El ambiente en la universidad se sentía algo pesado, podía percibir que a todos les afectaba la muerte de un compañero de clases.
Inclusive, habían colocado en el mostrador de reconocimientos académicos una foto de June con velas y varias flores alrededor.
Ezra, Lucinda y yo no dudamos en acercarnos a ver.
-Aunque ella no vea esto, me parece algo sorprendente que la universidad se haya tomado la molestia de homenajearla. -Expresó mi hermano observando las flores y las velas.
Me atreví a tomar la fotografía de June, y era una en donde había ganado el premio por mejor monólogo dedicado a la profesión de Bioanálisis; aunque June fue algo holgazana en algunas materias siempre trataba de dar lo mejor, por lo que no dudó en participar en la feria de ciencias con aquel monólogo sobre la historia y el desarrollo de la Bioanálisis.
Y había ganado.
-Halia... -Lucinda llamó mi atención al tocarme el hombro.
La miré sin entender y seguido señaló a un lugar en particular, y mis ojos se abrieron más de la cuenta al ver que eran nuestros compañeros de clase sujetando unas flores.
Pero no flores cualquiera, eran las que más amaba June en el mundo.
-En verdad nos duele su pérdida... pero sabemos que a ustedes les afectó más ya que era su amiga más cercana. -Dijo una de las chicas del grupo.
Los tres nos miramos entre sí, aún sorprendidos.
Pero lo más inesperado fue... que todo el grupo comenzara a cantar el himno de los ángeles a Dios en el Cielo.
Aleluya.
Y no tardé en llorar, porque imaginaba a June adorando a Dios haciendo que mi rostro formara una sonrisa.
Y los tres cantamos junto a nuestro grupo de clases, aquel himno celestial con todo el corazón sintiendo paz y regocijo a pesar de las circunstancias.
Lo que llegué a ver, fue a un molesto Lander desaparecer por el amplio pasillo de la universidad con una expresión de odio en su rostro.
Más yo seguí adorando a Dios con mis amigos, porque no sentía temor de lo que pudiera hacerme el enemigo.
Sentía paz en medio de la tormenta.
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11:30am.
Las clases terminaron temprano ése día, debido al luto de la universidad por la muerte de June por lo que los profesores no se extendieron demasiado en sus clases.
Ezra ya tenía el auto devuelta, ya que mamá lo estaba usando esas semanas porque el transporte de su trabajo no estaba funcionando, pero ya al ser reparado mi hermano podía manejar otra vez.
-¡Olvidé mi suéter! -Exclamé de golpe caminando hacia el auto.
Ezra y Lucinda se habían adelantado, por lo que me apresuré en regresar al aula de mi última clase y recuperarlo.
-Aquí está. -Sonreí al ver el abrigo verde aceituna colgado en el espaldar de la silla donde lo dejé.
Lo tomé entre mis manos, pero no esperé caerme de espaldas al suelo de forma abrupta. Alguien me había jalado por detrás ocasionando mi caída.
Jadeé sorprendida y adolorida mirando el techo del aula, luego de unos segundos Lander se encontraba agachado a un lado mío.
Sonriendo burlonamente.
-Vaya, bien jugado, ganarte la lástima de los de tu salón por la muerte de tu patética amiga. -Escupió venenosamente, sin importarle para nada sus frías y crueles palabras.
-Lander... déjame ir... -Pedí intentando levantarme del suelo.
Pero su pie pisó mi hombro, evitando siquiera que pudiera hacer algún ademán de levantamiento.
-¿Ahora huyes de tus problemas? Impresionante, Halia Calloway está huyendo. -Rió cínicamente negando con la cabeza.- escucha bien, niña estúpida.
Lo miré haciendo una mueca de temor por todo lo que estaba pasando en esos instantes.
Él continuó, con su rostro bañado en seriedad.- Aunque June esté muerta, eso no me impedirá en seguir yendo tras ustedes hasta debilitarlos y hacer que nieguen a ése Dios invisible al que supuestamente sirven.
Mordí mi labio intentando zafarme de él, sin importarme sus palabras aún si el temor me recorría por todo mi cuerpo.
-Jé, sigan en su luto, después de todo lo que viene... seguirá siendo lúgubre para ustedes.
Y con ello alejó al fin su pie de mi hombro, dejándome libre. Me miró por última vez y salió del aula con tranquilidad, como si nada hubiese ocurrido.
-Ugh... -Me quejé al colocar la mano en mi hombro derecho, definitivamente no era bueno en tratar chicas.
O bueno, no era bueno en tratarme educadamente a mí nada más.
Me levanté del suelo finalmente y tomé todas mis cosas, seguido caminé a paso rápido hacia el estacionamiento de la universidad. Ezra me vio a lo lejos y me hizo señas con su mano para que me apresurara, por lo que hice un pequeño trote hasta el auto donde ya Lucinda se encontraba también.
-¿Por qué tardaste tanto? -Me preguntó la asiática en tono preocupado.
Suspiré y esbocé una sonrisa para calmarla.- Sólo me retrasé en el camino, es todo.
Mi hermano se subió en el asiento del conductor, encendió el motor del Corolla y tras salir del estacionamiento condujo en dirección a casa de Lucinda primero; agradecí a Dios de que ambos entablaran una conversación random, mientras que yo miraba por la ventanilla del auto divagando en mis pensamientos.
Estaba asustada por saber quién podría ser el siguiente, y al cruzarse un pensamiento por mi mente fue que palidecí.
Lucinda.
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Ay 😱 Lander no tiene piedad, créen que Lucinda sea la siguiente en ser atacada? Todo puede pasar aquí 👀 les propongo este reto! Deduzcan quién será la siguiente víctima de Lander en ser perseguida, Ezra de nuevo? Lucinda? Los dos juntos? O personas cercanas al grupo de Halia? O la misma Halia 👀 les dejo este reto y quien logre sacar una buena teoría sobre quién es la o el siguiente en el tablero de Lander le dedicaré el próximo capítulo! 👏 voten y comenten por favor! 🙏
¡Dios les bendiga!
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ꜱʜᴜᴛ ᴜᴘ! 🔚 novela cristiana.
Spiritual"Capturada y silenciada por mi fe... más Dios me dará la victoria al final." ➡Historia original. ➡No copiar ni adaptar. ➡Registrada en Safe Creative: 1810118707802 ➡️Portada hecha por: @AbiMartinez- ✨