Twenty-eighth Shot

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—¡Ahh! —un golpe seco se escuchó entre las paredes de la fría habitación. Él se quedó helado por lo que había echo. —Oh, no...

El sonido del objeto retumba estrepitosamente al ser soltado, se tapa la boca asustando y corre para sostener su rostro.

"Lo maté..." pensó.

—No... no... —estaba desesperado sin saber qué hacer toco la zona afectada y sintió náuseas al ver cómo se mezclaba el líquido viscoso entre sus dedos y la sangre seca. —Tae... amor... despierta —susurró con voz entrecortada.

El cuerpo no hizo ningún movimiento, mientras la sangre aún chorreaba de alguna parte de su cabeza. ¿Tan fuerte le había dado? Los cabellos cenizos del chico se iban convirtiendo poco a poco en el rojo intenso de las rosas. Tocó su rostro con las manos ensangrentadas y se acercó. Lo besó, sus labios fríos y resecos temblando mientras las lágrimas no cedían en su intento de retenerlas. Sollozó quedo.

—Amor... vas a estar bien... —susurró bajito —perdóname... Por todo.

Tal vez lo mejor era nunca haber conocido a Yoongi, nunca debió acostarse con él unos días antes de su boda y después de ella. Y no hubiera aceptado ese café... Hubiera evitado todo esto. Hubiera vivido encerrado en su burbuja con Taehyung y sentirse a salvo. Pero esto era su realidad y nada podía cambiarse, porque a pesar de que amaba a Taehyung, su amor por Yoongi podía más y lo que más le dolía era estar en lo cierto en que él estaba detrás de todo esto. Pero... ¿qué conseguía? Sobretodo, ¿qué conseguía Jungkook de esto?

Jimin desesperado lo arrastró a una esquina, el piso seguía una línea de rojo intenso tras ellos. Al llegar lo acomodó entre sus brazos y se aferró a él, sentía sus manos frías y sus labios se veían resecos. Los besó, raspaban como lija, pero no le importó.

—Eres un idiota, querido... —alzó la vista de donde provenía el sonido de la voz. Era Jungkook y entre sus brazos cargaba a...

—Yoongi... —si estaba confundido hace unos segundos, ahora su cabeza sentía que iba a explotar— ¿Qué...? ¿Por-por qué Yoongi...?

—Es precioso cuando duerme, ¿verdad? —lo miro con una sonrisa que le heló mucho más los huesos.

—No... ¿Qué le hiciste? —su garganta estaba seca. Necesitaba agua.

—Nada que te importe... Más bien, necesito que te largues y te lo lleves a él —dijo señalando con su cabeza al de cabellos cenizos.

—¿Qué? —aún seguía perdido.

—¡¿Acaso eres sordo?! ¡Lárgate! —soltó furioso— solo te necesitaba como anzuelo para tener de vuelta lo que me pertenece... Agradece que no te maté. Debería hacerlo, pero no me queda tiempo.

—A... No entiendo... ¡¿Te lo llevarás?!

"Eso quiere decir que Yoongi no tiene nada que ver en esto... ¡Tengo que salvarlo!"

—Vaya hasta que por fin tienes las agallas para gritarme.

—Vete a la mierda. ¡¿No te bastó con violarme?! ¡Ahora le quieres hacer lo mismo que a mí!

—A él le encanta... Él y yo lo hacíamos antes

"Es por esto... Él sufrió tanto..."

One shot, Two shots [YOONMIN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora