Parte 20

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Llego al castillo. No está en la entrada como de costumbre. Debe estar liado con los preparativos.

Al entrar me sorprendo al ver tantos robots. Todos en filas. Supongo que son el cuerpo de seguridad que va a haber. ¿Vamos a ser tantos?

Subo hasta mis aposentos. Val está dentro junto con Doom. Están hablando de cifras. Peto a la puerta.

-Entra-dice su voz.

Yo entro saludo y me voy a los aposentos de al lado. No quiero molestar.

-400 personas serían.

-Somos bastantes. Procura que haya de todo: alojamiento, comida, bebida, espacio...deseo que se sientan como en casa.

-Sí, señor-dice y se va.

Yo me he tumbado en mi cama. Pienso en lo que me ha dicho la anciana. Mi padre. El afrodisíaco. Víctor.

-Ejem-dice él apoyado en la puerta. Creo que tienes algo que darme.

Me pongo roja. 

-Está en el recibidor.

-Dámelo tú-dice.

Me levanto. Desde aquel día no le he vuelto a ver con la armadura. La verdad que lo prefiero. De esa manera, sé que estoy con un ''humano''.

Se lo doy en la mano. Es un frasquito muy pequeño, con un líquido púrpura dentro.

Me agarra y me lleva contra sí. 

-Lo pasaremos muy bien esta noche, me parece a mí.

Me callo. LE ODIO MUCHO.

-Señor, no me encuentro bien. Por fa....

Un beso. Un beso robado. No opongo resistencia. ¿De que serviría?

-Descansa, esclava mía. Te deseo con energías para lo que te espera-dice con una sonrisa y se va. 

Yo me quedo mirando la puerta. No me veo participando en ''eso''. Por supuesto que no.

Aprovecho que estoy sola para sacar el mapa de mi libro  de Latveria. He tenido tiempo para robar los planos del dispositivo. Fue difícil, más sabiendo las medidas de seguridad y con mi camuflaje fue pan comido.

Los abro. Por desgracia la puerta de mi habitación no tiene puerta, así que lo hago en el baño.

Tiene un botón que lo desactiva temporalmente, una media hora como mínimo. Se carga con energía solar y se desactiva al no haber carga o al pulsar ese botón. Es rojo. 

Tengo el número de SHIELD. Mi poder se encargará de desactivar la central. Haré una videollamada y se la mandaré.

Calco el botón. Las plantas han desactivado las comunicaciones, espero que no se den cuenta, he procurado desviar las cámaras. Ya veis, control remoto plantil. Calco las palancas y se apaga todo el sistema operativo de la central. Es ahora o nunca.

Una de las cosas que no me quito Doom fue una tobillera con una micro-cámara en forma de estrella.

"Hola papá-digo con el accesorio en frente de mí-, ésta será la última vez que hable contigo. No vengas. Hay mucha vigilancia, muchas armas... ni los Vengadores pudieron con él. Por favor, no seas insensato. Estoy bien. Sigo siendo la misma. No os he olvidado. Hecho de menos a mamá, sus tartas, sus cuentos por la noche, sus besos...-estoy a punto de llorar, pero no me rendiré no ahora-y a ti, con tus consejos, tus palabras, los helados de vainilla, el parque, tu amor. Vuestro amor. 

Tengo...tengo... una buena o mala noticia, depende de cómo la miréis...para mi es buena...voy...vais...a ser abuelos-levanto la cámara y señalo mi vientre- y yo madre. El padre es Doom, evidentemente... Por favor, no me rechacéis por ello...amo, amo a mi hijo o hija...no quiero volver, esta vez, lo digo sin ningún tipo de tortura detrás de mí. No quiero criar a mi hijo sin su padre. No lo soportaría. Vivid vuestra vida. Yo viviré la mía lo mejor que pueda. Tal vez sea una vuelta a empezar de nuevo. Charles ya no está, ahora en su lugar está Víctor.

Os amo con todo mi corazón, no vengáis, os amo. Adiós...por siempre.''

Paro la grabación. Lo envío.

Un ''su mensaje ha sido enviado y ha llegado a su destino'' me da el mayor alivio de mi vida.


Me doy una ducha. No dejo de pensar en el mensaje. 

Volví a encender la central y la máquina de mi espalda vuelve a funcionar. Los planos están en su sitio, todo está en orden.

Cuando salgo de la ducha y me voy a mi habitación un robot me coge de los brazos.

-¿¡Qué ocurre!?

Este me tumba y me tapa en la cama. Viene Víctor.

Se sienta a mi lado y reproduce un mensaje con su móvil.

''La central de telefonía ha sido desactivada durante diez minutos por un factor desconocido que impulsó a las palancas cara abajo. Todo está cubierto de plantas''

Lo para.

-Señor, yo...

-Atiende, esta es la mejor parte.

''Se tiene constancia de que se ha mandado un archivo al buzón de mensajes del correo oficial de asuntos internos de SHIELD''.

Se me para el corazón.

-No se lo que has mandado, pero espero una buena explicación. Más aún por el desastre que armaste en la central.

Expulsó aire mientras me enderezo.

-Víctor, tu mano-digo ofreciendo la mía.

Él, me la da, con desconfianza. Se la apoyo en mi vientre.

-Eran una videollamada para mis padres. Les quería dar mi último adiós y darles la gran noticia.

Víctor atento, escucha.

-La anciana dijo que lo que me atormentaba debía desaparecer. Llegué a la conclusión de que el problema era mi vida pasada.

-Está bien. Por esta vez, quedas perdonada.

Me tumbo. Estoy feliz.

-Creo que es una niña.

Él sonríe.

-¿Qué te lleva a pensar eso?

-La intuición de madre primeriza.

El da un beso en el vientre y luego otro en mis labios, el cual yo acepto.

-¿Qué llevarás esta noche?

-Un vestido

-Supongo que no me querrás dar detalles.

-No-digo con superioridad. ¿Y tú?

-Un traje.

-Víctor. ¿Por qué no llevas armadura?

-No quiero que los extranjeros sepan nada de mi rostro. Además tenía miedo de tu reacción. No es común ver un rostro con tantas cicatrices.

-Ja. ¿Viste mi espalda?

-Si. Me sorprendió que no te aterraras.

-¿Por qué me iba a aterrar?

-No soy, que digamos, atractivo.

-Para mí, si lo eres. No dejo que me haga un hijo cualquiera.

El me observa.

-Te noto más abierta.

-Me siento más tranquila.

-Te amo, esclava mía.

-Y yo a ti, mi dictador.



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Víctor von DoomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora