Magnus camino por su departamento como si fuera divertido andar asi, en patas, sin medias ni zapatillas ni pantuflas ni nada. Sintiendo bajo sus pies la madera fría en su piel.
La puerta golpeó fuertemente y revoleo los ojos. Se acercó hasta la misma y era Raphael.
- Hay unos pendejos que te quieren ver.
La fiesta de fondo era escandalosa, era una locura. Claro. Magnus hizo una fiesta pero estaba encerrado en su pieza. Que lógica hay en eso?
- Pusiste pisos de madera?
- No es genial! - El brujo dio una vuelta en sí mismo disfrutando de sus pies descalzos tocando la madera barnizada y brillante.
- Lo que sea, es tu cueva. - Magnus lo miró mal por decirle cueva a su santuario.- Podes sacarlos. Vinieron con un mundano y mis chicos se están alterando.
- Shadowhunters? - La atención del brujo se despertó repentinamente.
- Si.. - El vampiro lo miró raro.
- Vino el alto que tiene un coso de flechas?
- Son todos altos para mi idiota. - Raphael se alejo y se fue ofendido por su comentario.
Magnus puso sus ojos de gato y antes de salir se arregló el pelo en uno de los tantos espejos. Camino entre los tantos subterráneos que andaban bailando y borrachos. Sus pies brillaban con unos zapatos de charol dorados que había hecho aparecer sin siquiera hacer tanta magia.
• • •
- No puedo creer que me hayan... - Protesto el mayor de todos en la puerta del departamento de Magnus Bane.
- Alec! Está bien divertirse de vez en cuando! - le interrumpió su hermana menor acomodándose el vestido rojizo.
- No negociamos con subterráneos. Esto es un error, si la clave se entera..
- Basta Alec, no se van a enterar. - Dijo Jace empezando a subir junto con Clary que era mirada con algo más fuerte que odio por el joven alto.
- Qué es lo que vamos a encontrar? - Susurro Simon a Izzy que le tomo la mano y enseguida entraron se fueron a la pista a bailar.
- IZZY! - Grito Alec en vano.
- Hey.. - Jace le tomó el brazo.- Sabe cuidarse, tranquilo. Vamos a buscar al tal Magnus Bane, el brujo mayor... - dijo como burla.
- Y vos sabes cuidarte Nefilim? - Le interrumpió Magnus, parado delante de el, siendo observado con miedo por Clary. Miedo por sus ojos de gato amarillo brillante.
- Vos.. - Dijo Alec.
- Yo. - Dijo Magnus.
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- Necesitamos de tu ayuda. Podemos hablar en un lugar más privado?
Magnus no quitó los ojos de encima de Alec ni Alec miró a otro lado, fue como si la habitación hubiera quedado vacía y la música anulada.
- Magnus? - Dijo Clary luego de unos 10 segundos.
- Que poca paciencia zanahoria. - Le contestó un brujo con la edad suficiente como para atender dos asuntos a la vez. Estar escuchando a una nena aburrida llorando dramas que no le interesaban y plantando la semilla del amor en los ojos de su próxima victima.
- Nos vas a ayudar? - volvió a decir.- Es sobre mi mama... Jocelyn
- Ohh si la recuerdo! - Le interrumpió, mirándola por fin al rostro.- Como esta la desertora?
- Esta.. - Clary no pudo decirlo.
- Podemos hablar en un lugar privado? Es un asunto secreto.
- Hasta que te despertaste. - le dijo a Jace, que se sonrojo por el comentario.- Vamos a mi oficina.
Magnus comenzó a caminar por el mismo lugar que había caminado antes pero en reversa hasta su habitación. Una vez que todos entraron tras el, giro y con un hábil movimiento de su mano la puerta se cerró.
El sonido se cancelo y solo quedaron los sonidos de las camperas de cuero, las botas de cuero y los ojos verdes azulados que miraban el piso de madera.
- Te gusta? - Alec levanto la vista e hizo un si sin hablar, un si casual de disimulación de nerviosismo. - A mi también. - Le comento contento, satisfecho.
- Podemos pasar a lo importante? - Dijo Jace.
Y Magnus quería mover su mano y echarlos a la mierda.
