Capítulo 3.

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Siento un golpe bajó, mierda... que dolor, cuando abro los ojos, el corazón se me detuvo al momento que Sam agarra mi móvil, lo tira al piso y se desbarata. No, no, no esto no me puede estar pasándome. Me paro de mi cama y le voy encima a darle golpe a mi hermana, ella trata de zafarse de mí, pero la agarró del cabello, le doy un puñetazo en el ojo.

El enojo y la ira me está dominando. —Maldita, ¿por qué me has roto mi móvil? ¿Cuál es tu maldito problema conmigo Sam? —. Me mira con mucho odio, trata de golpearme, pero fui más rápida que ella y le agarré el brazo.

—QUIERES SABER, ¿CUÁL ES EL MALDITO PROBLEMA? — Me dio un golpe en el seno que caí en el piso, como me dolía eso, cuando la miré el ojo comenzaba a ponerse verde.

Comenzó hablar  —Tu maldita existencia es lo peor que le puede pasar a cualquiera, infeliz, ya entiendo porque tú padre no te quiere...— no la deje terminar, me levante y la tire al piso, le jale el pelo duro mientras ella chillaba, no me importaba, había tocado una parte muy sensible de mí y lo iba a pagar.

Escuche a alguien hablando a lo lejos pero no hice caso y seguí jalándola del cabello tan duro, dudo que quede con pelo pero igual no me importa.

De repente todo se paró y sentí como me ardía la mejilla, le solté el pelo de Sam y llevé mi mano al área afecta, me estaba sangrando. Mi madre me acaba de dar una cachetada, no era la primera vez, pero nunca me había dado que sangrará.

Mire a Sam está sonriendo, tenía una sonrisa de victoriosa  y mi madre me miraba con rencor. Salí corriendo de ahí no me importo que estuviera lloviendo solo salí de ahí.





***





No me había dado cuenta de que estoy lejos hasta cuando vi un café que si mal no recuerdo estaba por los lados de santa Ana, unos seis kilómetros de mi casa. ¿De verdad camine esa distancia? Ni yo me lo creo.

Ya tenía una hora y media caminando, ni siquiera se para donde, solo porque no quiero llegar a mi casa. Total, nadie de ahí le importo, si me pasara algo, ellos estaría alegre. Me gustaría poder vivir sola, sin ninguna de mi familia cerca... Odio mi vida. No entiendo por qué mi mama me trata así, yo no tengo la culpa de ser gorda, la mayoría de las veces como por ansiedad y eso no lo entiende y ya no sé cómo explicárselo, cree que es mentira, que todo lo hago para que todos se rían de ella y se burlen. ¡Cómo creen que eso, si la que más sufre soy yo!

Miro al cielo, el cual está gris, lo que significa que pronto lloverá. 





****




Tuve que volver a mí "casa" caminando, no tenía dinero ni menos me iban a subir mojada. Al momento que doblo la esquina veo el carro del papá de Sam, seguro vino a darle su semanal. Él si la quiere no como el mío que se fue desde que se dio cuenta de que venía en camino, por eso que mi madre me odia. Pero la entiendo, sólo soy un gran estorbo.

Obeses.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora