TENÍAS QUE SER TÚ

Capítulo 13: En las alturas.

POV Daniela:

Eran las 11 de la mañana cuando llegamos al aeropuerto. Poché se veía nerviosa pero en el fondo sabía que estaba saltando de emoción, o eso esperaba. Caminamos por todo el aeropuerto hasta llegar al final de la fila para obtener nuestros boletos, ya que había sido yo la de la idea, fui preparando los documentos y la tarjeta de crédito para costear todo el viaje. A mi lado aquella pelirosa miraba en todas las direcciones, parecía una niña pequeña con su primer viaje en avión, y no era así. En mi cabeza había un solo lugar al que quería ir, hace meses estuve investigando en internet sobre sus paisajes, hoteles, su gente, comida, entre otras cosas. Sabía que habíamos dicho que sería el primer destino, pero los próximos en despegar no eran para nada atractivos a nosotras, sí, dije una pequeña mentira anoche, fue una excusa para poder escoger el lugar pero sabía que a Poché no le molestaría en lo absoluto, al contrario, tenía muy buen presentimiento de aquel viaje.

Después de comprar nuestros boletos salimos casi dando saltitos hacia la zona de equipaje y ambas entregamos las maletas. Al finalizar el chequeo fuimos a desayunar, faltaban aproximadamente dos horas para poder abordar el avión así que quedaba tiempo de sobra. Ambas optamos por unos sandwichs de jamón de pavo y queso junto con un latte. Al sentarnos en la mesa comenzamos a desayunar y comentamos lo emocionadas que estábamos por el destino escogido, en ningún momento se quejó por haberle mentido anoche, justo como lo había imaginado.

Amor yo siempre quise ir, te lo juro que me muero por llegar. — Me dijo al finalizar su desayuno. — Gracias por escogerlo.

Sí, lo único malo es que aún nos quedan 21 horas de vuelo... — Dije riendo mientras le guiñaba el ojo y le daba un sorbo a mi café.

¿¡21 HORAS DE VUELO!? — Dijo en voz alta, haciendo que los pasajeros cercanos voltearan hacia nosotras. Solté una carcajada y asentí con la cabeza.— Ay no gorda, eso es demasiado. ¿Y si me da un ataque allá arriba?

Tan exagerada... — Seguí riendo y al acabar mi desayuno me levanté para poder llevar todo al basurero.

El tiempo pasó muy rápido, en segundos ya estábamos abordando aquel avión. Nos sentamos en nuestros respectivos asientos y después de una mínima discusión dejé que Poché se quedara con el lado de la ventanilla. Abrochamos nuestros cinturones y entrelazamos nuestros dedos, no podía eliminar la sonrisa de mi rostro. Escuchamos el típico mensaje de información por parte de las aeromozas y Poché cerró los ojos en el despegue, sentí que iba a esguinzarme la mano por la forma tan fuerte en la que apretó, yo simplemente me acerqué y besé su cabeza. Aquí comenzaría esta aventura. 

POV Poché: 

(+18)

Estaba hecha un manojo de nervios, habían pasado varias horas y necesitaba volver a tierra firme, la turbulencia repentina hacía que mi corazón saltara queriendo salir de mi pecho y mis manos apretaban con fuerza las de Daniela, mi cabeza daba vueltas. Nunca había sido muy amante de los aviones, los evadía muchísimo y aunque sabía que íbamos a un lugar precioso, comenzaba a arrepentirme de haber accedido. Miré a mi lado y mi acompañante parecía muy tranquila,  tenía puestos sus audífonos y veía fijamente la pantalla de su celular. ¿Cómo era eso posible? Envidiaba aquella paz. Cerré los ojos e intenté mantenerme tranquila, aún quedaban un par de horas más. 

Desperté gracias al sonido de una puerta, supuse la del baño. Me moví un poco en el asiento y suspiré mirando por la ventanilla, no se veía nada más que oscuridad y un par de luces lejanas, nada muy artístico. Daniela a mi lado dormía profundamente, me levanté con cuidado tratando de no despertarla, pero fue en vano, apenas abrió los ojos me tomó de la mano.