Camino al Desastre

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Camino al desastre

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Yukina

Aunque ya no hace tanto frio seguimos abrigados hasta las orejas, Yokozawa escribe los resultados del práctico de matemáticas en la hoja principal mientras su sándwich de huevo se mantiene intacto sobre su platillo. No es eso lo que me llama la atención, es la marca violeta en su cuello, aparece cuando gira su cuello a la izquierda y anota y desaparece en cuanto se mueve, es un punto improbable para que le hubieran pegado ayer, pero debe ser eso ¿verdad? Yokozawa no va a liarse con las chicas de la universidad y con los chicos un poco menos, comenzando porque Yokozawa parece tener ojos solo para Kirishima Zen y él tiene novia.

Es raro que no tuviera los deberes listos ya, pero ayer fue un día complicado para él, la pelea y...

— Se me olvidaba, ¿sabes lo que paso con Kirishima ayer?

— Eh – levanta la vista y me mira... me mira como queriendo protegerse de mí, como si desconfiara, estoy a punto de reírme de su rostro seria cuando una irritante vos suena detrás de mi

— ¿Qué pasa conmigo? – desde atrás la vos de Kirishima suena y luego lo veo caer sentado junto a Yokozawa, como si la gravedad lo arrastrara a chocar su hombro con el de Yokozawa

— Le diste una paliza a ese chico en el jardín de la universidad – digo y con eso basta porque Kirishima se infla con orgullo, un matón con sonrisitas de chico bueno, sus risos le hacen parecer inocente, pero es, sin duda lo más lejano a ello, es un cabron, puedo reconocerlo a kilómetros y puede que no me agrade por eso, así que espero que al menos se avergüence de lo que hizo – tuvieron que llevarlo al hospital... no volverá este semestre

— Ojala aprenda – Kirishima le da una mascada al sándwich de Yokozawa que ni se queja ni se inmuta – es bueno – dice mirándome – que la gente sepa con quien sí y con quien no... ¿entiendes?

Me parece extraño que me amenace, pero es un cretino, funciona así, siempre quiere intimidar. No respondo a su provocación. No quiero pelearme con el estúpido amor platónico de Yokozawa, porque sé con seguridad que Yokozawa saltaría al fuego por este idiota.

— ¿Cómo despertaste? – la mano derecha de Kirishima se apoya en el hombro de un sonrojado Yokozawa... vuelvo a mirar, miro dos veces y si, Yokozawa esta sonrojado mirándolo.

— Bien... llegue a tiempo a clases

— Yo no lo logre... pero por suerte el señor Hong me dejo pasar

— Qué bueno

— Ya acabaste... vamos, tenemos laboratorio

— Eso es hasta dentro de media hora

— Vamos – la mano de Kirishima va del hombro al cuello tocando la oreja de Yokozawa sin tocarla completamente, solo rosándola.

— Aun me queda un página... anoche no pude hacer mis deberes - Yokozawa sonríe yo siento un vuelco ante lo que veo – tengo que terminar esto...

— Está bien si te dejo solo – Kirishima no me mira cuando lo dice, como si yo no estuviera ahí

— Si, encontrare el camino

— Nah, - Kirishima sonríe - tienes hasta que vaya a mear para acabar tu tarea o la harás en el laboratorio, - veo como Kirishima se va, veo su carpeta sobre la mesa junto a Yokozawa y veo a Yokozawa sonreír.