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Martes 1 de Mayo

Aun no sé cómo decirle a Holden que el maldito lunático de Roman ha roto todo su dinero frente a mis ojos.

Maldita sea, ¿cómo voy a devolverle todo ese dinero? Quiero morirme, siempre acaba metiéndome en más problemas de los que ya tengo.

No hay forma humana posible en alejarme de él. ¿Cómo hacerlo si no le importa que salde la deuda? El seguirá persiguiéndome, hasta que encuentre un juguete mejor que yo.

Y me importa teniendo en cuenta que el solo me ve como su muñeca para follar. No quiere retenerme a su lado por amor.

Amor, que estupidez, él no sabe el significado de tal palabra.

Suspiro mirando a mis compañeras como realizan algunos saltos ensayando para animar el siguiente partido.

Al demonio, de alguna manera lo arreglaré.

Me uno a las demás comenzando desde el principio el baile. He faltado bastante y necesito ponerme al día para estar a la altura. Claire junto a otra de nuestras compañeras intentan subir mi cuerpo pero fallan en el intento. ¿Qué mierda? Debo hacer la voltereta en el aire pero siquiera pueden con mi peso.

-Mierda Mabel, ¿has engordado? -se queja mi amiga.

-No, estoy igual que siempre. -digo encogiéndome de hombros.

-No lo parece, casi nos rompes las muñecas.

-Exagerada. -ruedo mis ojos caminando lejos de ellas hacia los vestuarios.

Igual si haya cogido algo de peso, pero debido a los nervios no puedo parar de comer.

Lo que me faltaba, haber engordado y no poder realizar los saltos. Claire me sigue tomando mi brazo haciéndome girar hacia ella. Hace tiempo que ella y yo no hemos tenido una charla y al parecer la necesita.

-¿Qué hay entre Holden y tú?

Espera, ¿¡Qué!?

-No hay nada, somos amigos, él me ha ayudado. ¿A qué viene esa pregunta? Que se supone que... oh por dios, ¿te sigue gustando Holden? Roman me lo contó, mentirosa.

-Lo siento por eso y no, a mí me gusta Aaron. -dice no muy convencida apartando su mirada de la mía.

-Somos amigas Claire Graves, así que deja de mentirme. ¿Qué está pasando?

-Sabes que Aaron y yo estábamos teniendo algo. -dice a lo que asiento. -Pues, estábamos saliendo a espaldas de mi hermano pero...

-¿Pero?

-Joder. -gruñe pasando las manos por su pelo. -He engañado a Aaron con Holden. No puedo evitarlo, no puedo dejar de pensar en el, de correr a sus brazos como una estúpida cuando me lo pide. Sigo enamorada de él.

"Ya conozco yo a otra tonta que hace lo mismo."

No sé qué es peor, aunque de las dos maneras Roman va a matarla. Has elegido a los dos peores hombres del mundo para enredarte Claire.

-No me gusta que estés engañando a Aaron, lo sabes.

-Lo sé, voy a decirle que lo nuestro no funciona algo me inventaré pero, ese no es mi mayor problema.

-¿Ah que hay más? Ya sé, tu mayor problema es Roman.

-No, es peor.

-¿Peor que Roman? No me lo creo. -digo riendo.

-Mabel, esto es serio. Tengo una falta.

-¿Una falta? Ya sabía de antes que te faltaba el cerebro amiga.

-Maldita idiota, tomate esto en serio. No me llega mi menstruación.

-¿Qué estás diciendo Claire?

Sin responder su mano tira de la mía llevándome con ella a su casillero dentro del vestuario de dónde saca su bolso. Toma de este dos test de embarazo para dirigirse al baño mientras yo la sigo.

Tiene que ser una broma, no puede ser tan estúpida y haberse quedado embarazada.

-Aaron lo sabe, le dije que me haría el test hoy. Pero si estoy embarazada se lo ocultaré porque es de Holden, Aaron y yo tomamos precauciones pero él dice que igual fue un descuido. Así que como se entere que le estoy dejando por Holden se lo dirá a mi hermano.

-¿Entonces qué pretendes Claire?

-Mostrarle un test falso si el mío sale positivo.

-¿De verdad me vas a meter en toda esta mierda? Más problemas con tu hermano, como si no tuviese suficientes.

-Por favor Mabel, no puedo pedírselo a nadie más.

-¿Por el hecho de que yo no puedo tener hijos?

-No, porque eres mi amiga y la única persona en la que confío.

Se que Claire no quiere hacerme daño con ese tema, ella solo necesita mi ayuda.

Hace años me diagnosticaron obstrucción tubarica. Todo empezó con los dolores, la fiebre, el cansancio, hasta que empeoró. Fue entonces que al acudir a un médico después de varias pruebas averiguamos de que se trataba aquellos dolores bajo el abdomen. Yo no podré tener hijos.

Pero bueno, poco a poco fui superando aquella noticia y me esforcé en seguir el tratamiento adecuadamente. Pero si este no funcionó, siempre tendré la posibilidad de formar una familia por otros medios, es lo que quiero. "Mi cuento de hadas"

-Está bien Claire, te ayudaré.

Tomo el test suspirando adentrándome en uno de los cubículos mientras ella lo hace en el siguiente.

-Espero que no estés embarazada y esto haya sido una falsa alarma porque te dejaré sin pelos Claire.

-No me importaría.

-¿¡Como que no te importaría!? -grito incrédula. -Estas completamente loca. Un bebé conlleva muchísimas responsabilidades. Eres muy joven, tienes mucha vida por delante y qué decir del padre que vaya buen ejemplo le dará al pobre niño. -nótese el sarcasmo.

Al acabar abandono el cubículo esperando a que Claire salga. Segundos después abre la puerta dejando el test junto al mío sobre el lavabo mientras ambas nos miramos.

-Esto es una locura. -digo suspirando mientras ella se encoge de hombros. -Reza amiga porque Roman va a matarte.

-Me fugaré con Holden.

-No Claire, en serio, deja de vivir en las nubes. Esto no es para tomárselo a broma. No sabes lo que dirá Holden, pero si sabes cómo actuará tu hermano así que nada sirve, estaréis los dos bajo tierra.

-Que dramática eres, no es para tanto. Si, Roman tardará en aceptarlo pero lo hará.

-Parece que aún no lo conoces. Pero no te culpo que quieras escapar de él.

Claire abraza mi cuerpo haciendo que mis brazos la rodeen con fuerza escuchándola reír. Aunque la apoye siempre, ese no es el futuro que quiero para ella.

-¿Estas lista? -pregunto mientras ella asiente y toma el test.

Respira hondo antes de que ambas dirijamos al mirada a este. Puedo sentir mi corazón bombear con fuerza cuando observe solo una línea marcada sobre este. ¡Gracias a dios!

Ella no está embarazada. Casi chillo de la alegría al abrazarla de nuevo. Claire vuelve a reír.

-Mabel. -habla cuando su risa se detiene separándose.

Sus ojos están bien abiertos mirándome con horror cuando su cabeza se gira hacia el lavabo. Frunzo el ceño siguiendo su mirada. ¿Qué le pasa? Debe alegrarse.

Siento como todo mi cuerpo tiembla al ver mi test. No, tiene que estar defectuoso.

Las dos rayas marcadas en rosa hacen que mi cabeza de vueltas mientras Claire llama una y otra vez mi nombre sin recibir respuesta.

Yo no puedo estar embarazada.

¡No!

Russian Roulette © +18 | Libro #1| Bill SkarsgårdDonde viven las historias. Descúbrelo ahora