban a salirme bien de esa forma.

–Yoshiatsu-kun.–

–¿Mm?–

Hanae Saki, mi tutora y la única de todo el personal docente que había accedido a mi petición de que se refirieran a mí por el nombre propio. Ella era una de las pocas razones por las que seguía viniendo a clase.

–¿Podemos hablar un segundo?–

–¿Qué ocurre?–

–Tus calificaciones han vuelto a empeorar, si sigues así...temo que tendré que hacerte repetir curso.–

–¿Seguiría en su clase, al menos?–sonreí

–Yoshiatsu-kun.–suspiró, hastiada, y me golpeó ligeramente con el libro de historia en la cabeza– ¿Por qué no te pones a estudiar en serio? Si lo hicieras estarías entre los mejores promedios del curso, estoy segura.–

–Eso me da igual.–fui sincero–Ser el primero de la clase no me motiva como para estudiar, no quiero ir a una universidad privada.–

–¿Y qué es lo que te motiva entonces?–

–¿Usted?–

–...–sonrió con dulzura

No era ningún secreto que estaba colado por ella. Aquel año se me habían declarado una o dos chicas de mi clase, pero no estaba interesado. Me atraía la idea de una mujer experimentada y adulta, pero que aún conservaba esa dulzura, ese rostro inocente...

Sabía que estaba siendo bastante directo con ella y que eso podría causarme problemas, pero era obvio que ella solo me veía como a un niño de 17 años en gakuran y no se tomaba en serio lo que le decía. En fin, se empeñó mucho en ayudarme con los próximos exámenes, así que ambos nos quedábamos en la sala de profesores las tardes que yo no tenía actividades del club.

–¡Muy bien! ¿Ves como si te esfuerzas lo sacas en seguida?–todos los profesores habían vuelto ya a sus casas, pero ella seguía ahí conmigo

Si lo pienso ahora se parecía un poco a Nozomi.

–Es usted muy atenta, Hanae-sensei.–empecé a recoger mis cosas–Se ha hecho un poco tarde.–

–Está bien, no te preocupes por eso. Vuelve con cuidado a casa, ¿sí?–

–Hanae-sensei.–me levanté, en aquella época yo ya medía 1,70 por lo que era algo más alto que ella

–¿Mm?–

–¿Sale con alguien ahora mismo?–

–...–tardó un segundo en reaccionar–¡Yoshiatsu-kun! ¡Esa pregunta está totalmente fuera de lugar!–intentó mantener la compostura, pero juraría que se sonrojó un poco

Era preciosa.

–¿Eso es un no?–sonreí de medio lado

–Vuelve a casa, anda.–