Los días pasaron rápido y ya solo faltaba una semana para que Taehyung vaya hacer su viaje para el acuerdo con la empresa australiana.
Jimin estaba triste, pero a la vez feliz. Él nunca haría algo tan cruel como limitar las oportunidades laborales de su esposo, no quería ser esa clase de persona.
Echaría de menos a su TaeTae e incluso pensó en la posibilidad de ir con él, pero el problema estaba en que faltaba muy poco para la impresión y publicación de las revistas, así que era muy importante que esté ahí junto a su equipo de trabajo y sobretodo porque un nuevo integrante se había unido a él.
—Jimin-shi, ¿te parece si edito esta imagen? La calidad no es tan buena.
—Oh, no me había percatado de eso... Tienes buena vista, Jungkook.— dijo sonriéndole.— Estoy de acuerdo... Creo que también deberías cambiarle un poco el filtro.
—De acuerdo.— dijo Jungkook concentrado clickeando en la pantalla mientras que con su pulgar hacía círculos en su ceño fruncido.
Jimin se había dado cuenta de muchos hábitos del chico azabache, como por ejemplo, cuando se concentraba hacía ese trazo circular con su pulgar en el ceño, cuando estaba molesto de algo que no le salía bien mordía muy fuerte su labio o cuando comía hacía sonidos raros con su boca. En cierto modo Jungkook se ganó su confianza o es que él era alguien que se encariñaba rápido con las personas y ponía toda su confianza en ellos, resulta que eso no fue algo positivo porque a muchas personas que creía buenas salieron lastimándolo.
Definitivamente Jungkook era un chico tranquilo y tierno, nada malo se veía en él y eso provocaba una calidez en el corazón de Jimin.
Cuando lo vio en la cafetería tuvo una mala impresión de él y le pareció alguien extraño, incluso aún recuerda la sensación de escalofríos, sobretodo su conversación con Yoongi con eso de "estar limpio", aunque él sea muy curioso, no se atrevería a hacer comentarios sobre ello con Jungkook, es su vida así que no andaría de chismoso, pero este tiempo conviviendo con él hizo que la imagen que tenía de él cambie.
Como dicen: "Nunca juzgues al libro por su portada."
En cuanto a Jungkook, él veía a Jimin como esa clase de chico inocente y fácil de engaña. Eso le facilitaba muchas cosas... Aunque no es un peligro por ahora, pues por lo que le ha contado Jimin, ellos solo son vecinos ya que viven en el mismo condominio y además está casado con el mejor amigo de Yoongi, muchos puntos a su favor, pero aún así tenía ese presentimiento de que Jimin era un "peligro" para su futura reconciliación con su amado... Mientras el pequeño no muestre signos de interés hacia su "bebé" no habrá de qué preocuparse, ¿verdad?. Y si las cosas no se ponían a su favor, pues qué mal... Al fin al cabo, él siempre obtiene lo que quiere.
—Listo, he terminado.— dijo el azabache.
Jimin se para de su silla y va hacia el escritorio de Jungkook a ver su trabajo final.
—Te ha quedado increíble, ¿dónde aprendiste a hacer eso?
—Pues, cuando era joven llevaba talleres de fotografía y diseño gráfico, así que se me hace mi fácil "photoshopear" una imagen.
—Ohh... ¿No fuiste a la universidad?.— "Extraño" pensó Jimin.
—Nah... los estudios no son lo mío, además para esto no necesitas un título, solo creatividad e imaginación y... talleres, claro.
—Jajaja... bueno por lo que veo, sí, tienes razón.
—La tengo.— dijo el azabache dándole un guiño.
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One shot, Two shots [YOONMIN]
FanfictionUn trago, dos tragos; la noche está empezando y él se está acercando... Yoongi un soltero que disfruta de los placeres de la vida y su mayor placer por supuesto, el sexo, se verá envuelto en líos amorosos, un matrimonio y un chiquillo que por nombre...