LIBRO 1 [Quinto Orgasmo]

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Eran aproximadamente las nueve de la noche. NamJoon se había quedado dormido, y JiMin simplemente yacía todavía sentado fuera de la universidad, esperando que NamJoon llegase por él. Su trasero dolía de estar sentado tanto tiempo; había considerado la idea de acostarse en el pavimento, pero no le resultaba lo suficientemente atractiva como para llevarla acabo.

Las estrellas se lograban ver rutilantes desde su lugar. Tenía sueño, había sido un día bastante pesado, también le apetecía tomarse una ducha, pero lastimosamente él no sabía que el rubio apenas se encontraba despertando. Sus ojos avellana se estaban cerrando poco a poco, y de repente un auto se estacionó en frente suyo.

De primeras, se asustó. En busan no era para nada normal que un carro auto negro, casi cegador por el brillo de su pintura, se estacionase fuera de la universidad. Normalmente ellas se encontraban vacías la mayor parte del día, no había mucho tránsito y a demás de ello, la única persona que se veía de vez en cuando era al viejo desagradable del aseo que siempre les escupía cuando pisaban sus fregados.

El vidrio de la ventana bajó, JiMin casi suelta un gritito al ver a un hombre tan guapo, con lentes, sonreirle. "Es un violador, quizá. ¿Y si me secuestra? No me molestaría ser secuestrado por alguien tan hermoso..." Pensó, mientras sonreía como idiota. El hombre lo observó con diversión y cuando éste carraspeó, JiMin a penas puso atención.

─¿Quieres que te de un aventón a casa? Te he visto sentado ahí por hora, ¿Necesitas uno? ─Se apresuró a hablar.

─¿Cómo sé que puedo confiar en usted? ─Se apuró a preguntar, levantándose del piso y sintiendo como sus piernas dolían infiernos. Soltó un pequeño gemidito.

─Me llamo YoonGi, y parece que eres nuevo por aquí ─Tenía una sonrisa hermosa, mejillas que concordaban con su cara y blancos y perfectamente alineados dientes, añadiendo esa presencia que era más que poderosa. 

"¡Es como Sombra!". Pensó. Había leído ese libro hacía aproximadamente dos meses, y aún seguía atrapado con la trama de aquel vampiro musculoso y excesivamente poderoso. Aún suspiraba como idiota por ese personaje, pero maldecía la estúpida realidad en la que alguien así no existía.

─No... Soy nuevo, vengo de Busan ─Explicó. El hombre pareció pensarlo unos segundos antes de asentir y abrió la puerta trasera, apretando un botón.

─No tienes que dudar. Puedes preguntarle a cualquier persona de éste conjunto quién soy, no te llevarás una mala impresión ─Sonó tan confiado, que JiMin no pudo decirle que no. 

Después de todo, si le estaba ofreciendo la opción de poder preguntar se arriesgaba a quizá ser descubierto, así que de parte de un criminar eso no sería para nada una buena estrategia.

─¡Gracias! ─Soltó enérgico, haciendo una venia que hizo que su espalda crujiera por el poco movimiento. Una vez cerraron las puertas del carro, éste emprendió marcha.

─¿Dónde vives? ─Inquirió el llamado YoonGi. El pequeño JiMin pareció pensarlo unos segundos, antes de pegarse con la palma de las manos en la cabeza.

─¡No lo sé! Soy un estúpido... No recuerdo cuál es la dirección ─Se lamentó, pegándose repetidas veces con las palmas de sus manos en la frente.

─¡Hey! No te preocupes, ¿No tienes apuntada la dirección el algún lugar?

─Está en mi teléfono, pero está descargado ─Se excusó. El hombre extendió la mano, pidiéndole el teléfono en silencio. JiMin abrió su mochila, y sin preocuparse se lo pasó.

Quizá estaba siendo muy descuidado, pero no le importó en ese momento. Él simplemente quería darse una ducha. YoonGi comenzó a rebuscar en una maleta que había cerca de donde él estaba, y sacó un cable el cual conectó al carro. La pantalla de su teléfono se encendió y JiMin entonces abrió sus pequeños ojos tanto que sus párpados se marcaron.

Cuando encendió, JiMin tuvo que estirarse y buscó el block de notas, en donde estaba anotada la dichosa dirección. YoonGi sintió la alegría del chico invadir el reducido ambiente, y se contagió de ella. El carro emprendió marcha, y él comenzó una amena conversación con JiMin.

JiMin nunca había sido desagradable, él siempre había tenido buenas herramientas para hacer amigos, herramientas sociales, y le encantaba entablar conversaciones con extraños, así que el resto del viaje, fue ameno.

Llegaron en cuestión de pocos minutos, aproximadamente diez o quince, y su teléfono ahora parecía estar en quince por ciento, lo suficiente como para poder llamar a su hermana para quejarse. Una vez el carro se aparcó, JiMin no terminó de salir cuando un NamJoon considerablemente nervioso y sudado apareció por esa puerta. 

JiMin se levantó de su lugar y dio un beso en el cachete al hombre mayor en forma de agradecimiento. NamJoon lo observó por unos segundos, como si no pudiera creer que estaba actuando tan normal y no había explotado nada más llegar.

Cuando se bajó del auto y YoonGi bajó el vidrio, NamJoon hizo una mueca de desagrado, pero JiMin simplemente lo ignoró.

─¡Muchas gracias, Hyung! ─Sonrió el chico, dando nuevamente, un beso en el cachete al hombre.

─Es un placer, niño lindo. Mañana me pasaré por la universidad, si lo deseas puedes darme tu número ─Un furtivo guiño no pasó desapercibido por el libidinoso rubio, que ahora sentía como los latidos de su corazón disminuían considerablemente.

El auto arrancó y JiMin se giró. Sin mirar a NamJoon, simplemente entró a la casa, casi que soltando humo por las orejas. NamJoon, preocupado inevitablemente, lo siguió subiendo las escaleras tras él. Lo que no se esperó fue escuchar el sonido de la ducha y al parecer, el chico y la chica con los que anteriormente había follado más que entretenidos jugueteando entre sí en la ducha.

La cara de JiMin se volvió roja, NamJoon esperó que comenzara a gritar, o quizá a golpearlo, pero no llegó, sino que el sonido que invadió sus oídos fue uno que expresaba frustración, y tal vez, tristeza: Un sollozo, acompañado de varios hipidos. 

Trató de decir algo, pero antes de poder articular algo JiMin ya se hallaba corriendo como alma que lleva el diablo, a la habitación, soltando soniditos lamentables conforme avanzaba más. NamJoon se sintió mal.

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Me confundí mucho al escribir este capítulo :'v

Sharon fuera <3

¡El sexo no lo es todo...! ¿O sí? - NamMin - [LIBRO 1 & 2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora