Capitulo 22

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-¡Hola, Jefe! -me saluda Paco desde el mostrador.

-Biel te espera en su oficina-me comenta Olivia al pasar junto a ella.

-Iré a verlo-salgo prácticamente corriendo de ahí, solo que en lugar de ir a su oficina corro a encerrarme en la mía.

Apenas y puedo girar la perilla, mis piernas se doblan ante la insoportable erección con la que he tendió que aguantar desde el estacionamiento de mi cafetería favorita, apenas y puedo recargarme sobre mi escritorio para intentar calmarme un poco, Thor insistió en que debíamos entrar por separado o terminaríamos haciéndolo en la primer superficie que viera, y aunque la idea no me desagrada sé que cuando me baje de esta maldita nube de placer voy a estar muy avergonzado por mis acciones.

Diez malditos minutos y aun no aparece!" grito en mi mente, voy a comenzar a comerme las cutículas de mis uñas si ese hombre no atraviesa esa puerta antes de los siguiente diez malditos minutos. Con algo de frustración me sacó los pantalones incómodos dejándolos doblados en uno de los cajones de mi escritorio, sigo sin poder creer que tan solo en unas horas mi ropa haya dejado de quedarme, tal vez comí demasiado o tal vez esa ropa de por si era muy chica para mí. Justo cuando creí que moriría por retener tanto tiempo una erección, el sonido de fuertes pisadas llena el pasillo y al poco tiempo aparece frente a mi un muy agitado Thor, no le di tiempo ni a respirar, lo tomo del cuello de su camisa y lo empujo contra la puerta atacando sus tan necesitados labios.

-Mmm-el sabor de su boca me hace gemir de felicidad, enredo mis dedos con desesperación en su cabello atrayéndole lo más que puedo hacia mí.

-Aah...Mmm-nuestros dientes chocan haciéndonos jadear, sus manos sujetan mis caderas para elevarme a su altura, pero se detienen al sentir que no llevo mis pantalones -Loki, necesito tenerte...-dice entre besos y jadeos.

-Aah-logro romper el beso-Sófa...mmm-vuelvo a devorar sus labios, rodeo su cintura con mis piernas y froto mi furiosa erección contra su abdomen haciéndolo tambalearse.

Por fortuna logramos llegar al sofá sin accidentes, me recuesta para poder abrir mi camisa y llenar de besos mi piel expuesta, intento sacarle la ropa pero sus labios toman prisionero a uno de mis pezones y el mundo culmina para mi, entierro mis uñas en su pecho mientras un increíble orgasmo se lleva mi alma casi fuera de mi cuerpo. Thor me observa algo sorprendido por la rapidez en que me vine, mi cuerpo tiembla y se calienta de ver como mi enorme león desciende entre mis piernas a limpiar todo rastro de semen, su lengua se torna áspera como la de un felino provocándome descargas de placer por todo mi abdomen hasta regresar a mis pezones demasiado sensibles por mi embarazo.

-Conejito...-su aliento contra mi sensible pezón me hacen retorcer de placer, quiero empujarlo tanto como quiero mantenerlo en su lugar-Alza tus caderas...-abandona mi pezón izquierdo para atacar al derecho mientras sus dedos hacen círculos en mi aureola.

-Aah...mmm-los dientes de Thor roban suspiros de mis labios-Más...Thor quiero más -alzo mis caderas para frotar mi erección contra la suya todavía cubierta, él aprovecha y me quita la ropa interior.

-Voy a poseer tu dulce cuerpo hasta saciarme-sus palabras son seguidas de un cambio de posiciones, ahora me encuentro sentado a horcajadas sobre mi hermoso Dios rubio.

Mi trasero se contonea sobre su caliente erección cubierta, no dudo en arrancar su estorbosa camisa y poder lamer su caliente pecho, presiono su marcado abdomen tanto con las palmas de mis manos como con mi furiosa erección. Sus manos se abren paso entre mis nalgas, uno de sus dedos frota mi húmeda entrada hasta que empuja casi la mitad de este en mi interior, mi cuerpo se arquea empujando mis caderas aun más contra el delicioso invasor, sin embargo el dedo no se mueve como tanto lo necesito.

Problemas con OrejasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora