4: La palabra prohibida

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La bestia se había vuelto a ir. ¿Por qué estaba yendo y viniendo tan seguido últimamente? Jungkook podía imaginar que no se trataba de nada bueno. Ese tipo andaba muy inquieto las últimas semanas y eso solo lo ponía más a la defensiva a él mismo. Tenía miedo. Su madre estaba igual.

- No quiero ir a clases hoy - le dijo esa mañana mientras desayunaban. - No quiero dejarte sola.

- Jungkook aprovecha que él no está y ve a la universidad. Yo también iré a trabajar hoy.

- Mamá ¿estás loca? ¿Qué tal si vuelve? Si no nos ve aquí, ya sabes lo que va a pasar.

- No creo que vuelva, al menos no hoy.

- No puedes estar segura.

- Recibió una llamada ayer. Era de esa chica creo. Parece que tuvo algún problema y él se veía muy ansioso por irse.

Eso no lo tranquilizaba para nada. Su comportamiento se había vuelto muy impredecible.

Insistió en que ambos se quedaran en casa ese día pero su madre lo terminó convenciendo de lo contrario. Aún así fue con muchas dudas ese día a la universidad.

No tenía clases con el señor Kim esa mañana pero ahí estaba su profesor impidiéndole avanzar.

- Por favor ven a mi oficina para que hablemos. - le había dicho el mayor. Su mirada estaba muy seria.

- ¿Sobre qué? - preguntó confundido el pelinegro.

- Solo sígueme.

Sin decir nada más Jungkook siguió a su profesor hasta un pequeño cuarto que tenía de oficina. El mayor se sentó en su silla y le hizo un gesto a su alumno para que tomara el asiento de enfrente.

- ¿Qué pasa? ¿Por qué tanto misterio? - preguntó Jungkook mientras se sentaba.

- Eso me pregunto yo. El otro día te vi peleando con un hombre en la calle. Más bien lo vi que él estaba...como maltratándote.

Al escuchar eso el corazón de Jungkook empezó a latir con fuerza.

- No sé de qué habla. - respondió nervioso.

- Eras tú, lo sé. ¿Estás teniendo problemas con alguien Jungkook?

- No, claro que no. - negó con rapidez.

- No me mientas.

Taehyung sabía que no le estaba diciendo la verdad. Conocía bien los gestos del menor a esa altura.

- ¿Y si tengo problemas con alguien a usted qué le importa? - se levantó de la silla de repente.

Se dirigió a la salida pero el castaño fue más veloz. Se puso contra la puerta y no lo dejó salir.

- ¿Qué? ¿Me va a mantener aquí en contra de mi voluntad? - se quejó el pelinegro.

- ¿Esto tiene que ver con tus faltas a clase? Porque si es así claro que me importa.

- No, no le interesa por qué falto a clase. Ahora déjeme salir.

- No. Dime quién era ese hombre.

- Si quiere dejarme libre en la materia hágalo. Me importa un carajo.

Quería irse a toda costa. No podía seguir hablando de eso. No podía involucrar más personas. Y menos a su profesor.

- Jungkook ¿Quién era ese hombre? - insistió el mayor. No iba a rendirse.

- Déjeme salir. No tiene derecho a meterse en mi vida.

Ángel - VkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora