capitulo 3 💟

9.1K 309 11
                                    

Los arboles pasan  y pasan como imagenes borrosas. Hace mucho que deje de ver calles pavimentadas, casas iluminadas y personas paseando. Me agarro a los bordes del asiento para no estamparme de frente cada vez que pasa un tope o un obstáculo .

Mi cabeza golpea la ventanilla al pasar un tope como si nada. Veo todo borroso y la cabeza me da vueltas.  Tengo que morderme la lengua hasta doler, para no gritarle que no lleva vacas en la parte trasera.

Deje de insistir en entablar una conversacion con el. Grite. Patalee. Golpee. Trate de preguntarle amablemente donde me llevaba. Era inutil no me contesto ni siquiera tuvo la gentileza de mirarme.

Reviso mi celular por quinta vez cada 5 minutos a ver si tenia señal y para mi mala suerte no. Volteo a todos lados y solo veo tierra. Campos y caminos deshabitados. Tengo miedo pero no lo demuestro si muero que sea con la cabeza en alto.

De repente mi cabeza se estampa enfrente y me mareo por un segundo. Mi cabeza me duele en la parte de enfrente y veo lucesitas por sobre mi cabeza. Me agarro la cabeza con las manos y gimo de dolor al palpar  una parte donde siento algo viscoso.

Separo lentamente la mano y ahogo un grito al ver sangre en mi mano. Mi pulso se acelera. Las piernas me tiemblan. Levanto la vista y lo veo. Las manos hechas puño en el volante con los nudillos blancos. La postura tensa en guardia. La mirada fija en un punto frente a el.

Un carro negro atravesado con los vidrios poralizados impidiendo seguir nuestro camino. Un minuto. Dos minutos. El auto negro ruge. El lo imita. Soy impulsada hacia atras repentinamente. Me golpeo la espalda y los brazos. El auto acelera hasta parecer que vuela. Unos chirridos y despues el otro carro pisandonos los talones.

Rebotó de aqui para alla golpeandome el cuerpo una y otra vez. El hombre hace zig zag. Aumenta la velocidad. Doy un grito cuando el vidrio atras de mi se rompe en mil pedazos clavando pequeños vidrios en mi piel. Sus ojos me miran por el espejo retrovisor y al instante tengo un arma apuntando a mi cara. Al instante de bajar la cabeza oigo el disparo aturdiendome por un segundo.

La lluvia de balas no se hace esperar. Me acurruco atrás del asiento y me hago bolita implorando y rezando a quien me escuche no morir en esta noche.

¿ que hice yo para merecer esto?. Fui tan mala en mi vida pasada para pagar en esta vida. O MI DIOS!!! Nada más en pensar estar en vuelta nuevamente en este ambiente me dan ganas de vomitar.

Por eso me aleje lo más que pude pero  creo no hice un buen trabajo por que me encontraron. Nunca me perdonaría si le pasará algo a mi niña. Ella es la razón por lo que hago las cosas.

El auto se sacude violentamente derrapando y deteniéndose  completamente. No logró sujetarme a tiempo y mi cara besa el suelo quedando con el trasero para arriba. En una pose un tanto extraña e incomoda.

La puerta se abre y puedo sentir el aire frío por mis piernas. Un carraspeo me fastidia pero lo ignoro. Se que le estoy dando una buena vista, pero estoy tan adolorida de cada parte de mi cuerpo que simplemente ya no me importa.

Sigo sin moverme aunque el cuello me este matando. Un minuto más y cierro los ojos. No me importaría quedarme dormida en esta posición. De repente siento unos brazos rodear mi cintura y pegarme hacia un pecho cálido y duro.

Dios!!! Pongo mis brazos alrededor de su cuello y cierro los ojos somnolienta. Su perfume me embriaga y me hace querer perderme entre sus brazos. Su aliento roza mi frente y me hace estremecer. Su corazón hace pum pum pum rápidamente.

¿ Lo pondré nervioso?  Nah qué va. Después de todo lo que presentie esto no es nada. Siento una superficie blanda y suspiro de alivio.

Me estiro y sonrió al poder dar descanso a mis adoloridos huesos por un rato.

Viviendo Con ElDonde viven las historias. Descúbrelo ahora