Caminando Entre Muertos

Capítulo 9: Maldad.

Me levante más tarde de lo normal, salí de la habitación y llame a Aurixana que siempre era la que se despertaba temprano, sin embargo no recibí respuesta, me pareció extraño así que baje las escaleras y pude ver que no había nadie en la casa, volví a subir y revise cada una de las habitaciones, pero no pude hallar a nadie. Salí de la casa y no pude creer lo que mis ojos estaban viendo, era Aurixana siendo devorada por un caminante que al parecer era Nancy, rápidamente tome mi arma y le dispare en la cabeza al caminante, fui corriendo donde estaba Aurixana y me puse de rodillas llorando, Aurixana había muerto, de repente siento un mordisco en mi cuello, gritando por el dolor y por el miedo tomo mi arma y disparo a la cabeza del caminante que me estaba mordiendo, después de calmarme vi que el caminante que había matado era James, y escucho unos pasos detrás de mí al voltear me veo que era Aurixana que estaba despertando como un caminante, le apunto con mi arma, sin embargo no pude disparar ella se me acercaba cada vez más hasta que llego hasta mí y me mordió, caí de espaldas gritando mientras me devoraba y empezaron a llegar más caminantes, eran todos mis amigos y estos empiezan a devorar me. Todo se vuelve negro y de repente me despierto sudando, y muy asustado, en ese momento entra Aurixana para que bajara a desayunar, todo había sido una pesadilla.

—¿Qué te pasa? —pregunta Aurixana al verme agitado.

—Tuve una pesadilla. —le respondo.

Ella entra a la habitación y se sienta a mi lado.

—Muy bien, cuenta me. —dice Aurixana con intriga.

—¿Qué te cuente que? —pregunto algo confundido?

—El sueño. —dice ella.

Le empiezo a relatar el sueño que tuve y ella solo asentía con la cabeza, hasta que me dijo mientras me abrazaba que todo estaba bien, que me calmara, que todo había sido un sueño. Aunque sabía que todo había sido un sueño, la sensación de miedo y de desesperación no se habían ido. Bajamos juntos al comedor donde todos estaban desayunando, me senté y empecé a desayunar, hablamos durante un rato, y después salimos de la casa a hacer algunas cosas para mantener el refugio a salvo, como fortificar los muros que rodeaban el refugio, montar puestos de vigilancia, y otras cosas, durante el día todo transcurrió normal hasta que un grupo de personas bastante amplio de alrededor de 20 personas y muy bien armado empezó a gritar que le abriéramos el portón, y si no lo hacíamos empezarían a disparar contra nosotros, no tuvimos otra opción más que obedecer y abrir el portón, ya que eran más personas que nosotros y mucho mejor equipadas, al abrirlo todas las personas empezaron a entrar al refugio, mientras que nosotros no podíamos hacer nada más que observar, nos empezaron a apuntar y nos dijeron que nos pusiéramos de rodillas, obedecemos y vimos que al parecer el líder del grupo se acerco a nosotros.

—¿Quienes son ustedes? —pregunta un adulto de aproximadamente 34 años de edad, con cabello corto color negro, alto y con un tono de piel blanco.

No le respondimos y este volvió a hacer la misma pregunta, sólo que esta vez uno de los chicos acercó un arma a la cabeza de Marco. Le digo el nombre de cada uno de nuestro grupo.

—Muy bien es un placer, yo soy Mario. —dice el líder del grupo.

Al acabar de decir su nombre escuchamos un disparo cerca de nosotros, al voltear para ver que había pasado nos dimos cuenta de que era Marco que se encontraba tirado en el piso con un orificio de bala en su ojo. Todos quedamos en Shock viendo el cuerpo de Marco en el piso.

—¿¡Por qué lo mataron!? —pregunta Kevin muy molesto.

—¡Calla te! —dice el chico que había matado a Marco.

—Lo matamos porque se nos dio lo gana, así que calla te o tu seras el siguiente. —dice Mario riéndose a carcajadas.

Kevin se quedo callado, pude notar que estaba llorando en silencio.