—No estaría entendiendo. —Reí histérica. —Explicame.
—No recuerdo mucho, solo qué..., desperté a su lado, Line. —Cerré los ojos y por un momento creí que no me acaba de mover un solo pelo la confesión de Heather. Que Steven era alguien a quien habia superado hace mucho tiempo pero los recuerdos atrevesaron mi mente y me permití apreciarlos.
Besos, caricias, abrazos, decepción, traición, dolor y otras senstimientos qué eran indescriptibles.
—No sé qué decirte... Es decir..., ¿hace cuanto fue, Heath? —Inquirí tratando de parecer calmada.
—No lo sé con exactitud, cuatro o cinco, seis años.
—¿Cuatro o seis años?
—No lo sé, ¡mierda! No lo sé ¿si?
—Bien, así será entonces. Cuando lo sepas, me avisas y hablamos.
Entré y cerré con fuerza la puerta de la que era mi habitación.
Me encontraba de mal humor, idiota y con muchísimas ganas de comer una tableta de chocolate amargo.
Me acerqué a la mesita de luz y tomé una barra de chocolate que ya habia abieryo la noche anterior.
Me llevé un bocado a la boca y cai de espaldas en la cama.
Lo saboree y probé con muchísimas ganas y con una sensación de impotencia.
Me sentía impotente. Y, mierda, yo no debia de estar así, Steven debería ser un caso cerrado en mi vida pero... ¡Agh!
Disfruté el resto de dos barras más qué tenia guardadas en los cajones, y me acomodé mejor en la cama.
Ya saben, me saqué los zapatos, el peinado, el saco de lana para terminar por casarme algunos accesorios que tenia puestos, vi mi anillo de boda.
Lo extrañaba con necesidad, con amor y muchos sentimientos que no podía describir siquiera en varias vidas.
Joshua era el amor de vida, de eso no me cabía duda alguna pero entonces... ¿Por qué mierda seguía pensando y recordando los momentos vividos con Steven?
Tomé mi celular y entré a la bandeja de mensajes, tenía unos treinta o más por parte de Joshua.
Josh:
Line, por favor, debemos hablar. ¿Dónde estás, cariño?
Josh:
Line, contesta. Por favor, cielo.
Y otros veinte iguales, preguntándme en dónde y si estaba bien. Pero los últimos mensajes fueron fuego para mi estúpido corazón.
Josh:
Line, me he enterado de que te has marchado ¡joder, vuelve! Te necesito, vida mía. Los necesito a mi lado.
Josh:
Line, sé que jamás me perdonarás y es algo qué algún día tendré que entenderlo pero no me alejes del bebé, no lo hagas.
Él tenía razón, jamás iba a lograr perdonarlo. Lo qué me había hecho habia traspasado todo, incluso el amor que seguia estando prensente en mí.
Marqué su número y esperé a que me atendiera.
Al sexto tono, lo cogió.
—¿Line, eres tú? ¿Están bien? ¿Te ha ocurrido algo? —Por el tono de su voz notaba desesperación, angustia.
Exhale y hablé:
—Estamos bien, llamo para decirte qué... —Cerré los ojos deseando no haberlo llamado y continué. —estaré en new jersey hasta los siete meses, luego iré a Grecia.
—¿Qué? Pero ¡Line! Es una decisión qué...
—Es una decisión tomada, Joshua. Los papeles de divorcio estarán en tu oficina la semana entrante, adiós.
—Espera Lin... —y corté.
El corazón latia a un ritmo apresurado.
Acaricie mi barriga hasta lograr calmarme.
—Estaremos bien bebé, pero sin más sorpresas.
____________
Derechos reservados.
ESTÁS LEYENDO
Caroline #2
Romance¡Segunda parte de Steven! Las segundas oportunidades tampoco se dan para volver amar.