Give me a smile •Vkook•

•04•

Jungkook pasaba las páginas del libro buscando las que el profesor les indicó igual que Taehyung. El castaño lo miraba sentado en uno de los sillones de la acogedora casa del menor. El pelinegro estaba demasiado concentrado para prestar atención a la pequeña tira de su camisa, la cual se resbalaba por el hombro del menor. Jungkook, al llegar a su hogar le pidió a Taehyung que lo esperar ya que el se iba a cambiar para sentirse más cómodo. Al bajar Taehyung quedo con la boca abierta: el pelinegro bajo con una dividí, está le quedaba floja y suelta. Hubo algo que hizo que su miembro palpitara y se sintiera algo apretado en esos bóxers: el pelinegro se dirigió a la cocina para tomar un vaso con refrescante agua, al estar tragando esta, una gota de agua se escapó de la boca del menor deslizándose, comenzó a bajar sensualmente por su cuello y en esos momentos Taehyung quería llevárselo a la cama y comentarlo ahí mismo.

Mierda.

No podía pensar esas cosas, era solo su compañero y nada más. Encontró las dichosas páginas y levanto la mirada observando a Jungkook concentrado tratando de resolver los dichosos ejercicios de sistema de numeración.

-¿Tengo algo en la cara?-preguntó el menor volteando a ver a Taehyung.

El mayor se exaltó, ¿Desde cuando sabía que el lo estaba mirando?

-N-Nada, nada..-abrió unos cuantos libros simulando resolver problemas.

-Bien..-cerró su libro-¿Cuantos ejercicios as resuelto?-suspiro.

Jungkook trataba de estar lo más tranquilo posible, aún que se viera algo calmado en sus adentros estaba más nervioso que tú cuando vez venir a tu crush.

En sus pensamientos estaban tres cosas que lo comían vivo: Su madre, su padre y Taehyung. ¿Como estaría su madre? ¿Su padre estaría acompañándola?
Desde hace dos días que no la vista y ya tenía que hacerlo tarde o temprano. Su madre de deprimiría si lo hacía, y eso hacia que su cancer empeore.
Lo que en estos momentos se preguntaba si podía soportar, era a Taehyung. Cada vez que lo miraba o se recordaba a el, en su mente inundaban los recuerdos del beso que los dos se habían dado hace unos días.

-¿Ejercicios..?-miro su una hoja en su cuaderno con cuadros trazados en ella, está estaba completamente vacía. No había escrito nada.-Tres, si, he hecho tres...

Claro, si tres es nada.

-Bien.-miro al cuaderno de su compañero-¿Puedo ver?-sus manos se dirigieron al cuaderno del castaño y justo cuando un dedo iba a rozar este, Taehyung lo apartó rápidamente del alcance del menor.

-N-No..-trato de esconderlo por su espalda, como si esa fuera la mismísima caja fuerte.

-¿No as hecho nada ,verdad?-dijo el menor sin importancia.

Taehyung quedo en silencio unos momentos mientras en su mente se generaba una guerra de excusas.

-No..-finalmente se rindió.

El pelinegro se rió por el comentario y se levanto camino a la cocina por un refrescante vaso con agua. Hace unos 30 minutos ya había ido, ¿Pero que decir? La lengua del menor necesitaba estar húmeda siempre.

-Miauuu-maulló un pequeño minino un poco raro a decir verdad.

Jungkook se sobresaltó un poco, ¿En su casa había un gato? Ni siquiera el lo sabía. Esperen, el gato de la señora Juana. Era totalmente igual, tenía que ser ese.