Capitulo 14

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—Estoy gordo—giro nuevamente y me veo de perfil en el espejo del baño—Por lo menos dos kilos—vuelvo a girar—Estoy casi seguro de que me creció algo.

—Estás pensando demasiado —me regaña Thor, sus dedos trazan un pequeño bulto en mi abdomen.

—¡Ahí está, lo estas tocando!

—Claro que no, sigues teniendo cuerpo de Barbie—sus manos jalan mi piel por lo que el bulto desaparece—No has subido de peso.

—¡Que sí! —quito sus manos y toco el pequeño bulto —¡Voy a ser una vaca gorda! —lloriqueo.

—A mi no me importa—las manos de Thor bajan a mi trasero—Creo que creció un poco—vuelve a tantear mi trasero—No puedo estar seguro...  Tal vez con un acercamiento más profundo—sus manos separan mis nalgas, mi piel se torna en piel de gallina por la anticipación.

Rodeo su cuello con mis manos y acerco mi rostro al suyo en busca de un tan necesitado beso, pero el inoportuno sonido de mi celular sonando a todo volumen el tono de llamada de mi Padre hace que mi caliente sangre se enfríe de golpe, alejo a Thor de mi lado y corro a contestar su llamada pero el tono termina anunciando que he pedido la llamada. Me visto rápidamente colocandome dentro de la primera camisa que encuentro, estaba por subirme los pantalones cuando el tono de mi Padre vuelve a llenar la habitación esta vez contesto al segundo timbre. Los nervios me invaden, no hay duda de que Padre se dará cuenta.

—¿No vendrás a casa Loki? —la directa pregunta me da algo de donde agarrarme.

—No, Padre. Me tengo que tengo demasiado trabajo en manos, tal vez el siguiente mes yo pueda... —suspiro dramáticamente, pero él me interrumpe.

—Eso no es lo que he oído de Biel—su tono serio hace que me sienta como un niño pequeño nuevamente—Dime hijo, ¿Hay algo qué quieras decirme?

—Pues—observo a Thor saliendo del baño con solo una toalla alrededor de su cintura, muerdo mis labios para que mi Padre no me escuche gemir—Ah, demonios si —suspiro pesadamente—Yo acabo de encontrar a mi compañero.

—Oh, no estaba preparado para eso—recompone su voz de papá serio —¿Porque no lo traes a casa entonces? Sabes que tu Papá y yo querremos conocerlo, igual tus hermanos.

—La verdad es que—peino mi cabello hacia atrás y me siento en mi cama—Yo estoy terminando mi celo y... Él se pone un poco territorial al respecto.

—¡¿Estás en celo?! —mi oído casi vuela de mi cabeza—¡¿Tan pronto?!, ¿Has comido bien?, ¿Necesitas medicina para acelerar tu curación?, Recuerda no salir en ningún momento de tú departamento.

—Tranquilo, Padre. He manejado bien las cosas, de hecho hoy es mi ultimo día, mañana iremos a ver al doctor de Thor para que nos haga un chequeo general y... —nuevamente me interrumpe.

—¡¿Oh, por Dios estas en cinta?! —casi puedo escuchar a Padre preparando una maleta.

—¿Qué? No, es solo que Thor toma medicamentos especiales y amm...—se me traban las palabras—Solo no vengas, estoy seguro que no es eso.

—¡Loki Laufeyson! ¡Yo soy tú Padre, debo estar contigo en momentos como estos, tú me necesitas!

Iba a negar totalmente su obvia razón y eludir mi falta de experiencia con infantes, pero de solo recordar esas pesadillas donde uno de mis niños resulta herido, un escalofrío recorre mi espalda de solo pensarlo, suspiro pesadamente. Mi padre al otro lado de la linea continúa diciendo todas las razones por las que debo tenerlo a mi lado en este momento, para que mi padre no se percate de que he estado divagando en mi propiamente decido darle la razón.

Problemas con OrejasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora