La chica de Relleno

Parte VII: Decadencia- Capítulo 21

Parte VII:

Decadencia

Capítulo 21

Jhon...

Jhon estaba recostado en su cama sujetando con sus dos manos su teléfono celular mirando el contacto en él, el cual figuraba con el siguiente nombre "La bella Ali", de fondo sonaba Chaikovski, dio una, dos, tres y cuatro vueltas aún con la vista en la pantalla, y por su mente rondaba varias opciones y recuerdos de hace unos días, entre las opciones era llamarla, escribirle, mandarle un audio o posponerlo otro día más.

Y sí, escogió posponerlo otro día más, puso su teléfono celular en su escritorio y abrió su ordenador para terminar aquella novela romántica, sin darse cuenta que su pequeña hermana estaba en la habitación y había tomado su teléfono celular.

Llamando...

Ring... Ring...

Ese sonido había llamado su atención, volteó a ver a su hermana mirando la pantalla de su teléfono celular.

― ¡Hola, Ali! ― Había gritado, el corazón empezó a revolotear rápidamente cuando oyó su voz, aquella que había intentado escuchar e ignorar a la vez.

― Hola, linda...¿cómo estás? ― Jhon había girado la cabeza unos centímetros para dirigir su vista al teléfono, ¡era una videollamada!, su pequeña hermana había realizado una videollamada y esa no estaba en las opciones.

― Estoy bien, ¿cuándo vendrás a casa? ― preguntaba con inocencia.

Ella echó una risita ― Pronto...

― Tienes que venir ya, una chica quiere robarte a mi hermano.

― Ehhh... ― echó una nueva risita. ― ¿está tu hermano por ahí?

― Aquí al lado...

Quiso cavar un hoyo en ese mismo instante.

― ¿Saldrás?

― Sí, hoy es un día importante, un hombre malo obtendrá su merecido

E inmediatamente le arrebata a su hermana el teléfono de sus pequeñas manos ― Es el juicio...

― Hola, Jhon...

― Perdón, hola, ¿irás al juicio contra el profesor? ¿está bien que vayas sola? Puedo...

― Cálmate... ― interrumpió― no iré sola, mi familia me acompañará, solamente debo dar mi declaración una vez más frente al juez.

Tonto.

Simplemente le deseó suerte, y le indicó que cualquier cosa que pasara podía llamarle o escribirle. Ella asintió.

Después de una pequeña charla entre que uno estaría atento y que una le enviaría un informe se despidieron.

Tonto...

Jhon deseaba que ella dijera algo sobre lo ocurrido, o que le dijera que después de todo ella estaba enamorada de él y le de una oportunidad, después de todo muchas veces lo que uno piensa o desea que ocurra jamás pasa.

...

Se odiaba a sí mismo, estaba levantando las esperanzas en quién no debía. Y debía acabar con tal tortura en ese mismo instante.

― Y le dije que dejara de ponerle mayonesa, sino empeoraría su problema de acné y ella me dijo ― empezó a reír mientras soltaba palabra por palabra ― Eso es problema de los granos, no míos... ja, ja, ja, ja.