Amanda abre la boca pero no sabe que decir, el beso que se dio con Rodolfo fue una total sorpresa, aunque ella queria que pase, eso la hizo confundirse más.
–A vos te gusta Rodolfo.–Sonríe.–Solo que lo queres negar pero conmigo no, Amanda.
–Es que no lo se.–Nerviosa.–Desde que lo vi por primera vez, me movio su presencia.
–¿Te movio?–Larga una carcajada.–Te re gusto Rodolfo y estas así porque no sabes que hacer.
Mira a su amiga y Beatriz supo que decia la verdad.
–Lo sabia, ¿pero que es lo que te detiene? Si te gusta, pueden tener algo.
–A ver, es mi doctor y segundo, no creo que quiera tener algo con su paciente.
Beatriz sonríe y hace una mueca.
–No estoy tan segura.
Las dos escuchan que suena un celular y Amanda saca el celular de su cartera, se fija en la pantalla y es de un número que no tiene agendado, atiende la llamada.
–¿Hola?
–Hola Amanda… soy yo, Rodolfo.
Amanda mira sorprendida a su amiga, quien estaba aguantando las ganas de reirse.
–Hola Rodolfo, ¿como estas?
–Bien, te llamaba para ver si estas libre el sabado.
–¿El sabado?
–Si… te quiero invitar a cenar.
–No lo se.
Beatriz le hace señas para que diga que si pero Amanda estaba llena de dudas, quería decir que si pero no sabia si hacia lo correcto.
–Piensalo y mañana me llamas, ¿si?
–Esta bien Rodolfo, gracias por la invitación. Te llamo mañana.
Corta la llamada y su amiga la quería matar.
–¿Por que no le dijiste que si?
–Lo voy a pensar Beatriz, es que me tomó de sorpresa esta llamada y no se como obtuvo mi celular.
Beatriz no dijo nada, quería que siguiera hablando.
–Olvidate que eres su paciente, te invito a salir. Decile que si, no perdes nada.
–¿Te parece?
–Si, mañana llamalo y decile que aceptas salir con el. Si a vos te gusta, negamelo.
–No, no te puedo negar.
–¿Ves? Tengo razón.
Amanda se ríe y niega.
–Mañana lo voy a llamar y le dire que si.–Sonríe.–Me hara bien salir con el.
–¿Bien? Mirate, estas contenta.
Se ríen y Beatriz la abraza.
Lo que quedaba de la semana paso rápido. Amanda acepto en salir con Rodolfo y el estaba ansioso para que este día llegase. Era de tarde y el reviso en su placard que ropa podria ponerse. Se dio un baño y se cambio, se fijó en la hora y salio del departamento para llegar a horario.
Amanda se puso un vestido negro que se ajustaban a sus curvas, se puso un poco de maquillaje y arreglo su pelo.
Escucha el timbre y baja las escaleras, camina hacia la puerta y la abre. Rodolfo estaba del otro lado, se podía ver el brillo en sus ojos apenas la miró.
–Estas hermosa.
Amanda sonríe y sus mejillas se ponen rojas.
–Gracias.
–Son para ti.
Le entrega el ramo de flores.
–No era necesario.
Lo hace pasar, mientras ella va a la cocina para poner las flores en agua.
–Tu casa es muy linda.
–Gracias.
Salen de la casa y caminan hacia el auto de Rodolfo, le abre la puerta para que entre. Apenas el entra al coche, arranca el motor y acelera.
Entran al restaurante y el mueve la silla para que se siente. Piden algo para comer. Charlaron toda la noche, se dieron cuenta que tienen muchas cosas en común y que no se llevaban tantos años de diferencia, el era un año mayor solamente. Ella sólo tenía 32 años y el 33. Salieron del lugar y ellos querían besarse, lo deseaban. La llevó a la casa y estaban en la puerta.
–Tengo que confesar que me sorprendió tu invitación.
–Lo se pero quería hacerlo. No entiendo.
–Porqué me gustas Amanda.–La mira.–No se si está bien o mal, yo te conocí antes de que seas mi paciente y no pude sacarte de mi cabeza desde que te vi.
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Dulce Obsesión
RomansaLa dueña de una de las mejores marcas de cosmeticas del país, Amanda Torres. Conocera a Rodolfo Guerrero, quien atraviesa una crisis en su matrimonio. Apenas se conocen, trataran de poner resistencia pero la pasión que sienten los llevara a romper t...