Doki Doki Psychic Club。

❛IV❜

Como sé que no les interesa mi vida escolar, mi rendimiento, ni nada de esas mamadas, iré directamente al momento en el que llegué a la sala del club.

Ya todas estaban ahí, conversando, normal. Monika me notó llegar.

—¡MC, buenas tardes!-Me saludó enérgicamente.-¿Trajiste tu poema?

—Así es.-afirmé.-Está... Bueno, no muy bien hecho, pero está.

—Bien, entonces todos los trajeron, me alegra.-se veía aliviada.

Dejé mi mochila encima de una mesa, y Sayori se me acercó.

—Na mames, ¿enserio lo hiciste?-Pinshe descarada, tiene una mala percepción de mi.

—Si, si, lo hice.-me crucé de brazos.-¿Y tú?

—Pues obvio, duh.-Sayori se alejó, evidentemente, ofendida. Maldita ironía.

Luego de eso, fue Yuri la que se me acercó.

—Ansío ver tu escritura, MC.-me dijo, emanando serenidad.-Por cierto, no te lo he preguntado. ¿Cuáles son tus géneros de lectura favoritos?

Raioz. ¿Se supone que le iba a decir que me uní solo por la pendeja de Sayori?

—...¿Manga?-dije, dudoso. Noté cómo sonreía decepcionadamente. Creo que mis palabras llamaron la atención de Natsuki, pero no dijo nada.

—Oh, veo que no lees mucho...

—No, bueno... ¿Y tú, Yuri?

—Personalmente me gusta la lectura de terror, fantasía, ya sabes. Ese tipo de textos que te alejan completamente de la realidad para sumergirte en mundos que...

—¡Es hora de compartir nuestros poemas!-Monika interrumpió. Yuri se quedó muda, y luego fue a sacar su poema.

Decidí que primero mostraría mi texto a Sayori, a quién más confianza le tenía.

Le mostré mi obra maestra de quién Cervantes envidia. Sayori se rió.

—¿Qué diablos es esto?

—¡Arte, eso es lo que es!

—No, no, no es eso.-trató de calmarme.-Simplemente no conocía esta faceta tuya, Martino. De verdad me gustó.-parecía sincera.

No mentiré, no sabía muy bien de qué escribir, así que pensé en la idiota de Sayori. Sin embargo, me alegra verla tan feliz.

—Muy bien, es mi turno.-me pasó una hoja de papel, que contenía su escritura.

“Querida Luz del Sol”

La manera en la que entras por mis persianas en la mañana
Me hace sentir como si me extrañaras
Besando mi frente para ayudar a levantarme.

¿Me estás pidiendo salir a jugar?
¿Me prometes un día de lluvia alejar?
Miro por encima. El cielo es azul.
Es un secreto, pero te creo también.

Si no fuera por ti, podría dormir por siempre.
Pero no estoy loca.

Quiero desayunar.

—...Sayori...

—¿Si~?-Dijo con una emocionada sonrisa.

—Lo escribiste en la mañana, ¿no?

—¡Oye!-Su sonrisa se borró.-Bueno, sí, es solo que se me había olvidado...