Capitulo 32: Noche buena y Wonho

422 56 18
                                    

-¡Vamos ______!- grito Wonho mientras corría detrás mío vestido de traje -¡No podes estar enojada por siempre!-

-¡Si puedo! ¡Y no me grites!- le respondí histérica mientras iba hacia la sala donde había dejado mis zapatos y me sentaba en el sillón que estaba en medio del lugar.

-Te lo iba a decir te lo juro- se arrodilló frente a mí y me ayudó a colocarme los zapatos mientras continuaba hablando -solo se dió, ni yo sé cómo pasó pero cuando menos nos dimos cuenta ya nos veíamos todos los días e intercambiamos demasiados mensajes- contó con suavidad y yo me arecoste por él respaldo del sillón dejando que él se encargue de colocarme los zapatos -un día me atreví a invitarla a salir y ella acepto. Nos llevamos tan bien, reímos todo el tiempo y nos entendemos sin decir nada- con la atención en mis zapatos una pequeña y brillante sonrisa se le escapó en cada palabra. Sonreí con él sin que se diera cuenta, ya que tenía que seguir haciendome la enojada -te lo iba a decir pero no encontré el momento con tantas cosas que pasaron- agrego al terminar y levantó la vista hacia mi.

Antes de que me vea borre mi sonrisa y me puse seria.

-Esta bien, lo entiendo... Después de todo tampoco pasó mucho tiempo desde que empezaron a salir y todo eso- Wonho esbozó una sonrisa y se la quite al decir -pero igual iremos a la fiesta de tu padre-

Me levanté y fui hacia la puerta de salida dejándolo atrás.

Durante todo el camino al auto se quejaba de la fiesta y paraba cada vez que le recordaba que aún estaba enojada por el hecho de que me había ocultado las primeras salidas con su novia, Soyou. Después de cinco minutos de estar manejando en silencio Wonho comenzó a contarme su historia.

Al parecer antes y después de los programas, Wonho y Soyou, hablaban demasiado. Comenzaron quedando en el gimnasio donde Wonho ayudaría a Soyou a mejorar su rutina diaria. Su forma de hablar y bromear coincidieron a la perfección. Wonho se había animado a invitarla a salir y esa cita termino en un beso, que no tardaron en repetir más adelante.

Todo eso me contó de camino y al llegar a la mansión Shin, en medio de la gran fiesta y luego de representar a la pareja recién casada más perfecta en todos sus sentidos, Wonho termino la historia en el solitario balcón.

-El día que fui a entregarte los papeles del divorcio formalice con Soyou en la noche, estaba enojado y frustrado por la discusión que tuvimos en la calle- se acercó a mí y me abrazó con fuerza -te grité horrendo y te quite mi apoyo cuando más lo necesitabas- admitió en voz baja y no pude evitar sentirme culpable, quería decirle que yo también estuve mal pero no quería interrumpirlo -pero en cuanto la vi- se separó y me miró, con un tono de súplica dijo -no me mates porfavor, pero... Me olvidé de todo con sólo verla ahí parada esperándome-


Y ahí lo supe, Wonho se había enamorado de verdad. Conmigo era una especie de admiración, por la determinación y mi forma de enfrentar las cosas cuando me conoció, pero al verlo sonreír de una manera tan brillante y tierna supe que ahora de verdad sería como su hermana pequeña, y no como algo más que nunca llegaríamos a ser.



Pasaron seis días y mañana sería noche vieja, mañana debía decidir si ir o no con Kihyun.

"-Voy a esperarte en el Central Park enfrente del árbol navideño hasta media noche, si no vas, lo entenderé y definitivamente te dejare en paz- dijo Kihyun y luego dejó un beso en mi frente, yo cerré mis ojos para disfrutarlo y cuando los abrí el ya se estaba yendo."

¿Qué iba a hacer? Suspiré mientras miraba el techo de la habitación.

-¿Algo anda mal?- pregunto Wonho mientras salía de la ducha con una toalla en la cintura y con otra sobre su hombro.

-Tú, tú andas mal- me senté -no deberías andar así enfrente de otra mujer que no sea tu novia- le recordé y volví a tumbarme en la cama.

La risa de Wonho resonó en la habitación.

-Ella no es celosa- su voz se la escuchaba más baja mientras se iba hacia su habitación repleta de ropa. Salió con unos vaqueros puestos -ayudame a secarme el cabello- dijo sentándose en el piso frente a la cama.

-Esta bien- respondí desganada y tome la toalla de su hombro para comenzar a secarle el cabello.

-¿Segura que no pasa nada?- pregunto mientras tenía la cabeza agachada -andas demasiado callada últimamente y ya no me gritas ni insultas tanto como antes-

-¡Hey! ¡Yo no te insulto!- grité dejando de secarle el pelo -bueno, solo a veces- admití bajo mientras volvía a secarle el pelo.

Wonho volvió a reír.

-______...- solté un "mhn" en respuesta -sabes que contas conmigo para cualquier cosa ¿Verdad?- hizo su cabeza hacia atrás para mirarme.

La ternura me invadió, se veía tan tierno y lindo sentado con sus piernas cruzadas con el pelo húmedo y sus ojitos tiernos viéndome, que lo abracé con fuerza.

-Si oppa- respondí tierna y los dos reímos.

-_____... Si me seguís tocando así el pecho voy a pensar que me estás queriendo seducir y llegará el año nuevo con una buena noticia para mí suegra- dijo juguetón a medida que se paraba y colocaba su cuerpo sobre el mío.

Por instinto retrocedí.

-Wonho... No hagas que le diga a Soyou que le vas engañar conmigo- la sonrisa pícara de Wonho se borró y mi lamparita se encendió -cierto...- a largue la "o" y Wonho retrocedió -ya lo hiciste...- declare con una sonrisa recordando las veces que me había besado.

-No te atreverías- declaró Wonho con una gran sorpresa tanto en su mirada como en su voz.

-¿Querés probarlo?- lo desafíe.



Nos la pasamos toda la noche corriendo, Wonho me perseguía mientras yo, con el celular en mano, le amenazaba con llamarle a Soyou.

Después de estar corriendo una hora por toda la casa nos tiramos derrotados en el sofá.

-Es Kihyun- declaré de la nada entre jadeos -pidio vernos-

El ambiente quedó en silencio y Wonho se acostó por el largo del sofá dejando descansar su cabeza en mi vientre, yo pasé una mano por su pecho y con la otra acaricie su cabello.

-Lo que seas que decidas, te apoyaré, pero no esperes a que no lo golpeé luego de que te haga llorar de nuevo- tomo con fuerza mi mano -así que decide con el corazón que yo voy a estar ahí para sanarte-

-¿Aunque te cueste perder a Soyou?- pregunte con miedo y deje de acariciar su cabeza.

Él se reincorporó y me miró.

-Aunque me cueste a Soyou- dijo con dolor después de unos segundos.


Entonces ahí supe otra cosa más, Wonho haría de su vida un infierno por su "hermanita".


-Despues de todo, gracias a mi pequeña y dulce ______ logré obtener mi mayor sueño, todo lo que conseguí después de que lo cumplí es gracias a ti y si pierdo cosas en el camino es porque no son lo suficientemente buenas para mi- dejo un beso en mi frente y dijo -vamos a dormir-


Se levantó y se fue, dejándome pensando.

La Gorda Kii (KH) [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora