CAP. #25

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Gabriela

El disparo en su costado me preocupaba, lo desinfecté y curé bien, miré su cuerpo cansado en el piso del lugar, no podía dejarlo ahí o meterlo de nuevo a la celda, llamé a Dwight

–Lo llevaremos a la habitación –él negó–, no me importa lo que digas, él va a estar conmigo, no estaré sola aquí.

–A Negan no le agradaría.

–Él no está aquí así que la habitación es mía ahora –llevamos a Dominic a la habitación caminando muy despacio–. Tranquilo Dom te prometo que saldremos de aquí.

Después de dejarnos en la habitación Dwight se fue, un tiempo después de estar en la habitación la luz y la ventilación se fueron, para no regresar. Amarré a Dom al sofá de Negan, aún no sabía si despertaría vivo o muerto y era mejor prevenir así no tendría que lamentarlo.

(...)

Me desperté temprano y me acerqué al sofá, por suerte aún respiraba, comencé a buscar mis armas en la habitación y lo único que encontré fue ropa–Al parecer estoy muerto –levanto una de mis cejas al escucharlo–, eres tan hermosa como un ángel. ¿Lo sabes?

–¿Cómo te sientes galán? –dije molestándolo

–¿Cómo está él? –sabía que se refería a Dwight

–Pues algo lastimado y me pidió que te llevara con los obreros. No quiero que ataques a nadie allí, ¿bien? Debes pasar desapercibido.

–Lo entiendo, pero, ¿qué pasa con el tipo?

–Su nombre es Negan. Y el aún está afuera.

–¿Aún? ¿Afuera? ¿A qué te refieres? –es cierto, él no lo sabía porque había estado "preso", él se perdió el ataque y la pelea e incluso la explosión y los caminantes

–Oye no sé si lo sabes, pero estoy amarrado –hace cara de sorpresa e indignación, yo sonrío–. ¿A caso te aprovechaste de mí –finge tristeza y cambia de expresión a una más "seductora"–? No me molesta, puedes hacerlo de nuevo –lo golpeo–. ¿Encontraste alguna mordida?

–¿Por qué lo preguntas?

–Pues... Por favor dime que no soy el único que escucha los gruñidos.

–No, sí son caminantes y por montón.

Le expliqué todo cuando íbamos de camino a la zona de obreros, a medio camino nos topamos con D y él me dijo que lo llevara rápido ya que había otra junta, y así lo hice; le dije que siguiera con una vida de obrero normal y lo presente con Amalia, diciéndole que era nuevo y que si lo podía cuidar por mí a lo que ella aceptó.

Comenzó la reunión, y Gavin, comenzó a decir que todo esto era planeado, que los puestos fueran atacados con los líderes fuera de su lugar, por estar en la reunión no era casualidad y una vez más las miradas en mí.

–¿Qué sabes tú? –me habló Regina

Odiaba estas peleas, una chica entra corriendo–Están en las escaleras. –me levanté algo preocupada

–¿Los caminantes? –dijo Eugene

–No, peor. Los obreros. Dicen que tendremos que dispararles.

Le di la vuelta a la mesa corriendo y salí de la habitación, todos estaban llegando vi a Dom con cara de preocupación. Simon y Dwight salieron tras de mi con todos los demás. D y yo intentábamos conversar con la multitud para que volvieran a sus lugares, pero Simon abrió la boca y todo se volvió complicado, y un hombre habló.

Sin SecretosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora